Corazones Congelados #PGP2018

Capítulo 11

(Adam)

Abrí mis ojos despacio, sin saber como había llegado aquí. Lo que fuera aquí. Mi vista se fue aclarando a medida que me iba acostumbrado a la claridad de la habitación. Comencé a observar a mi alrededor totalmente confundido. Sin saber absolutamente nada.

Cuando logré despertar del todo, me di cuenta que me encontraba en una especie de celda, en donde no había ventanas ni muebles, solo había una camilla, una puerta y una bombilla que era la fuente de luz.

Me incorporé lento, sintiendo todo mi cuerpo entumecido, gemí de dolor al levantar mi cabeza. Sentía que esta me pulsaba como cuando el alcohol tenía efecto al día siguiente.

Una vez estuve en pie, con mucha dificultad, caminé hacia la puerta, veía todo borroso como si estuviese drogado. Faltaba tan poco para llegar cuando la puerta se abre de golpe y por ella entra la persona a quien menos esperé volver a ver; y que juré que si lo hacía, lo mataría de inmediato.

-Hi my Friends -

(Sarah)

Me sentía mareada, mis ojos apenas y podían matenerce abiertos, no podía ni siquiera pensar con claridad.

¿Dónde estoy?

Me levanté de aquella camilla, miré a mi alrededor confundida. En la habitación solo había una puerta y esta se encontraba con llave.

¡Maldita sea! ¿Donde estoy?

Pasaron minutos...quizás horas, era algo difícil saberlo puesto que en este lugar no hay ni sol para ver la hora.

Era algo desesperante, todo en este sitio era escalofriante. Las paredes estaban manchadas, llenas de hongos, el olor a putrefacción era insoportable y la poca iluminación que había era una cosa que lo único que te daban ganas era de salir y correr sin mirar atrás; pero; estaba encerrada, no tenía escapatoria alguna y en serio que si alguien no venía pronto, me volveré loca.

La puerta se abrió, dejando entrar un poco de aire, pude respirar por segundos hasta que mi di cuenta de quien había entrado por aquella puerta.

- Hola amor -

(Julia)

¿Qué ha pasado? ¿Donde estoy? ¿Adam? ¿Sarah? ¿Dylan?

Me levanté exaltada al darme cuenta que no estaba en ningún lugar conocido. Mala idea. Sentí como todo daba vuelta, casi me voy a tierra, si no fuera porque aún sigo en la cama, ya estaría inconsciente en el suelo.

Una vez hubo pasado el mareo, miré a mi alrededor. En realidad no había mucho ver, ya que solo había una pequeña ventana que no cabe ni una aguja, una cama con sabanas que alguna vez fueron blancas, un mueble al lado de esta, una bombilla y una puerta.

-¿Hay alguien? - hablé en voz alta con la intención de conseguir alguna respuesta más solo el silencio se escucho.

Me acerque a la puerta y la toque tratando de llamar la atención a algún ser viviente que me pudiese ayudar a salir de aquí.

Un golpe contra la pared de al lado me dejó estática. Escuchaba voces, gritos, y una discusión que me dejo paralizada.

¿Adam?

-MALDITO INFELIZ, ¿QUÉ HACES AQUÍ? -en efecto, era Adam quien gritaba histérico

-jajajaja...Tanto tiempo sin vernos y tú...¿así me recibes? Es de mala educación ¿no crees? -esa voz...no puede ser...

-TE VOY A MATAR, ¡TE VOY A MATAR! -Adam estaba enloquecido, podía escuchar cadenas, golpes y gritos. Muchos gritos.

-¡Ay amigo! Que amargado te volviste desde que asesiné a tu hija -la voz de él era burlona como si lo que acababa de decir no era la gran cosa.

¿El mato a la hija de Adam? ¡Santo cielo!

Mis lágrimas no pudieron ser contenidas, esto no puede ser verdad. Por favor...díganme que esto es un sueño, más bien una pesadilla y que ya estoy por despertar.

-¡¡HIJO DE PU* VEN ACÁ!! ¡COBARDE! -la puerta de el lado derecho se escuchó cerrarse mientras que segundos después la puerta del lado izquierdo se escuchó abrirse.

-Hola amor -dijo aquel hombre con el mismo tono burlon

-vuelveme a decirme asi y te prometo que te cortaré la lengua -hablo una voz quien rápidamente conocí como la de Sarah.

-¡Ay querida!, ¿Qué tal la vida en la calle? ¿O es que acaso te volviste prostituta? En mi opinión eso te sale de maravilla -no podía dar crédito a lo que mis oídos oían.

-Ja ja ¿Te digo algo?-habló sarcástica, con esa lengua filosa que solo ella sabe -creo que haz envejecido demasiado desde la última vez o es ya te cansaste de ser un idiota, bueno, lo haz sido siempre asi que...

Ella fue interrumpida, él la había golpeado.

-Sigues siendo una zorra -dijo aquel hombre pero esta vez con un poco de molestia en su tono.

-y...¿tu? Creo que eres el que más chicas a tenido en su cama, aunque siento lástima por ellas, de seguro das dos estocadas y quedas cansado -respondió, riéndose como una maniática.

Nuevamente fue interrumpida por otro golpe. Minutos después la puerta se cerró, con furia, pasos fuertes se escucharon, hasta que mi puerta se abrió, dejando ver al hombre a quien más amé en mi vida, a quien extrañé con todo mi ser, a quien necesite todos estos años y a quien más odio en estos momentos.

-Hola hija mía-

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Hola ¿Qué tal?

No sé si alguien lee esta historia :'( pero si tan solo hubiera una sola persona yo seria enormemente feliz :)

See you soon

Anonim❤