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La última planta había sido remodelada en virtud de mis estrictas órdenes y especificaciones, para que solo los dos dueños de la empresa tuvieran sus oficinas en ella y que sus dos asistentes trabajaran juntas en una mesa de trabajo muchísimo más amplia de la que Alexa tenía.

La sala de juntas, que estaba en lo que ahora sería la oficina de Benjamin, había sido reubicada dos plantas más abajo, donde todas las oficinas de los zánganos ex amigos de mi padre, habían sido destruidas para darle paso a algo muchísimo más útil. Una sala de juntas muy amplia, que era capaz de recibir a todos los congresistas juntos de ser necesario y evidentemente que estaba muy bien equipada. Era casi mi orgullo.

Cuando por último, llegamos a la nueva oficina de mi nuevo socio, Alexa no tuvo más que abrir la puerta para que se me cayera la cara al suelo.

Cada cosa que había ordenado se había hecho a la perfección y era simplemente perfecta.

Al igual que mi despacho, tenía amplios ventanales que daban una hermosa vista de la ciudad y delante de ellos, un escritorio de roble lo suficientemente grande como para que lanzara todas las cosas que estarían sobre él y me follara con suma elegancia.

Sonreí por mis libidinosos pensamientos y luego los saqué de mi mente para continuar observando que habían puesto un par de sofás de cuero café muy modernos y costosos, sobre una exquisita y monocromática alfombra persa. Una pequeña gaveta para libros, documentos y archivadores y un mini bar muy sofisticado que estaba perfectamente camuflado de madera para hacer juego con el resto de los muebles, terminaban de hacerlo el sitio ideal.

Me vi muy sorprendida por el par de cuadros con hermosos paisajes que decoraban las blancas paredes y que Alexa había elegido basada en la simple orden de que esperaba que se parecieran a los que estaban en el despacho de mi casa.

Honestamente estaba muy admirada con el resultado y sin saber si Benjamin haría de esa oficina su central de operaciones o preferiría seguir trabajando desde la James House, me limité a agradecerle por el arduo trabajo y a comentar que era muy acogedora.

―Bien, me alegro que te haya gustado. Con esto, creo que solo tenemos que esperar a la reunión de mañana.

―Es cierto. Ya está todo listo.

― ¿Contenta?

―Mucho ―Volví a sentir la punzada en mi estómago y volví a hacer la mueca de dolor― ¿Que tal una copa para celebrarlo?

―Oye, ese dolor no es normal ―advirtió.

―Sí, sí que lo es ―Le resté importancia― Soy algo exagerada cuando se trata de asuntos femeninos, no te preocupes. ¿Una copa después del trabajo entonces?

―Claro.

Sé que no la había convencido del todo respecto al dolor, pero me conozco lo suficiente como para saber que no era nada importante, así que felices con los resultados de la oficina de mi nuevo socio, dimos por finalizado el día y fuimos a beber un par de copas antes de volver a casa.


※※※※※


La ansiedad y la expectación no me dejaban dormir y mientras me daba vueltas en la cama, pensaba en que lo que estaba a pocas horas de ocurrir, sería absolutamente surrealista.

Todos se enterarían finalmente que Benjamin James y yo no éramos los enemigos acérrimos que decíamos ser, sino que más bien éramos más que amigos y que todo había sido un plan magnifico para reírnos en la cara de los malditos bastardos que se habían burlado de la memoria de mi padre.

Born to you [TERMINADA]Where stories live. Discover now