44

1.3K 122 4
                                    

— Esto es otra cosa

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


— Esto es otra cosa.—murmuré al dejar caer el abrigo, innecesario para el maravilloso clima de mi ciudad natal.—Haz lo que quieras.—le dije a Sharkyl antes de dirigirme al centro.

Entré a Desembarco del Rey como si fuese un huracán, ya no tenía miedo a nada, con un poco de suerte hasta tendría la oportunidad de saldar mi cuenta pendiente con Cersei.

—¿Cuánto por este vestido?—pregunté sosteniendo uno de color azul marino con la cintura entallada, tampoco iba a encontrar nada más delicado en los bajos fondos de la ciudad.

—Diez monedas.—contestó la señora, al oír su voz la reconocí a ella, pobre mujer la había robado toda la ropa que había tenido desde los siete años.

—Ten treinta, y da lo que pidan a esos niños.—señalé al grupo de pequeños bastardos entre los que yo me podía haber incluido perfectamente.

—¿Quién eres?— preguntó una chica desconfiada mientras el resto se lanzaban sobre la fruta.

—Shiera Waters.—respondí poniéndome el vestido nuevo y sacando el otro.

—¿Waters?—preguntó sorprendida.

—Exacto.—dejé el vestido en sus manos y tomé una de las manzanas.—No digo que sea fácil, pero tú también puedes salir de aquí.— mordí la manzana y seguí caminando calle arriba.

Todo eran caras conocidas, había pisado cada adoquín de esa calle. Los doscientos metros se me hicieron cortos hasta llegar al prostíbulo.

—No puedes pasar.—gruñó un tipo que me sacaría más de medio metro de altura y por supuesto podría lanzarme al suelo con un soplido.

—Soy yo, Shiera.—por suerte o por desgracia, ese tipo y yo nos habíamos criado juntos.

Shiera Waters, la Targaryen perdidaWhere stories live. Discover now