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Richard, el único policía en este atraco que había conseguido hallar mi verdadera identidad, en coma. No tenía ninguna esperanza en que despertara, pero lo hizo, y me tenía que asegurar de que fuera cierto.

Entoncés recordé y halle como colarme en el hospital sin ser visto. De pequeño, cuando iba a hacerme las pruebas de las alergias, a las 11:30 venian un grupo de payasos para divertir a los niños mientras esperabamos en la sala de espera, pues bien, hoy voy a ser uno de esos payasos.
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Cada día que pasaba me volvía más loca, y ahora más, desde que no sabía noticias de Dubai, pero como siempre dicen, después de la tormenta viene la calma, y así fue.
Sonó el teléfono. Australia y los demas estaban ocupados abriendo el túnel por donde ibamos a fugarnos, asi que lo cogí yo.
- ¿Profesor?
- ¡Hawaii!
- ¡Dubai!
- ¿Como lo has.... pero como estás.....?- no me salían las palabras, escuchar su voz una vez más me debilitó más de lo que ya lo estaba.
- Escuchame amor, voy a entrar al banco, cuando el minutero marque las 12:00 en punto, estaros preparados.
- Dubai, pero ¿cómo lo has conseguido? Cómo te has librado de los policías yo........
- Amor tranquila, ¿vale? Tú solo haz eso por mi y luego te lo cuento todo, cuelga, pueden estar rastreando ya la llamada.
Colgué. Iba a volver a ver a Dubai, no me lo creía, informé a todos del mensaje y solo había que esperar a que el reloj marcara las 12:00 en punto.
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11:15, mañana.
Estaba en la puerta del hospital, vestido de payaso, siguiendo el plan a la perfección. A las 11:30 llegarían los payasos, lo que significa que también los policías, sabían igual que yo que el hombre que estaba en coma desde hace semanas, tenía información muy valiosa acerca del atraco, asi que llegué al hospital 15 minutos antes de que llegaran los demás y mientras todos los policías estuvieran distraidos buscando a un payaso infiltrado, a las 12:00 en punto, Dubai estará entrando al banco sin complicaciones porque todos los policías estarán distraidos buscando a un payaso que no van a encontrar.

Entré al hospital, saludé a la recepcionista y cogí el ascensor para ir a la planta donde se encontraba Richard.
11:30, mañana
Estuve los 15 minutos que tenía para encontrarle, fijarme si seguía en coma o no y pirarme del hospital, buscando por todas las habitaciones. No lo encontraba y sabía que ahora mismo habría en recepción una multitud de payasos y policías buscándome, tenía que pirarme ya.
Fui al ascensor más cercano que tenía en ese momento, pero antes de llegar, se abrió.
Giré rápidamente por un pasillo y, efectivamente, un grupo de policías subieron de ese ascensor. Tenía que irme ya, pero sabía qué era el único payaso que no había sido visto por la policía. Tenía que deshacerme del disfraz.
Me metí en los baños más cercanos que había y empezé a desvestirme.
De repente, se abrió la puerta del baño y entró un policía, me quedé en silencio, muy quieto.
El walkie-talkie del policía empezó a dar señal y pude reconocer la voz que sonó de ese walkie-talkie, era la inspectora.
"Atentos oficiales, hemos accedido a las cámaras de seguridad del hospital y hemos visto al payaso que estamos buscando, entró al hospital 15 minutos antes de nosotros, no se le ha visto salir, lo que significa que sigue dentro. Lleva una peluca rojiza, y va vestido con un traje rojo entero. Encontradle ya, puede ser el hombre que estamos buscando.

Después del comunicado que dio la inspectora, el policía salió inmediatamente y gracias que salió porque mi móvil empezó a sonar.
- Paula, hola, mira es que ahora mismo me pillas muy liado.....
- Tranquilo Mario, no te distraigo, era solo para decirte si después te apetece que vayamos a tomarnos un cafe o algo
- Si vale, perfecto, nos vemos esta tarde entonces.
- Muchas gracias Mario, no te molesto más.
- No no, si............ tu nunca me molestas. Oye ahora te tengo que dejar, nos vemos esta tarde
Y antes de que pudiera responderme, colgué.
Salí del baño, cogí el ascensor y bajé a recepción.
Había una multitud de gente quejandose rodeando donde estaba la señora que saludé, un grupo de payasos en la puerta, esperando a que les dejaran pasar, aporoveche toda esa multitud para escabullirme y salir fuera del hospital.
Lo había conseguido, pero no logré encontrar a Richard, pero eso ahora era el menor de mis problemas, se que no tardaría en decirle a todo el mundo quien era yo, El profesor, así que teníamos que acelerar un poco el atraco.
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12:00, mañana.
El profesor me preparó una moto, cerca del banco, a unas 2 calles. Me perseguía la policía, había conseguido escaparme y ahora había coches patrullas por todas las calles, pero me daba igual, iban a flipar en colores.
Me puse el casco, me subí a la moto y acelere a toda hostia.
Enseguida me empezaron a perseguir 2 coches patrulla, pero como siempre, el plan del profesor había funcionado. Estaban todos tan ocupados intentando encontrarle que no sabían lo que les esperaba.

Detuve la moto en frente del banco, me quedé observándolo un rato, no estaba seguro de sí quería volver, podía coger ahora mismo y pirarme lejos, pero el amor de vida, con la que quiero compartir mis días, estaba en esa ratonera, así que... aceleré.
Iba a toda hostia, los policías empezaron a disparar, pero ni las balas me alcanzaban, cuándo llegué a las escaleras, la moto dio un salto y parecía como si todo fuera a cámara lenta. Vi como abrían las puertas del banco, lentamente, la moto fue descendiendo hasta justo aterrizar dentro del banco.
Lo había conseguido, estaba dentro otra vez.

....................................
Nada más salir del hospital, fui al bar donde un día todo empezó.
Y allí Estaba, esperándome sentada con su café cortado y peinándose con los dedos de las manos su melena castaña a la vez que miraba su móvil. Seguro que os estáis preguntando cómo soy capaz de estar enamorado de una chica y estar engañándola desde el minuto en el que nos conocimos.....
Simplemente, porque soy un monstruo, pero eso ella aún no lo sabía.
- ¿Está ocupado este asiento?
- La verdad es que estoy esperando a un chico, se parece mucho a ti.- dijo con esa sonrisa que me vuelve loco.
- Bueno pues, que tal si le dices a ese chico que se quede en su casa, porqué está aquí uno mejor.
En cuanto tome asiento, nos quedamos mirandonoos fijamente.
- Te veo un poco estresada
- Creo que es normal, ¿no? El chico que habíamos conseguido atrapar me entero de que acaba de entrar al banco con una moto, y que el famoso "Profesor" ha estado en el hospital disfrazado de payaso y no le hemos encontrado
- Un día duro entonces.- me quedo callado por un momento, pero entonces se me ocurre un plan para animarla- te propongo una cosa, te voy a enseñar cuatro postales con diferentes destinos y tú me vas elegir uno, el que quieras.
Sacó de mi bolsillo 4 postales y se las enseño:
- Primer destino Hawái, me han dicho qué tiene unas playas maravillosas y bueno, podríamos escoger esta para hacer un viajecito juntos.
Se vuelve a rier con esa sonrisa.
- La segunda, Indonesia, específicamente Balí, tiene muchos cosas para ver, también tiene muchas playas, muchos animales, un sitio turístico muy interesante.
La tercera y la cuarta si quieres me las reservo pero bueno a mí también me gustan estos destinos, mira por ejemplo, la tercera es a las islas Baleares sé que no es como las playas hawaianas pero bueno también está bien y la cuarta, el Caribe, que viene siendo lo mismo que las 3 anteriores.....-
Paré de hablar, note cómo me miraba fijamente, tenía una mirada de desconcierto, algo iba mal, lo presentía.
- Mario, ¿donde has estado esta mañana?
- Pues ya te he dicho que estaba trabajando, esta muy ocupado y.....
- Escuchame, me encanta la sorpresa que me has hecho de verdad pero es que hoy me pillas con tanto estrés que no sé cómo reaccionar y...
- No tranquila, te entiendo, todos tenemos un duro día de trabajo-.
- Yo también tengo una sorpresa para tí, mira debajo de la mesa.

No sabía si mirar o no, estaba nervioso no sabía qué tipo de sorpresa podía esconderse debajo de una mesa pero cuando vi lo que había debajo sólo podía pensar una cosa:
¿Cómo?
Paula me estaba apuntando con una pistola debajo de la mesa y cuando subí la cabeza y la miré sabía que no podía perder la compostura.
- Me ha costado mucho entenderlo, pero no soy tan tonta Mario, se que eres El profesor y te preguntarás ¿cómo? Preguntaselo al pelo rojo qué tienes en tu hombro y que yo sepa, no eres pelirrojo Mario y qué casualidad que el payaso que buscábamos tenía una peluca roja.

En ese momento sólo podía pensar en cómo la he podido cagar tanto, en como un pelo, una cosa tan diminuta, ha podido joder todo un plan de atraco en cuestión de segundos.

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⏰ Last updated: Apr 21, 2018 ⏰

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El atraco perfecto.Where stories live. Discover now