llévame contigo - larry

13. amigos de styles

...

Intenta explicarle a una niña de cinco años que estar sangrando por la nariz es normal. No es cosa fácil, a menos que la niña sea la misma Jessica Styles. Louis percibió desde el primer momento que era una chica lo suficientemente inteligente para poder entender cualquier cosa que le explicaran. "-Soy perfectamente capaz de entender Harrry." Les dijo cuando el rizado le pidió que por favor, no se alterase para que el pudiera mantener la calma mientras conducía. Quizá había visto a Louis en su estado más vulnerable mientras vomitaba la comida y maldecía todo lo que tenía al alcance. Pero esto era algo nuevo. Y no quería preocuparse.

Cuando llegaron al hospital Harry bajó corriendo por una silla de ruedas sin preguntarle al chico de los bonitos ojos si era necesaria.

-La verdad es que podía haber bajado caminando. -miró a Jessy con una sonrisa que iluminaba sus ojos.

-¿Duele? -Ignoró el comentario ahora preguntando con mayor libertad ya que Harry no estaba.

-¿El qué? -Louis le mantuvo la mirada unos instantes, observando lo bonita que era para su corta edad.

-El estar muriendo. -habló con toda la seriedad que pudo. Louis soltó un suspiro.

-No es como los demás se imaginan. -hizo más una mueca al intentar sonreír.

-Entonces, si yo pienso que estar muriendo duele...-pensó un poco. -¿No duele?

-Es algo parecido a estar quedándose dormido día a día. -asintió con la cabeza.

-Dormirse no duele. -sonrió Jessy.

Observaron a Harry venir corriendo mientras empujaba la silla de ruedas.

-¿Quieres mucho a Harry? -está vez Jessy lo miró con una inocente sonrisa.

Louis se quedó observando la belleza del chico de rizos.

-Mucho. -murmuró perdido observándolo.

Mientras más rápido bajaba Harry por la rampa más nervioso se veía. La silla de ruedas se atascó con alguna piedra o algo ocasionando que se detuviera en seco, causando que Harry se golpeara la cadera con los mangos de empuje, en un lugar cercano a la entrepierna, provocando que soltara un grito de dolor; mientras dentro del auto Louis y Jessy reían a carcajadas. Vieron como Harry agitaba los brazos tratando de alejar su dolor, y torpemente se frotó la parte golpeada para aliviar su dolor, lógicamente en vano.

Una vez que llegó al auto, Louis bajó corriendo mientras decía: "-Anda, vamos." Y Harry se quedaba congelado ante su reacción. ¿No podía haberle dicho que era innecesario el aparato? Únicamente escuchó las risas de su hermana menor mientras Louis entraba corriendo al hospital debido al frío que había comenzado a hacer.

Finalmente le dijeron que había sido algo común, pero que se quedaría en reposo ahí hasta el día siguiente.

Harry avisó a Jay sobre lo que había ocurrido y ella entre hipidos le agradeció mucho a él y a las pequeñas coincidencias que les sucedían.

...

Liam regresó a clases.

Y Harry se sorprendió al observar que iba en su misma clase de historia. Quizá no estaba enterado porque había dejado de asistir a mitad del primer semestre. Tenía que ponerse muy al tanto. Pero ahora no había problemas, nada se le dificultaría más pues ya no tenía preocupaciones. No llevaba más los tubos conectados a sus fosas nasales y tampoco arrastraba con él un carrito de oxígeno. Y podía extrañar esas costumbres por muy extraño que fuese, pero lo hacía. Había aguantado un par de años el cáncer, y sin embargo ahí estaba. Continuando sus estudios.

Cuando el timbre se escuchó todos soltaron un largo suspiro liberando sus mentes y aflojando sus manos debido al precipitado dictado que les estaba dando el maestro, que como había dicho: "-Aquél alumno que no tenga todo esto en la libreta se verá atento a la consecuencia, que será perder el derecho al examen." Era duro con las clases, pero fuera de eso era un grandioso maestro, que se dejaba apreciar y también compartía unas cuantas bromas fuera de clase.

A Liam se le ocurrió que podrían volver a juntarse como la última vez anterior, pero como hoy sería el día libre de Zayn, entonces ofreció su casa como lugar de estancia.

Harry aceptó y se ofreció a llevarlo en auto, ya que Liam había mencionado que pasaría a buscar a Zayn. De todas formas el rizado tenía que ir a buscar a Louis como le había prometido a Jay. Luego pasaría a avisarle a su madre dónde estaría, para evitar que escandalizara el asunto, y probablemente le pediría a cambio del permiso que pasara a buscar a una de sus hermanas al colegio.

Le comentó a Liam la situación, el castaño no encontró ningún problema y aceptó gustoso.

...

Pasaron primero por Zayn, que vivía más cerca, aunque en realidad regresarían ahí, Liam insistió en recogerlo, ya que no quería perder ni un segundo en el único día libre de su novio. Luego se tomaron un poco de tiempo más en el hospital mientras verificaban que todo estuviese en orden con Louis y en que Jay lo dejará salir con sus amigos; al final terminó aceptando, porque lo que realmente necesitaba Louis era divertirse con sus amigos y no quedarse todo el día en casa recordando cuán enfermo estaba. Cuando pasaron a informarle a la madre de Liam dónde estaría, Harry se dio cuenta que apenas vivía a una esquina de su casa. Terminaron el recorrido con el auto lleno. ¿Quién podría pensar que Harry Styles iba con tantos amigos en su auto, si era el chico que al inicio de la historia no pasaba de un marginado más de la escuela que había tropezado torpemente con el popular Louis Tomlinson? Tal vez, como dicen, estaba escrito en su destino.

Bajó acompañado de sus nuevos amigos invitándolos a pasar a su "dulce" hogar.

Lo último que quería era dar una mala impresión de su familia, y esperaba que por primera vez sus padres no estuvieran peleando. Pero desafortunadamente la casa de los Styles se basaba en eso, y no recibir a los invitados de esa forma sería bastante extraño.

Cuando entró a casa con todos, escuchó a su madre gritando cosas como: "-Estoy cansada de ti Josh.", "-¿Por qué entonces no nos divorciamos?", "-¡Las cosas serían mejor sin ti en esta casa!"

Pero nada era verdad. Las cosas estarían mejor en casa sin los dramáticos gritos de Anne resonando en las paredes.

Los chicos se sintieron un poco abochornados por llegar en tan inoportuno momento. Harry se volteó hacia ellos pidiéndoles una disculpa con la mirada, que se le tornaba cristalina por culpa de su madre. Es decir, ¿no podía largarse de la casa si tanto lo deseaba? ¿tenía que quedarse haciendo pasarla mal a sus hijos? ¿tenía que echarle mierdas a Josh todos los días?

Louis se dio cuenta de lo mal que Harry se estaba poniendo y corrió hacia él con los brazos extendidos para protegerlo que todo el mal que pudieran causarle. Quería cuidarle como era debido. Abrazarlo, besarlo, mimarlo, decirle cursilerías, y todo ese tipo de cosas, siempre y cuando Harry estuviese de acuerdo en aceptarlo. Se refería a aceptarlo en una relación, porque eso era lo que realmente necesitaban ambos. Estar juntos oficialmente. Tantos cariños solo podían dar paso a eso.

-Lo lamento tanto. -mencionó el rizado sorbiendo mocos. -No quería que escucharan esto.

Louis acariciaba sus rizos tratando de tranquilizarlo. Depositó un beso en su frente.

-Andando. -le señaló con la cabeza el lugar del que provenían los gritos. -Debes avisarles que vas a quedarte a dormir conmigo.

El cuerpo de Harry se quedó congelado y su corazón se aceleró más de lo normal. Pero comenzó a moverse con torpeza cuando Louis le tomó de la mano y comenzó a jalarle para que lo acompañara y acabaran con todo este asunto de una buena vez.

Anne ni siquiera había discutido el tema. Lo único que había mencionado fue un: "-Esta bien. No faltes mañana a clases y trae a Jessy a casa ahora." Lo cuál era torpe, pues ya era viernes. Y Jessy acababa de llegar a casa con unas tres amigas como le había dicho. Con eso Harry podía asegurarse de que no le prestaba atención ni a él, ni a la vida, ni a nada.

Bien, ahora sólo quedaba salir de ese horrible lugar, divertirse un buen rato con sus amigos, e ir a casa de...Louis. Y bueno...ver que podría pasar.