Libertad

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  Louisa se encontraba caminando junto al heredero Tiang por los bosques que rodeaban la colina en Hongu, con el tiempo había aprendido a ignorar la constante presencia del personal de seguridad. Admiraba en silencio la naturaleza que la rodeaba, cerró los ojos y escuchó el canto de las cigarras junto con el cálido abrazo del sol. 

  El pequeño se encontraba tarareando una canción, la joven se sentó bajo la sombra de un frondoso árbol y el niño la acompañó. Ella acarició el suave rostro de su infantil acompañante y suspiró con ensueño al imaginar una familia con su amado Adrien Agreste, Louisa no quería ilusionarse pero aún así la esperanza ya había ahogado su corazón.

"Si tuviésemos hijos... ¿Se parecerían a mí o a él? ¿Serían niñas o niños?"

  Aquella resguardada alegría dentro de la dama causaba que sus escondidos recuerdos revivan, aunque hacerlo le traía melancolía pensó en el aspecto de su hermano actualmente. Abrazó y sentó encima suyo a Ming, cuándo él había cumplido los tres años comenzó a imaginar que se trataba de Hugo.

  Emma era su gemela, bastaba con mirarse al espejo e imaginar su compañía, aunque asumió que ella no debía tener tantas cicatrices a sus veintiún años. La duda que sí sentía al respecto era en que clase de persona se había convertido, esperaba que siguiese siendo la misma amable jovencita; de no ser así, ella sería la culpable. Había intentado proteger la felicidad de su familia pero al final terminaba siempre dándole prioridad a sus caprichosos deseos, causando todo lo contrario.  

  Cada uno de los sucesos negativos en su vida los había aceptado como un castigo personal. Si, en un principio había querido huir incontables veces, pero el tiempo se encargó de crear tal sumiso pensamiento dentro suyo. No se había permitido creer en la libertad de nuevo, aunque todas las puertas de la mansión estuviesen abiertas a la par y la misma se encontrase completamente vacía, se negaría a atravesarla. Ahora era diferente, al ver a su más grande héroe, a su amado rey frente a ella, recobró toda fortaleza perdida o al menos gran parte de ella. 

  El pequeño Ming Tiang se recostó sobre el brazo de su madre abrazándola con cariño, ella lo observó y el niño le sonrió con una inocente alegría. Louisa odiaba ese lugar, odiaba a Tao Tiang, a los Huǒ fēng y a todos los que conocía, se encontraba bajo los efectos de una asfixiante nostalgia y solo quería regresar a su hogar en Francia, o ir a cualquier parte del mundo junto con Agreste.

 Louisa odiaba ese lugar, odiaba a Tao Tiang, a los Huǒ fēng y a todos los que conocía, se encontraba bajo los efectos de una asfixiante nostalgia y solo quería regresar a su hogar en Francia, o ir a cualquier parte del mundo junto con Agreste

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  Dos días, Louisa estaría esperándolo dos días más allí y Adrien sentía que cada minuto transcurrido era un siglo sin verla. Él estaba seguro de que daría la vida por rescatarla, pero tenía miedo y lo admitía sin resquemor, no era temor sobre su propia seguridad sino, más bien, sentía pavor de no ser lo suficientemente fuerte para liberarla de allí.

  Lo había guardado con recelo durante muchos años, era su único protector y al mismo tiempo ese broche era la pesada cruz de la familia. Cada vez que había usado la llave para abrir la caja fuerte que ocultaba ese prodigio, una avallasante marea de tétricos recuerdos arañaban su mente. Él tenía la certeza de que se enfrentaría otra vez a esa amarga sensación, para su sorpresa, al ser abierta la blindada puerta de seguridad, solo admiró al Miraculous en forma de mariposa con deseo; la única carta bajo la manga de Adrien para salvar a su encerrada princesa.      

  La mitad de él exclamaba cuán puros y bondadosos eran los deseos por los que iba a usar tal broche, su otra mitad lo criticaba recordándole que no eran más que caprichos y lujuriosas justificaciones los que lo arrastraban al juego del héroe. De cualquier forma ya se encontraba allí, portando a Nooroo, quien no sabía si reaccionar con temor o sumisión ante el único hijo del villano Gabriel Agreste. 

LouisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora