Una Mulan Moderna - Adrinette [AU]

Capítulo 17: Mala Amiga

Perdonen si se ilucionaron con una nueva parte, estoy chequeando algunas cosas... Wattpad está fallando.

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El despertador comenzó a chillar a las ocho en punto, obligándose a despertar con el peor humor jamás visto.

Mis párpados aún pesaban como si no hubiese descansado siquiera un minuto, y como si fuese poco además del horrible cansancio que me aquejaba, un dolor comenzaba a martillar en mi cabeza a la altura de mis ojos.

No había logrado dormir muy bien por culpa de aquella espantosa velada, pero todo dió un giro de 180° cuando aquella conversación que Adrien y yo habíamos compartido camino a casa regresó a mi memoria. Él se había abierto por primera vez conmigo, siendo Marinette.

A pesar del dolor y mi somnolencia di un brinco de la cama, radiante de alegría por ese recuerdo tan conmovedor, Adrien comenzaba a ser mi amigo.

Sería amigo de Marinette, él me conocería realmente y por fin pondríamos ser amigos sin ninguna incomodidad entre ambos.

Pero mi emoción fue aplastada con pesadez al caer en cuenta de la realidad que aquella situación conllevaba.
Adrien jamas podría ser mi amigo de realmente, no mientras yo le ocultase mi vida... Lo mas probable era que me odie en cuanto se enterase de todo lo que había planeado para su familia.

Me sentí terrible, demasiado abrumada al entender lo que hice.

No podía hacerle eso a la familia de Adrien, ellos estaban sufriendo a diario por problemas reales mientras que yo buscaba una venganza torpe.

Me quedé alli, sentada al filo de la cama pensando en lo estúpida e infantil que estaba siendo. Lo único que me hizo volver a la realidad fue un mensaje de Kagami.

"-Necesito hablar contigo. Hoy".

Me frote los ojos, descubriendo sorpresivamente las lágrimas atoradas en ellos, y mire otra vez el mensaje tentada de mandarla al demonio al recordar lo odiosa que Kagami era con Adrien... Pero lejos de eso parecía ser una buena chica, así que tragué mi rabia y simplemente respondí.

"-Llegaré durante el mediodía".

Mentí, sabiendo que probablemente estaría allí antes de las diez de la mañana pero necesitaba un tiempo para acomodar tanto mi disfraz como mis pensamientos antes de ir a verla.

Me puse de pié, en dirección a mi armario y tomé una muda de ropa limpia antes de dirigirme al baño.
Abajo, en la panadería, ya se lograba escuchar el murmullo de las máquinas elaborando la mercadería del dia acompañado del dulce aroma a pan horneado. Mis padres solían levantarse antes de las seis para ya tener lista la mercadería para cuando los clientes comiencen a llegar.

Me di una ducha veloz, junté algunas pertenencias en mi bolso y me lo cargué al hombro antes de bajar a la panadería.
Eché un vistazo a mi teléfono pero no había noticia alguna de Luka. No me sorprendió.

-¡Cariño! -Exclamó mi madre sorprendida al verme, tanto ella como la bandeja con galletas que estaba llevando hacía el mostrador brincaron del susto -¿A donde vas? -Agregó audaz al notar el bolso en mi hombro y mi ropa.

Me encogí de hombros y tome una galleta, aún seguía caliente pero no lo suficiente como para quemarme los dedos. La acerque a mis labios y olí el aroma que en muchas situaciones me había dado paz, las galletas siempre me reconfortaban. Está vez no surtieron efecto.
Le di un mordisco sin más antes de responder.