Pt. 2 / 10. Junto a Chad

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–¡No se vale!– grito tirando las cartas de Póquer encima del billar.

–Aprendiz.– comenta Chad agarrando todas las Tapitas de botellas de cervezas sustituyendo las monedas.

–Aprendo rápido.– recalcó.

–Y es cierto.– dice Frederic –Inteligente, Holly.–

–Soy una Walls.– bromeo con superioridad y reímos, creo que están un poco borrachos.

–El que era bueno esto era Jim y James...Thom siempre lo detesto así que.– dice Chad dando otro sorbo a su cerveza.
–Interesante.– solo digo eso, restándole importancia, en realidad, no me importa que juegue póquer, eso es lo menos que sabe jugar a comparación de otros juegos.

–Chad, linda Holly.– dice Frederic poniéndose de pie –Les temo decir que se tienen que largar.– dice mirando el reloj –Casi son las tres de la mañana.–

Okay, les daré un breve resumen.

An pasado tres días en el cual seguí a James a esa casa, no hay mucho que contar. De esos tres días solo uno asistió a su trabajo como profesor y el día que fue estuvo muy concentrado y a la misma vez distraigo con las cosas, es como si estuviera en vuelto en sus pensamientos. No estuvo seco conmigo, no fue grosero, solo nos comportamos normal, suena raro ya que todo lo que pasó pero al fin y al cabo somos ya dos adultos con mucha pero mucha experiencia en común y con cinco años de ventaja de superación.

–Buscare mi chaqueta y llamaré a un taxi.– dice Chad.

–Yo te puedo llevar, aún estoy sobria.– soy educada y Chad me mira indeciso.

–Me puedes violar o dejar tirado en un callejón.– comenta el con miedo fingido.

–O ahogarte...– bromeo y niego –Bromeo, vienes o no?–

–Vámonos.– dice y toma mi mano.

–Espera.– suelto su mano y me dirijo donde Fred –Adiós Fred, gracias por permitirnos estar aquí.– él me da un pequeño abrazo en el cual siento sus manos casi en mi trasero, razón por cual corto el abrazo.

Salgo con Chad agarrado de la mano para que no se caiga por su borrachera intensa y lo dirigí a mi auto.

Se preguntarán cómo llegué a Dark Night para jugar póquer con dos hombres raros, casual, miren, estaba trabajando con lo de autos, necesitaba ayuda y llame a Leo, me dijo "Pastelito pastelito tengo hambre y mucho trabajito, adiosito" y luego pensé en llamar a Thom pero Clara no estaba en la casa así que no tome el riesgo,  también estaba Nico pero está de viaje, pues llame a Chad y quedamos.

–¿Quieres bailar?– pregunta Chad al llegar a su departamento.

–No.– digo con espanto –Necesitas una ducha muy fría.– digo abriendo con sus llave la puerta.

–¿Llegamos?– pregunta con sorpresa y asiento entrando junto a él –Tengo hambre.– dice y se dirige a la nevera sacando galletas de avenas –¿Quieres?– me ofrece alzando las cejas y niego.

Me dirijo al baño y prendo la ducha, por ganarme en el póquer la pongo muy fría y lo llamo.

–Chad, te apetece un baño?– pregunto con voz inocente.

–¿Quién me acompaña?– dice llegando con la boca llena.

–Tal vez.– digo y lo entro a la bañera pero sin que toque el agua aún. El se para en el marco de la puerta y me observa.

Peligrosa Seducción| disponible hasta 2/jul/21Donde viven las historias. Descúbrelo ahora