Marshmallow [ m y g × p j m] FINALIZADA

•Capítulo 1: Bienvenido•

Yoongi no tenía idea de lo que pasaba, el pequeño rubio estaba rodeado de todas las mujeres que trabajaban para Namjoon, ella nunca le habían prestado ese tipo de atención a nadie. Jimin parecía demasiado inocente, es decir, él sólo estaba ahí recibiendo los cariños que las chicas le hacían, sentado en medio del gran sofá con sus pequeñas manos descansando sobre su regazo.

— Míralo Nam—exclamó una de las chicas mirando a su jefe mientras envolvía al menor con sus brazos —¡Es tan lindo!—Yoongi frunció el ceño realmente sin comprender tal fascinación

— Hana, dejen de ser tan efusivas. Van a terminar asfixiándolo — les dijo Namjoon rodando los ojos, luego de eso se acomodó en su escritorio y miró seriamente a Yoongi — ¿Que vas a hacer entonces? Nunca creí que tomaras una responsabilidad de esta magnitud — el pelinegro se encogió de hombros.

—Supongo que me tomó en un momento vulnerable. No creo que sea diferente de cuidar un perro o un gato — sonrió con burla mirando al menor —Además sólo será por un tiempo, no es como que me lo vaya a quedar para siempre — rodó los ojos al tiempo que Namjoon negaba con la cabeza, sopesando los pros y contras de la decisión que Yoongi había tomado.

— Solo mantenlo fuera de los negocios ¿Si? — suspiró no teniendo más remedio que aceptar, tampoco era como que tenía corazón para dejar a aquel chico tirado en algún lugar ni mucho menos venderlo a alguno de sus clientes, Park Jimin era demasiado encantador para estar metido de nuevo en esa mierda.

— Como sea — Yoongi miró a Jimin y cuando sus miradas se encontraron, el mayor le hizo un gesto con la cabeza indicándole que debía levantarse.

El rubiecito obedeció inmediatamente y se deshizo del agarre de las chicas para caminar hasta su mayor.

— Yoongi Oppa — llamó una de las chicas en un tono amable, el pelinegro la miró alzando una ceja y es que, usualmente, ninguna de ellas le hablaba más que para pasarle recados — ¿Puede traer a Jiminie otro día? De verdad nos gustaría pasar más tiempo con él —

Yoongi llevó su mirada desde las chicas hasta Jimin, lo hizo varias veces bastante confundido con lo rápido que aquel niño se ganaba a las personas.

¿Que tenía Park Jimin de especial?

— Ya veremos — murmuró antes de caminar hacia la salida llevando al menor con él

— ¡Hasta luego, noonas!— exclamó moviendo su mano a manera despedida — Hasta luego, Namjoonie hyung. — se giró al mayor e hizo una pequeña reverencia, Yoongi rodó los ojos y terminó por sacarlo de ahí.

Namjoon soltó una risita al verlos desaparecer. Algo le decía que uno acabaría por tener a sus pies al otro, se preguntaba quién caería primero.

— ¿Ustedes por que siguen en mi oficina?

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El trayecto de regreso a su casa fue bastante entretenido y es que Yoongi no pasaba por alto el hecho de que, de vez en cuando, Jimin tarareaba alguna irritante canción de algún grupo femenino.