Arion x Victor / TenmaxTsurugi( Kyoten)fanfic Y One Shots7u7

10 Años Después... II

* narra Víctor*

La clara luz se colaba por la ventana de la habitación y la iluminaba por completo. Apenas eran las diez de la mañana y seguía profundamente dormido, en una cama de matrimonio.

Me pareció escuchar mi nombre en un tono bajo, casi como un susurro. La voz... Era muy dulce y cálida...
Cuando volví a escucharla abrí los ojos lentamente, el sueño hacía que los párpados me pesaran.

Borrosamente vi una silueta al pie de la cama, agarrando algo con las dos manos. Trate de despertarme del todo e incorporarme. Me froté los ojos y pude ver con claridad. Sonreí de forma involuntaria al ver a un joven de ojos grises y pelo castaño sonriente, la sonrisa más bonita que nadie más puede ver todos los días; sujetando una bandeja con un plato lleno de tostadas con mantequilla y una taza de café en ella.
-¡Buenos días! - saludó enérgicamente. - Te he traído el desayuno aquí porque no venías.
Extendió la bandeja hacia a mí y la cogí con delicadeza para apoyarla sobre mis piernas.
-Perdona, tenía mucho sueño hoy... - me disculpé.
-No importa, hoy tienes el entrenamiento por la tarde asique es normal.
Volví a sonreír y se inclinó hacia a mí para besarme la frente. Me sonrojé un poco y me dispuse a desayunar. Pinché con el tenedor una de las rebanadas de pan y la acerqué a la boca de Arion.
-¿Quieres un trozo?
-No, gracias. Acabo de lavarme los dientes.
Llevé entonces la tostada hacia mí y le metí un mordisco. Me puse a comer tranquilamente mientras Arion se sentaba en un borde de la cama y miraba distraído por la ventana.
-Víctor- dijo al cabo de unos minutos. -. Si tu te hubieras enterado de un secreto mío, ¿me lo dirías?
Tragué la comida que acababa de masticar.
-¿Cómo? - pregunté confuso.
Arion suspiró y negó con la cabeza cabizbajo.
-Nada...

Me quedé mirándole sin entender absolutamente nada. Empecé a dudar si sería por lo del día anterior. ¿Y si lo preguntaba porque me había escuchado y no sabía si decírmelo?
Un sudor frío me recorrió la frente. No podía ser eso...

No me dio tiempo a decir nada más. Se despidió de mí y se fue al entrenamiento con su equipo. Me quedé mirando al suelo pensativo por un par de segundos antes de darle el último bocado a la tostada.

* narra Arion*
No debí de haber preguntado algo así. Ahora iba a empezar a sospechar y acabaría averiguándolo... ¡Vaya lío!

Me pasé casi todo el entrenamiento distraído, en otra parte. Me limitaba a reflexionar sobre lo ocurrido en estas pocas horas y si mis jugadores preguntaban algo decir:
-Sí, sí, muy bien.
Obviamente me miraban con cara rara y seguían a lo suyo. Pero esque no podía dejar de darle vueltas al tema que hasta ayer no me preocupaba. Sólo pensaba que ya llegaría el día.
-¿Ocurre algo? - me preguntó Mark. - Estás muy distraído.
Puse los pies en la Tierra para responderle de forma coherente.
-Perdona, esque... Nada, cosas mías.
-Puedes contármelo, parece que realmente te ha afectado.
Suspiré profundamente para relajarme un poco antes de hablar de ello:
-Mark... ¿Tú cuándo le pediste matrimonio a tu esposa?
Me miró completamente sorprendido y parpadeó varias veces.
-¿Yo? Qué pregunta más rara.
Forcé una medio sonrisa por el silencio incómodo que se había hecho.
-Puf... Pues... Llevábamos saliendo ya un tiempecillo... Un par de años... Y, bueno. No sé...
Se acarició el mentón mientras pensaba mirando al cielo. Volvió a mirarme al rato y dijo:
-No sé. Pero, ¿por qué?
Me quedé en blanco. No supe qué responder a eso.
De repente a Mark le cambió la cara y dijo en otro tono:
-¡Ahh! ¡Ya sé! Dime que por fin Víctor y tú pensáis casaros.
Me puse muy rojo y enseguida le tapé la boca nervioso. Él comenzó a reírse y puso sus manos en la cadera.
-La cosa esque nunca habíamos hablado del tema. Ni siquiera me preocupa porque él lo haya mencionado... Es como que nunca nos lo habíamos planteado.
-Entiendo.
-Y bueno, no sé si es hora, o es muy pronto, o... Qué. No sé, no sé nada de estas cosas.
Mark me sonrió orgulloso.
-No tenéis prisa por nada. Si las cosas funcionan como están no debería preocuparos. Yo pienso que eso es decisión vuestra y que hasta ahora me habéis parecido una pareja muy unida. Ya se veía desde el principio. - rió.
Me rasqué la nuca sonrojado.
-Pero, para hablar de ello uno de los dos tiene que pedirlo.
Me asustó eso último y sonreí nerviosamente.
-¿Quieres pedírselo? Si te preocupa tanto el tema deberías sacarlo tú primero.
Con la idea mi corazón se aceleró y comenzaron a sudarme las manos. ¿Yo? ¿Pedirle matrimonio a Víctor? Madre mía...

El entrenamiento justo acabó ahí. Mark me dio un golpecito en la espalda y se despidió.
Tomé el camino para irme a casa y fui caminando tranquilamente, sin prisa alguna, reflexionando.

Mark tenía razón... Pero... Cabía la posibilidad de que pudiera rechazarme...
Sentí una punzada en el corazón.
Que me rechazara así de primeras no sonaba muy lógico. Pero lo que escuché el otro día no me aclara del todo su opinión. Tal vez si él no me lo pedía... Era porque no quería. Por la razón que fuera. No tenía por qué ser precisamente porque no me quisiera. Pero tal vez no quería por alguna razón...

Necesitaba antes de decir nada saber su opinión al respecto.
¿Yo estaba dispuesto?
Por supuesto, yo le amo. Tanto como cuando me dí cuenta de ello. Muchísimo más de lo que hubiera imaginado que se puede amar a alguien...

Me paré en seco. Acababa de ocurrírseme algo. Tenía que hacerlo.
Cogí y desvié mi camino hacia otro distinto.

* narra Víctor*

Llamé a Arion por tercera vez al móvil, y por tercera vez no lo cogió. Me pareció muy extraño que no hubiera vuelto aún. Normalmente si se entretenía en el entrenamiento al menos llegaba a las dos; la hora de comer.

Empecé a preocuparme y al instante se me vino a la cabeza la escena de esa mañana, en la que me había hecho esa pregunta tan extraña.
Volví a relacionarlo con lo que pensé entonces. ¿Y si realmente me había escuchado hablando con Vladimir y no sabía si decírmelo? Aún así era muy extraño. Conozco a Arion y sé que si se hubiera enterado de algo así me lo hubiera dicho enseguida. O no. ¿Y si no? ¿Por qué no? ¿No querría sacar un tema así? Tal vez... La idea no le gustaba...
Porque la otra opción es, ¿y si él ya lo había pensado? Imposible... ¿Cómo iba a pensar en casarse con él? No había sido nada más que un borde y un idiota hasta que salieron por fin... Definitivamente no era eso, porque si no ¿por qué no lo decía ya?
En absoluto, en absoluto era eso.

Entonces... Tal vez debiera hablar de ello de nuevo con Vladimir... Odiaba admitir que al final el tema le había importado tanto... Pero cuando se trata de Arion es otro mundo...

Busqué entre mis contactos el nombre de mi hermano. Tras unos segundos de indecisión me mordí el labio y le llamé. Estaba esperando la respuesta y a los pocos segundos escuché la puerta abrirse. Colgé rápidamente y fui a recibir a Arion en la puerta.

-Has tardado mucho... ¿Ha pasado algo? - pregunté preocupado.
-No, jeje- sonrió y trató de recuperar el aliento. -. Esque me he encontrado con Skie y nos hemos puesto a hablar, que hace tiempo que no la veía.
Hice una mueca de desagrado al escuchar ese nombre.
-¿Y qué? - dije bordemente.
-Nada. ¡Ah! Y me ha dicho que buena suerte en la clasificación, a ver si no os toca ir muy lejos. - sonrió.

Traté de mantenerme, pero me fue imposible. Odiaba demasiado a esa chica. ¿Por qué estaba tardando tanto en hacer la maldita mudanza?