Adicta a tus besos

Capítulo 12

Nos quedamos durante unos segundos en silencio sin mediar palabra. 

<<¿he vuelto a hablar en español?>>

-...

-¿Qué es lo que quieres?

En ese momento, suelta mi mano- vamonos a casa- y siguió caminando poniendo distancia entre nosotros. Me quedé mirando su espalda sin saber muy bien que decir o hacer en ese momento. 

Me coloco la mochila en el hombro y seguimos caminando en silencio, aunque en mi cabeza no paraba de rondar distintas preguntas, hipótesis...era caótico. Al llegar a mi casa me paro en la puerta donde nos despedimos como si fuéramos casi desconocidos. A pesar de estar cerca, lo notaba distante.

<Si va a ser así el resto del verano...>

Tras unos segundos mirando sus espalda, decido ir tras él. Al principio poco a poco hasta acabar casi corriendo hasta alcanzarle. Le agarro del brazo evitando que sigas avanzando, no se gira. Se queda quieto. 

-Intentémoslo

Se gira poco a poco posando la mirada en mi. Creo haber percibido asombro en sus ojos. 

-Intentémoslo- repito-  descubramos a donde lleva esto

-...¿estas segura?

Aquella pregunta la hizo casi con frialdad

-¿eh?

-Apenas nos conocemos, no sabes como soy...

-Bueno, de eso se trata, ¿no?, en una relación la pareja se conoce y se profundiza en los sentimientos que se siente...

<un momento, ¿Hay sentimientos recíprocos?...¿tengo sentimientos hacia él?>

Me quedo mirando a Haru esperando algún tipo de reacción a lo que acabo de decir. Lo que me resultaba más complicado de todo esto era saber lo que mierdas se le estaba pasando por la cabeza, o por lo menos lo que siente...Era como ver un muro, o una estatua inexpresiva; aunque tampoco es que fuese un ser totalmente frío y calculador....

<Vale, definitivamente se me va mucho la puta cabeza>

- Dame tu número- me dijo con un sonido algo monótono

<El día que le vea sonreír será el puto apocalipsis>

-Pero, si lo tienes de cuando organizamos el cumpleaños de mi hermano

-Se me estropeó el móvil y perdí los contactos

Saco el móvil del bolsillo y se lo entrego desbloqueado, empieza a teclear algo. Me asomo para ver lo que andaba haciendo con mi móvil, el suyo suena pero no lo coge. Me lo entrega, me había dado su número de teléfono. 

-Así podremos hablar y huir de ti cuando vayas a ver a tu hermano al apartamento. 

-Ni que mi objetivo fuese molestarte a toda costa- respondo algo molesta. 

-Pero si lo haces, tengo mucho trabajo que hacer y no me puedo distraer.

<¿soy una distracción para él? no sé como tomarme eso, sinceramente>

-por su puesto- respondo rodando los ojos

-...Dentro de una semana es mi cumpleaños. Unos amigos han organizado una pequeña fiesta en la casa de unos de ellos. Está un poco alejada, pero tiene piscina y gran jardín para estar todos. Puedes venir con tu hermano, si te apetece. 

<¿soy yo o se acaba de ponerse ligeramente colorado...nah, definitivamente son imaginaciones mías>

-Aunque tampoco pasaría nada si no vinieses