Mein mürrischer Omega >><< McDanno.

Capítulo 6.

Primero de junio.
Honolulu, Hawaii.

Los padres de Danny se habían mudado a Hawaii, Clara y Eddie había conseguido trabajo en un hospital privado en la Isla, las responsabilidades eran muy grandes y el tiempo que tenian libre era muy poco.

Asi que Danny era quien se había hecho cargo del cuido de todos sus hermanos.

—Bridgett ven conmigo.– Ordenó  Daniel desde su habitacion.

—Mamá y papá no vendrán esta noche, dejame ver la tele unos minutos más.– Pidió su hermana.

—¡Quince minutos!.– Gritó para hacerse escuchar.

—Danno, tengo pesadillas.– lloriqueo una de las gemelas.

—Ven Phobe, duerme con tu hermano favorito.–Danny hizo espacio en su cama.

—¿Y yo, Dannooo?.– Daisy iba entrando a la habitación.

—Tu también princesa.– Susurró, la otra pequeña se acomodó a un costado del cuerpo del omega.

—Mañana tengo clases, así que, tienen que dejarme dormir.– Pidió y ambas gemelas asintieron.

Danny se quedó dormido algunos minutos después, estaba demasiado cansado y estar al cuido de sus hermanas consumía mas sus energías.

Desde que sus padres llegaron a Hawaii, él había dejado la casa de Meka por obvias razones; ahora se sentía mas agotado y con muchas responsabilidades extras.

Bridgett y Fizzy llegaron algunas horas después, la cama era lo suficientemente grande para caber los cinco delgados cuerpos en ella.

A la mañana Siguiente.

—Mamá y papá llegan en unas horas, ellos irán por ustedes.– Comunicó el omega.

—¿Y si no llegan?.– Preguntó Fizzy.

—Si ellos no llegan, Bridgett me Llamará y yo iré por ustedes.

Todas asintieron...

Cuando todos estuvieron listos incluyendo a Danny, salieron rumbo al colegio junto a Callen que siempre los llevaba en su auto, el omega estaba muy agradecido por todo el apoyo que ha recibido de parte del alfa en muchos años.

Luego de una ajetreada hora de haber dejado a sus hermanas en sus respectivos colegios llegó, por fin había llegado  a N.H University, G lo acompañó hasta su salón de clases, saludo a Kono quien esperaba al rubio desde hace unos minutos.

—Gracias por traerme.– Musitó.

—Vendré por ti a la salida.– anunció él alfa, este colocó un beso en la frente del omega.

—Tomaré el autobús.

—Daniel.– Dijo un poco autoritario.– Iremos a mi casa, okay– Le sonrió al ojiazul.

—Bien.– asintió Danny.

Callen sonrió sastifecho, se despidió una vez más del omega y caminó de regreso por aquel pasillo, pero...

Accidentalmente chocó con alguien que caminaba por él mismo rumbo

—Fuck!, Schau wohin du gehst!.[¡Joder!, ¡mira a dónde vas!].– Espetó él alemán.

—¡Quien mierdas te crees!, ¡No ves que voy pasando!, ¡No estorbes!.– Respondió Callen en el mismo tono de voz.

El omega de cabellos castaños se acercó al alfa  para que no comenzará con alguna pelea.

—Lass es, es ist es nicht wert.- [Dèjalo, no vale la pena].– Tranquilizó Nahele, este había aprendido alemán solo por Steve y hasta ahora eso le ha servido.

—Wo sind die Jungs?.– [¿Donde están los chicos?].– Preguntó él alfa tratando de tranquilizarse.

—Sie sind im Wohnzimmer, komm schon.– [ Están en la sala, vamos].–  Mencionó, este señaló en dirección al salón.

Ambos caminaron uno al lado del otros, Danny  sólo observaba al estúpido alfa que acaba de insultar a Callen.

—Vendre por ti.– Mencionó por tercera vez para luego irse.

(...)

01:15 p.m.

—Mamá no vino.– Fue lo primero que el omega escuchó del otro lado del altavoz.

—Voy para allá, no salgan a la calle.– Ordenó para después finalizar la llamada.

—Tengo que irme, no tardaré, tienes que cubrirme.– Pidió a Kono.

Este salió prácticamente corriendo fuera de la universidad, tomó un taxi que lo llevaría hasta el colegio de las gemelas y  luego apresuró a llegar a la academia de danza en donde estaría Bridgett y Fizzy.

—Creí que tu también no llegarías.– Bridg se incorporó de la banqueta en donde estaba con su hermana.

—Creí que ellos vendrían.– Susurró él omega.

Danny llegó a casa luego de quince minutos, buscó a sus padres y ambos estaban dormidos con todo y uniforme de trabajo, no quiso despertarlos, así que decidió por ir a hacerle de almorzar a sus hermanas.

—¿No te quedas a comer?.– Preguntó la mayor de sus hermanas.

—No, ya es muy tarde, tengo que regresar a la universidad.– Cambió la camisa estilo polo por una sudadera que igual formaba parte del uniforme.

—Esta bien, Dan– Susurró la ojiazul.

El omega regresó al recinto universitario justo antes de que su clase de psicobiología iniciara, Kono le había guardado un lugar en donde ya estaba ocupándola la mochila de el.

—Lo siento, lo siento, lo siento, y lo siento.– Se disculpó al ver la cara de frustración de la isleña.

—¡Creí que no llegarías!.– Lloriqueó.

—En serio lo siento, luego de ir por las niñas a dos lugares distinto, tuve que hacerles de almorzar, mis padres estaban agotadisimos, eso de ser médicos es duro.– Se excusó.

—Desde hace un par de meses estas peor, Danny, a penas y te sientas a comer, vienes cayendote  del sueño, has adelgazado un poco, faltas a una que otra clase, ¿Què pasa contigo?.– Preguntó muy preocupada.

El rubio suspiró porque sabía que todo lo que la beta decía era verdad.

—Desde que mis Padres se mudaron a la Isla, pácticamente yo cuido de mis hermanas, tengo que asegurarme de que ellas lleguen a tiempo al colegio, tengo que ir por ellas, ayudarlas en sus deberes, hacerles las tres comidas diarias, pero lo hago por que Clara y Eddie llegan cansados de tanto trabajar, hacen turnos de treinta y seis horas pero cuando están en casa pasan tiempo con nosotros.

—¡Dios! Mejor dime que tu te haces cargo de ellas, entiendo que tus padres trabajen para darte todo lo que tu y tus hermanas tienen, pero, ¿Que va a pasar contigo? Te estás destruyendo poco a poco.– Susurró para no interrumpir al maestro que había iniciado a dar la clase.

—No puedo hacer nada, Kono, ahora solo cuento con la poca ayuda de Callen y....

—Callen, Callen, y Callen, ¿Qué pasa con ese Callen?.– Preguntó la beta

—Callen es muy importante para mi.

—Pero Callen no es tu alfa.– argumentó.

—Callen es...

—Callen no es nadie para que mande en tu vida, ese alfa igual no te deja tranquilo ni un momento, ¡Vengo por ti, Danny!,  ¡Irás a mi casa Dan....

—Podrían dejar oír la clase.– Sisearon desde al fondo así que decidieron callarse y hablarlo a la hora de salida en la cafetería.

All The Love, H× 🌻🥺