CAPITULO 15

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KATHERINE – 5 HORAS ANTES

Me encontraba en mi oficina con los dos hombres que había contratado para encontrar a Aitana; Fernando y Aarón.

-Katherine, hemos rastreado el teléfono del hombre que se llevó a tu mujer. Cuando estuvimos en casa de Aitana el día que desapareció, encontramos su celular y lo revisamos buscando algún indicio, y nos dimos que había una llamada perdida de un número desconocido, lo rastreamos y hemos dado con una ubicación. Puede ser el lugar donde tengan secuestrada a Aitana. – me dijo, uno de ellos.

-Y que esperamos? Vamos por ella! – me levanté enseguida del lugar donde que encontraba sentada.

-Esto puede ser peligroso Katherine, no sabemos si está armado. Nosotros vamos a ir.

-Fernando, Aarón; he esperado ya bastante tiempo para poder verla de nuevo, así que no me importa si es peligroso, yo iré, no les estoy pidiendo permiso. Ustedes también están armados, podrán defendernos. Vámonos! –concluí.

El lugar que marcaba la ubicación estaba bastante alejado de la ciudad, ya llevábamos más de una hora de trayecto, solo ansiaba el momento de reencontrarme con Aitana. Habíamos contactado con la policía para pedirles refuerzos y ya venían en camino.

Mientras la camioneta en la que íbamos seguía avanzando, las pocas casas que quedaban desaparecían y comenzábamos a entrar al bosque, mi preocupación comenzó a incrementar al pensar en qué tipo de lugar podrían tener a mi Aitana. Fernando detuvo el coche y se giró para hablarme.

-Bien Katherine, de aquí en adelante seguiremos a pie. No puede escuchar el ruido del motor porque podría huir con Aitana y perderíamos esta oportunidad de recuperarla. –asentí, mientras ellos cargaban sus armas.

Caminábamos sigilosamente por aquel bosque, siguiendo la ruta que nos marcaba el GPS, según esto ya estábamos cerca. De pronto se escuchó el nombre de Aitana en un grito y acto seguido disparos. Nos agachamos por precaución pero estaba desesperada por proteger a mi mujer. Vimos que alguien se acercaba a nuestra dirección y de inmediato la identifique; corrí hacia ella, la sostuve entre mis brazos pero ella estaba sumamente alterada, suplicaba que la soltaran, que debía huir, pero como pude traté de tranquilizarla hasta que se desvaneció en mis brazos.

Fernando y Aarón fueron al lugar de donde vino Aitana y de nuevo comenzaron a oírse disparos. Levanté a Aitana del suelo y la cargué hasta la camioneta en donde veníamos, la recosté en la parte trasera. Los hombres que contraté ya venían con Christian, este último se encontraba sumamente golpeado, sangraba y con dificultad podía caminar.

Se detuvieron justo frente a mí, mis hombres lo tenían sujetado de los brazos pero Christian estaba de rodillas, levantó el rostro y me miró.

-Espero que te pudras en la cárcel, imbécil. – le dije, y le di una patada en su entrepierna. Él cayó al piso e inmediatamente sostuvo su miembro mientras se retorcía de dolor.

...

AITANA

Con dificultad trataba de abrir mis ojos, pero todo me daba vueltas, la luz cegó un momento mi visión pero después que me recuperé pude ubicar en qué lugar me encontraba y comencé a llorar. Katherine inmediatamente se despertó, ya que se encontraba sentada en una silla cerca de mi camilla con su cabeza recostada junto a mis piernas.

-Mi amor; tranquila, ya estas a salvo. Te encuentras en el hospital. Todo está bien. –me decía tratando de tranquilizarme. Estiré mis brazos e inmediatamente ella se acercó para abrazarme. -Te extrañe tanto, cariño. Te busqué por todas partes. No dejaba de pensar en ti ni un solo segundo.

MI JEFAWhere stories live. Discover now