Bosque │ Frededdy.

01

Nosotros alguna vez hemos escapado de nuestra casa, ya sea por problemas familiares o por ir alguna fiesta del aquel lugar. Pero siempre volvíamos a casa siendo recibidos por una marca en tu mejilla de una chancla voladora.
Pero lo contrario de todo esto era que Freddy no planeaba volver a su casa nunca jamás.

¿Que había pasado para que tomará esa decisión?

Fácil, el castaño cada día recibía insultos por parte de sus compañeros y sus propios padres, al punto de ser golpeado y tener marcas en su cuerpo.

Llegó su límite de agarrar una mochila con comida, agua, dinero y escaparse de casa.

Freddy no sabía a dónde iba, pero cualquier lugar era más bueno que lo que llamaba "casa". Al final llego a una tienda en medio de la nada a altas horas de la noche.

Era bastante extraño que hubiera una tienda abierta y más si estuviera en un lugar que no había casas ni una autopista, aun así Freddy entró. El olor de comida se hizo presente en su nariz, el castaño miro las estanterías llenas de refrescos, golosinas y pizzas congeladas...No tenía tanto dinero en sus bolsillos, pero lo alcanzó para comprarse un refresco, malvaviscos, una lata de sardinas y un mechero. Sin duda era una buena idea para sobrevivir.

Al salir de la tienda vio una pequeña caja, en ella había un gato dorado y ojos grises "Que extraño gato" pensó el castaño —Hey pequeño, creo que en mi bolsa tengo una lata de sardinas—contestó el de ojos azules mientras buscaba en su bolsa recién comprada dicho alimento, el felino aprovechó y agarró con fuerza la mochila blanca y se fue corriendo a un bosque siendo perseguido por un castaño que le intentaba alcanzar.

✔

—¿¡P-Porque soy tan idiota!?—dijo el castaño intentando recuperar aliento de aquella carrera que hizo con aquel gato, que por mala suerte ganó dejando al pobre Freddy sin su mochila de supervivencia y solamente con una bolsa de aquella tienda.

—Al menos tengo esta bolsa para sobrevivir este día— fue lo único que dijo para sacar su mechero y hacer una improvisado fuego, se sentó en una piedra y abrió la bolsa de malvaviscos, agarró uno de esos dulces clavandole una pequeña rama y ponerla para que ser calentará en un lado del fuego.

—Me pregunto si alguien me estará buscando— preguntó el de ojos azules —Por supuesto que no, seguro que ni notaron que me fui ¡Es más seguro que están felices que me fuera!

—C-Claro, a quién no le gustaría que ser fuera para siempre un chico como y-yo —contesto con lágrimas en su rastro, sin querer pateó con fuerza su refresco abierto, haciendo que cayera en el fuego apagándose por completo.

—¡Genial! tendré que dormir muriendo de frío —dijo sarcásticamente el de ojos azules, dicho así ser recostó en el suelo (usando como almohada la piedra que antes había usado para sentarse) y intento dormirse, cosa que no consiguió al escuchar unos ruidos en los arbustos— ¿Q-Quien anda allí? —preguntó "Genial Freddy eres un puto genio, preguntar como estúpido quién anda allí para pensar que te va a contestar" pensó antes de volver a escuchar otro ruido en los arbustos.

Freddy intento usar un malvavisco como arma, pero al ver quien salía de aquellos arbustos fue una sorpresa encontrarse con una manada de lobos, el castaño soltó un pequeño grito mientras retrocedía lentamente ¿Tan rápido iba acabar su miserable vida?

Un magnífico lobo de pelaje negro y ojos del mismo color se acercó cara a cara con el adolescente quien cerró lo ojos...Esperando que le cortará la cabeza para así alimentarse.

Pero no sucedió.

Fue algo mágico al abrir el castaño los ojos ver a un chico pelinegro, orejas de lobo, ojos negros, vestido de un traje completamente negro y que solamente tenía una corbata roja, sin olvidar que tenía una pequeña cola.

—Felicidades, eres uno de los primeros que no se va corriendo —fue lo que dijo el mayor a ver como el castaño estaba completamente en piedra—¿Q-Quien eres?—pregunto.

—Soy el lobo —contestó mientras Freddy intentaba no desmayarse "¡Esto no era real! ¡Seguro que esto es un sueño! Solamente estas cosas pasan en los fanfics de fantasía" pensó mientras veía a los otros lobos de la manada quien no se habían transformado y esperaba que no lo hicieran.

—Supongo que no era bueno asustar de esa forma, en fin ten creo que esta es tu mochila
—dijo lanzandole la mochila que por suerte pudo agarrar el castaño— C-Cóm-...—iba a preguntar el castaño pero el otro lo interrumpió— El maldito corría muy rápido, pero tengo que admitir que tenía una sangre muy deliciosa —contesto el pelinegro, el castaño trago saliva— ¿U-Ustedes no me van a comer? —pregunto nervioso, haciendo que el mayor soltará una pequeña risa— Nosotros no comemos humanos, solamente asustamos a cazadores y turistas que vienen a nuestro territorio —contesto por última yéndose a una parte del bosque pero una mano le detuvo— ¿P-Puedo ir con ustedes? —preguntó tímidamente, el mayor solamente le miró— Claro porque ¿no?, me caíste bien...Corderito —dijo dedicándole una pequeña sonrisa.

—¿Corderito? Me llamo Freddy

—Tu camisa tiene un dibujo de un cordero, así que te llamas Corderito.

—Está bien ¿Como te llamas?

—Fred —fue lo único que contesto antes de volverse a transformarse en un lobo.

Y así fue como comenzó la larga y peligrosa aventura para nuestro protagonista en aquel bosque, llena de descubrimientos y tal vez descubrir el amor entre aquel "lobo" y adolescente.