capitulo 53, parte 1: Suit Killer

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Aviso: Este capítulo aporta contenido sexual, leé bajo tu responsabilidad.

Pov. Jaxon:

La miré detrás de la ventana de aquel frío lugar, y recordé....

- Tenerte...- acortó la distancia entre nosotros y me besó, ardiente y ferozmente. Le seguí el beso, estaba completamente seguro de que Emily deseaba lo mismo que yo, pero joder, esto era una maldita locura, era lo más ilícito y estúpido del mundo, ni una sola persona vería bien lo que estábamos haciendo, pero en ese momento, juro que no me importaba, estaba envuelto por el deseo, esa chica había provocado en mi lo que nunca ninguna mujer había hecho, solo el pensarla me hacía desearla, tenerla debajo de mi.
- Ahora me tienes.- Dije después de terminar aquel beso, ella sonrió tal como una niña que obtenía lo que quería, sus ojos se llenaron de emoción, lujuria y deseo, se sentó sobre mi, y comenzó a besarme, moría por soltar mis manos de las estúpidas esposas y acariciar su ardiente cuerpo, hacerla sentir lo que ella a mí, realmente esta chica me encendía, necesitaba sacar todo lo que sentía hacia ella, tenía que cogermela.
Emily comenzó a besar mi cuello, lo hacía de una manera tan increíble, tan fascinante, subió hasta mi oreja y la lamió.
- Mily está obsesionada contigo.- toda mi piel se erizo al oír esas palabras, el que hablara en tercera persona me había desconcertado, pero al mismo tiempo mi excitación era mayor. Empecé a jalar mis manos haciendo intentos fallidos por soltarme, ella rió audiblemente.- Te tengo.- chillo y siguió besándome, tomo mi camisa y la jalo con fuerza rompiendo los botones, comenzó a besar mi pecho y mi torso. Joooder, juro que jamás en mis 7 años de trabajo, había tenido una falta y mucho menos una tan grande como está, iba a tener relaciones con la criminal más buscada de todo E.U, con la que se supone que debía encerrar, por más que sabía que tenía que hacer que se pudiera en la cárcel, en ese momento no podía pensar en nada más, solo en lo hermosa y peligrosa que se veía, bajando por mi torso, besando mis abdominales, mirándome con malicia, sabía lo que iba a hacer y yo estaba encantado con la idea. "Jax estaba encantado con ella..."
- Oh, Jax.- sonrió mirándome de rodillas.- ¿Tan feliz te hago?- dijo deslizando su mano por mi pierna.
- Cómo no tienes idea.- dije sonriendo de lado, su expresión fue un poco de impresión, incluso a mí me había sorprendido el dejarme llevar por ella, estaba total y completamente seguro de que Emily no me arrastraría a nada bueno, estaba arrastrandome al mismísimo infierno, lo sabía, el juego que estábamos empezando no estaba nada bien, pero allí estaba, y realmente no me hecharía para atrás, mucho menos ahora.
Desabotono mis jeans y la ayude a bajarlo, tomo mi miembro con su mano derecha, cerré los ojos, es que mierda! Saber que era ella, que era Emily la que lo estaba haciendo me ponía de una manera jodidamente enferma.
La chica lo puso en sus labios, y con su lengua hizo una magia única, tardo un muy buen rato saciandome con su boca, y antes de levantarse mordió considerablemente mi miembro, fruncí el señor, soltando un razonable gruñido, me había dolido.
Ahora más que nunca quería quitarme las malditas esposas, ella se levantó limpiando una gota de semen de sus labios, y sonrió, la poca luz que había en la habitación la hacia ver tan sombría y perversa, tan ardientemente peligrosa.
- Suéltame.- Mi voz sonaba ronca, estaba muy excitado, ella solo soltó una pequeña risita
- Tú has sido muy grosero conmigo Jaxon, me toca serlo contigo.- pasó su lengua en mis labios y se sentó sobre mi, ella aún tenía sus bragas, sin embargo empezó a dar sentones a mi muy erecto miembro. Su cara de excitación me fascinaba, era preciosa la hija de la chingada, me tenía loco, había sacado a un Jaxon que intentaba dejar atrás y sabía que esto estaba jodidamente mal, pero por primera vez no me importaba.
- Sué... Suélta-me.- dije entre bufidos. Ella gimió y se levantó.
- Me encantaría estar contigo, no sabes cuánto.- se acercó a mis labios y me besó.- pero tengo que hacer mi trabajo, y sé que eso no te gusta.- rió sarcásticamente y caminó a la puerta.- las llaves están en tu bolsillo derecho, eres inteligente Jax, sé que podrás irte.- me lanzo un beso y salió del sucio cuarto, dejándome solo y semidesnudo...
Maldita sea, ahora estaba más enojado que nunca, ¿Quién demonios se creía para dejarme de esa forma? Esa... Esa maldita me había dejado así, como si nada, Emily era una chica muy mala, la más mala...
No tengo idea de cómo pero logré, al fin, deshacerme de las esposas, acomode mi ropa y en ese instante sonó un celular en una mesilla, mi celular, lo tomé, era Mark.

"La Gran Mafia"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora