Capítulo 5

281 12 0
                                    

Hoy es el gran día en el que mis amigos vuelven a Tennessee, gracias a Dios ya no estaré encerrada aquí sin salir a ninguna fiesta. Tengo tantas ganas de ver a Edward, Gionni y Caro, los extraño mucho. Siempre dicen que Edward y yo terminaremos siendo pareja, porque creen que él está perdidamente enamorado de mí y que no sabe como decirlo, lo cual es totalmente mentira. Ya no sé como decirlo, EDWIE NO ESTÁ ENAMORADO DE MÍ, siempre le gustó una chica que conoció en la primaria. Desde que la conoció, no tuvo ojos para otra.

Nos conocimos en el primer día de la primaria, y a partir desde ese día nos volvimos inseparables, es una amistad muy valiosa.

―Estúpida ¿no piensas en abrazarme?―la voz de Caroline me saca de mis pensamientos cursis. Corro abrazarla con una gran sonrisa en mi rostro.―Me alegro tanto de verte.

―¡No sabes cuánto los extrañé!―exclamo con felicidad. Están los cuatro en la puerta de mi casa con una sonrisa sincera, los abracé a todos y solo me falta a Edward.

―Oh cariño, ya no llores, aquí estoy.―dice Edward estirando sus brazos para que lo abrace, acepto sin problemas y oculto mi cabeza en su pecho.

―¡Salgamos de fiesta! Tenemos que festejar que volvimos.―habla Caro ilusionada. Mi amigo y yo nos separamos para mirarla.

―Tú quieres festejar por todo.―dice Gionni entre risas. Es verdad, Caroline es una chica muy fiestera, no la calmas con nada. Todos reímos y la rubia mira mal a Giovanni.

―Oí que hay una fiesta en la casa de Ian.―informa Edward con el ceño fruncido. Me olvidé de decirles que Edwie tiene como un "don", sabe donde hay una fiesta por más que esté muerto. Gracias a él, salíamos casi todos los fin de semanas.

―Lucy, deja que pasen tus amigos, no los dejes a fuera con el sol que hay.―mamá se acerca a la puerta y me corre para que pasen mis amigos. Ellos no tardan en entrar a mi casa y dirigirse a mi nuevo cuarto.

―No te quedó tan mal después de todo.―dice Caroline mirando todo mi cuarto.

―La rubia tiene razón.―Gionni se le une sentándose en mi cama. Edward al entrar se quedó mirando su reflejo en el espejo de la pared. Me contaron exactamente todo lo que hicieron en sus vacaciones con lujo de detalles. Caroline y Giovanni tuvieron un amor de verano mientras Edward empezó hablar con su único amor, Danielle.

Danielle tiene el mejor promedio de toda la escuela, en el colegio es una chica "invisible" y por lo que él dice, tiene un corazón de oro.

―Le acabo de decir a Danielle para ir a tomar algo.―dice mi mejor amigo sacudiéndome de un lado a otro.―Y ME ACABA DE DECIR QUE SI. LOS SIENTO CHICAS, ÉSTE GUAPETON SE VA.―grita saltando en su lugar. Lo miramos sorprendidas y nos reímos, para luego mirarnos con malicia. Él sabe lo que se nos cruzo por la mente y empieza a negar con la cabeza.

[...]

―No puedo creer que las deje hacer esto.―dice Edward caminando con la cabeza agachada. A lo que se refiere es que vamos a seguirlo, es la primera cita de ellos dos y sólo queremos ver si la tal "Danielle" es suficiente para nuestro amigo.

―Si esa pequeña diabla te rompe el corazón, aquí estaremos.―habla Gionni pasando su brazo por los hombros de Edwie. ¡Así se habla!

―No te ilusiones tan rápido, y recuerda; trata de hablar más de ella y menos de ti.―dice Caroline mientras paramos en la puerta de una cafetería. Edward mira por todos lados nervioso, creo que es su primera cita.

―Espera ¿es tu primera cita?―pregunto curiosa. Él asiente repetidas veces tragando saliva.―Oh cariño, lo harás bien, sólo no te creas el centro de atención.―le doy palmaditas en el brazo. Nuestro amigo entra a la cafetería y se sienta en una mesa del fondo, nosotras tres entramos riendo disimuladas y nos sentamos en una mesa lejos de Edward. Luego de varios minutos mandándonos mensajes, llega Danielle. Es morocha, sus ojos son celestes, sus pómulos están bien marcados, es una chica muy atractiva, con razón está tan enamorado.

Viviendo con LuciferDonde viven las historias. Descúbrelo ahora