Corazones Congelados #PGP2018

Capítulo 10

(Sarah)

Al siguiente dia, muy en la mañana, arreglamos todo para subir al auto y regresar en donde todo comenzó, en donde conocí a Julia.

Una vez todo estuvo listo tomamos rumbo hacia california para dar fin a toda esta locura.

El ambiente dentro del vehículo era tenso y pesado, nadie se atrevía a decir palabra alguna. Julia y Dylan se encontraban en la parte trasera, dándose miradas que había visto en muchos adolencentes ,pero, algo era extraño, el chico tenía una sonrisa, aquella que no me daba confianza. A la vez, él miraba constantemente su celular como si esperara una llamada o un mensaje.

Al estar en el asiento del copiloto podía mirar atravez del espejo que se ubica en la parte superior del auto. En un momento del viaje nuestras miradas conectaron, él simplemente se me quedó observando por unos segundos para luego apartar la mirada y dirjirla hacia Julia, quien estaba sonrojada por la intensa mirada que le dedicaba el chico.

Al no ver nada que me importara, desvie mi vista hacia el hombre que conducía esta maquina.

Me permití observarle, sin demostrar ningún sentimiento en mi rostro más que el de indiferencia. Él es diferente a todos los chicos que conocí a lo largo de mi vida, él es como yo, frio, cortante y guapo. Muy guapo.

Solo en ese instante pude ser capaz de verle a la perfección. Su rostro estaba indiferente, concentrado en lo que había por delante. Sus ojos azules están apagados, vacíos y sin vida pero eso era parte de su encanto. Su cuerpo era robusto y se le veía muy bien proporcionado.

—Deja de mirarme —su voz grave y cortante me saco de mis pensamientos.

—No me des órdenes —respondí de la misma manera sin quitar mi vista de él.

—solo... —suspiro de cansancio —deja de hacerlo ¿bien?

—y ¿por qué debería? — pregunte con una sonrisa hipócrita.

—Porque es incómodo —respondió deviando la mirada de la carretera para observarme unos segundos. Luego volvió a mirar hacia adelante.

—bien —dije cortando el tema— necesito ir al baño, párate en un estación de servicio.

—ok —fue su respuesta.

Unos metros más adelante, el detuvo el auto en el lugar que le dije. Antes de bajarme me di cuenta que Dylan fue el primero en decender para correr a abrirle la puerta a Julia quien susurro un "gracias" casi inaudible con su rostro mas rojo que un tomate. Yo sólo me dedique a rodar los ojos ante la escena tan cursi que se presentaba ante mí.

Camine lo más rápido que pude para alejarme de aquella pareja que me hacia que quisiera vomitar el desayuno. Entré al baño, hice mis necesidades, lave mis manos y salí de ahí.

Al estar llegando a nuestro medio de transporte me fijé que Dylan y Julia se encontraban muy cerca el uno con el otro. Me detuve y mire muy atentamente lo que sucedería. El chico puso su mano en la mejilla de la niña, mientras que ésta se encontraba petrificada. Poco a poco se fueron a cercando, Dylan, con su mano libre, rodeo la cintura de Julia, él le susurro algo que debido a la distancia no logre escuchar. Finalmente pasó lo que era evidente que sucedería, ambos juntaron sus labios, fue un beso lento que pronto se volvió apasionado.

—Era obvio que pasaría ¿no lo crees? —aquella voz retumbo en mi mente provocando que dejara de mirar a los adolescentes para fijarme en Adam.

—Él no me inspira confianza —dije sin dar respuesta a su pregunta.

—No eres la única —me dijo sin importarle que su pregunta fuera ignorada.

Pasaron algunos segundos en el cual solo el silencio habitaba entre nosotros, solo mirábamos a la pareja que ahora estaban riendo y dándose cariños.

—¿Por qué para algunos la vida es tan fácil? —dije al aire fijando mi vista en las familias que estaban disfrutando con sus hijos

—no hay una vida fácil, solo que hay gente que sufre de más —me respondió Adam

Me quedé pensando con aquella respuesta, la cual es completamente verdadera. Hay pensonas que toman malas decisiones que los llevan a sufrir innecesariamente; otras que se enamoran y se dejan llevar por las emociones, provocando que el dolor de una traición, por parte de esa persona que creíste que estará para tí toda la vida, sea tremenda e insufrible. Por otro lado, están esas personas que sufren por problemas ajenos, que tienen dolor sin tener culpa. Aquellos que no pidieron la vida que tienen pero que aún así deben vivirla hasta al final.

—ya debemos irnos —me dijo captando mi atención.

—claro —dije y sonrei sinceramente, lo cual era muy extraño teniendo en cuenta que no lo hacia desde hace mucho tiempo. Él se dedico a devolverme la sonrisa por segundos que fueron eterno para mí.

Fui la primera en romper el contacto visual al sentir mi rostro arder.

¿Qué pasa conmigo?

(...)

Luego de horas de viaje los cuales no fueron tan desagradable ya que Adam encendió la radio y también cantó una de las canciones. Eso si que fue de los mas extraño pero también muy divertido. Logró sacarme otra sonrisa sincera, hasta logró hacerme reír a mitad de la canción cuando se equivocó de letra. Se ve muy tierno avergonzado debo decir.

¿En qué rayos estoy pensando? ¿Adam? ¿Tierno?

Creo que me estoy volviendo loca, si eso ha de ser.

En fin, llegamos a nuestro destino, ante nosotros se encontraba el maldito manicomio abandonado. Se podía ver que era inestable, en cualquier momento este lugar podía colapsar.

Bajamos de la máquina y avanzamos los cuatro con cautela hacia el interior del edificio. Estábamos a punto de entrar cuando un celular comenzó a sonar, inmediatamente miramos Dylan quien se disculpo diciendo que la llamada era de su madre y que era urgente que contestara. Él se alejó unos cuantos metros, hablo por tres minutos y luego volvió con nosotros.

Ahora, sin interrupciones nos adentramos, no había luz en el interior, se podía sentir una brisa muy helada que calaba hasta los huesos. Julia estaba aterrada, por ello, Dylan le sonreía y le susurraba cosas bonitas.

—Que asco —dijimos al mismo tiempo Adam y yo, mirando a la pareja. Al darnos cuenta, sonreimos por milesegundos, los cuales pudieron ser más pero de repente Adam cayo al suelo y a mí, sin poder evitarlo, unos hombres nos apresaron poniendo un paño con una especie de morfina, que por más que di la lucha, poco a poco empecé a quedar sin fuerza hasta que quede sumengida en una oscuridad incierta.

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¡Hola! Pues he aqui otro capítulo, espero que les guste.

¿Qué pasará? O ¿Qué pasó?

See you soon

Anonim❤