34 ¡Otro mamón menos!

256 50 28
                                    

- ¡Joder! ¡Nos matarás a ambos!- grita Derek, cogiéndome del brazo y empujándome para ocultarme tras la misma pared de la que he salido.- ¡Son muchos!- bufa.

Y razón no le falta. Lo último que he visto antes de ocultarme tras la pared, han sido seis hombres armados viniendo en nuestra dirección.

- Shh. No seas cagón - susurro risueña. No sé por qué razón es exactamente, pero ésta situación me divierte, me hace feliz. ¿Será porque ahora ya no tengo que ocultar mi plan de venganza, y puedo matar libremente a quien yo considere culpable?

No lo sé, la verdad. Pero ahora mismo, las ganas de vengar a mi padre, a Dakota, y sacar a Jhon de aquí, me impulsan a no temer ni siquiera por mi vida. Creo que es algo así como un subidón de adrenalina, o de valor... Ni idea. Lo único que puedo asegurar con certeza, es que aprovecho ese empujón emocional y me asomo por la esquinera de la pared.

¡Pum! ¡Otro mamón menos!

El condenado encabezaba el grupo que corría en nuestra dirección, y con su muerte, acabo de conseguir que el grupo se disperse y se esconda tras las puertas que yo no había visto que tenía el pasillo. Vuelvo a ocultarme tras la pared.

Qué bien sabe la venganza.

- Tenemos que matarlos a todo - siseo, cegada por la rabia, y el éxtasis de palpar la victoria que llevo años esperando.

- No, no, no. Tú estás loca, Norah - suelta Derek un tanto nervioso. Me agarra del brazo y me obliga a mirarlo a la cara.- Querías llamar la atención para que vinieran a buscarte aquellos que tienen a Jhon, ¿no? Pues créeme, con este jaleo de disparos se ha debido de enterar todo Dios de que andas por aquí suelta.

- Pues que vengan a buscarme - expongo fácilmente.

- ¡Pero si los estás matando!- exclama como si la razón fuese obvia.- Deja que te cojan y te lleven donde él. Así podrás liberarlo desde dentro. No creo que tengas problema por cargarte a los dos o tres tipejos.

Su plan es bastante lógico, razonable, y bastante interesante. El fallo, es que habla en singular. Habla en singular y...

Lo miro desafiante, con la espalda erguida, y ladeo la cabeza hacia la derecha para poder ver bien cualquier pequeño detalle que me haga saber lo que maquina su retorcida cabecita. Se pone nervioso, lo sé por las veces que traga saliva y su mirada rebota de lado a lado, evitando la mía.

Pero qué hijo de puta...

- ¿Dos o tres, Derek?- aprieto el fusil entre mis manos, y lo alzo un poquito en mi pecho, lo justo para recordarle que soy yo quien va armada, y él no.

- Es solo un suponer, Norah - se excusa, nervioso. No sé si por su vida, o porque le acabo de descubrir.

Lo que no sé, y de verdad, me está costando todo un triunfo atar cabos es, ¿qué cojones pinta Derek mezclado en esto?

¿Acaso le están pagando con dinero negro? ¿Es un policía corrupto? O... ¿Es posible que haya algún ascenso en juego por cazar a esta panda de narcotraficantes, y que ha Derek le de exactamente igual a quién llevarse por delante, incluida yo?

No lo sé, y romperme el cráneo pensando en este momento, me crispa los nervios.

Aprieto los dientes, endurezco la frialdad de mi mirada, y avanzo ese escaso medio metro que me separa de Derek.

- Si me la estás jugando, Derek, te juro que te voy a...

Mis palabras se ven interrumpidas por un golpe seco que me azota la nuca, un pitido ensordecedor en los oídos, y una oscuridad que me arrolla.

Norah Fox Où les histoires vivent. Découvrez maintenant