Fragmentos en el aire

Polvo de estrella.

Hay personas que te llenan el alma.
Pero, entendamos que no somos personas, somos simples nebulosas andantes en un mundo que se va solidificando a nuestros pies, seres que pueden ser la luz más pura o la sombra más profunda, y podemos ser taciturnos, alegres,  paranoicos, pero sobre todo sensibles.
Déjame analizarte, permite que descubra qué guardas en esos pensamientos que no te dejan dormir, quiero convertirme en tu insomnio, fundirme en tus amaneceres y resplandecer en tus ojos; deja que me inspire en ti, deja que te descubra.
Y es que eres un universo tan bello, desconocido, centelleante y andante, viajero libre con ansias de ser frenado o encontrar otro universo dispuesto a caminar junto a él hasta los confines de lo que no existe, de lo imperecedero.
¿Que néctar tienen tus palabras, que nutren mi curiosidad de ti? Misterio sin resolver, Lucero solitario, sol sin sosiego.
Atrévete a ser descubierto, a mostrar lo que eres, lo que deseas, lo que amas y lo que te apasiona; deja que te analice de pies a cabeza como ya lo habrás hecho conmigo.
Sólo deseo que dejes de ser una nebulosa nube de escarcha estelar que temió derretirse ante el potente calor de los sentimientos, no te encierres en la bruma, en la sombra, en la oscuridad.
Sé luz, brillo, calor, fuerza y vida; permíteme darte vida, brillo, furor y volver tus besos poesía, tus ojos el descanso de mi alma, tus caricias el instrumento que toca con suavidad una expectante melodía... Sal de las sombras, reluce tus galaxias y da brillo nuevo a tus constelaciones.

-Juliana Jaramillo.