Capitulo 50: Perdón

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ADVERTENCIA:
Contenido de smut.

Camino por los pasillos del hotel tratando de relajarme. No quiero pelear, pero odio que me peguen. Me molesta que recurra a la violencia física, yo lo hago pero en casos extremos, nunca me atrevería a levantarme la mano a Emma, preferiría morir antes de levarle la mano.

Después de una hora regresé a la habitación cuando el enojo ya había pasado. En la sala había silencio, camine al cuarto y a través de la puerta escuchaba el llanto de Emma y eso me partido el corazón. Entre sin hacer mucho ruido, pero aun así ella lo noto y se sentó en la cama, permitiéndome ver su nariz roja y las gruesas lágrimas que rodaban por sus mejillas que la luz de la luna me dejaban ver.

Ninguna decía nada, solo nos observamos en silencio. Camine hasta llegar a la cama y acostarme, ella rápidamente se subió sobre mi. Sollozando sobre mi cuello, yo simplemente le acariciaba la espalda. Se había bañado, lo sabía porque olía a shampoo y su cabello seguía húmedo.

-Lo siento tanto- aprieta el cuello de mi blusa fuertemente, sigo sin hablar simple le acaricio su espalda, tranquilizándola- perdo.. na... me..- hable entre sollozos.

-Esta bien- una lágrima se desliza sobre mi mejilla, me duele tanto verla así.- pero ¿por que no confías en mi? No he hecho nada para que desconfíes

-No... Lo... sé- apenas y logro entenderlo que dice.- Si... si... con... fio-

-Tranquila- beso su frente- habla cuando estes lista.

-Lo lamento- dice más tranquila pero aun sigue llorando, lo sé porque sigo sintiendo las lágrimas en mi cuello- Si confío en ti

-¿me dejarás explicarte?- susurro jugando con su cabello.

-Si- ella sigue encima de mi con su mano aferrada a mi blusa como si tuviera miedo de que me fuera a ir.

-Cuando fui al baño me encontré a Lucy vomitando en el baño, no la podía dejar allí y ella no podía manejar, así que la lleve a su casa, solo eso. Se que actúe mal debí decir a donde iba primero Pero no pensé. Fue también mi error. Lo lamento.

-Pero aún así no era motivo para pegarte- y el llanto regresa.

-No estabas bien, estabas tomada- susurro tratando de tranquilizarla, me dan ganas de llorar, Me mata que esté así.

-Lo lamento tanto- dice entre sollozos

-Tranquila mi amor. No llores, me duele verte así- acarició su espalda y doy repetidos besos en cu cabeza- No sabes como me duele el corazón por verte así, por favor princesa ya no llores.

-Si- asiente sobre mi cuello, tras unos largos minutos se tranquiliza y sale de mi cuello. Me estiro para encender la lámpara y así poder vernos directo- No se porque me puse así, yo confío en ti.

-Lo se- suspiro porque se que confía en mi, lo ha demostrado cientos de veces- nuestra relación se basa en la confianza y en la comunicación así que dime ¿que paso por tu cabecita?

-Me puse celosa- admite- recordé cuando venimos a México y la conocimos, es muy hermosa.

-Emma- me acomodo para quedar sentada recostada sobre el respaldo de la cama y ella sentada con sus piernas a cada lado de las mías así viéndonos directo- Mi amor, tú eres sumamente hermosa. Para mi no hay persona que iguale tu belleza

-Pero ella es muy guapa- susurra agachando la mirada. Colocó mi mano debajo de su barbilla levantando su mirada. Esta insegura de si, ese fue el problema.

-No se como decirte que para mi no hay nada más bello que tu. Todas las personas se extinguen si estoy a tu lado. Eres hermosa, no solo físicamente, porque déjame decirte que tu cuerpo es perfecto, tú cabello, tus ojos son como ver al mar. Tú alma es noble, eres muy inteligente. Mi amor eres hermosa. No se porque tienes esa inseguridad de ti. Pero créeme cuando te digo que eres hermosa.

Me enamoré de ellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora