Love Crossed

Capítulo 11

 Hannah

¿Qué hice? ¿Qué hice? Por el amor de Dios, he cometido el peor error, engañé a Nicholas y eso jamás me lo voy a perdonar. Sólo recogí a Hope de la guardería, me encerré en la habitación, me acurruqué con ella y empecé a llorar. Ella no entiende lo que me pasa y aún así es muy pequeña para comprenderlo. Sé que cuando sea mas grande tal vez pueda comprenderlo hoy sólo sé que aunque es imposible haría lo que fuera porque no sufra como yo.

      —  ¿Mami, Will puede venir a jugar hoy con nosotros? — pregunta inocentemente sin saber que he sido yo la que he estado jugando con él.

      —  No lo se, cielo Will tal vez está ocupado hoy. Él es un hombre grande y tiene cosas que hacer - le acaricio el cabello.

     —  Esté bien, ¿pero podemos salir nosotras? — me mira entusiasmada y no puedo resistirme.

     —   Claro que sí, mi amor. Vamos a la playa ¿si? — se emociona y me limpia las lágrimas con sus pequeñas manos.

    —  Sí, mami, sí — dice mientras se pone a brincar encima de la cama.

     —  Oye bájate - la agarro, le empiezo a hacer cosquillas y se ríe.

Me pongo de pie y empiezo a buscar nuestros trajes de baño, definitivamente hoy le voy a dedicar todo el tiempo a mi hija, no importa si Rachel me necesita para cosas innecesarias.

hoy me voy a divertir con mi hija y eso es lo único importante hoy.

      —  Andando  —la tomo de la mano y nos dirigimos a la puerta principal del hotel.

Pasamos toda la mañana entre risas, corriendo y jugando con la arena y el mar. Es tan pequeña aún que sólo la meto al agua conmigo en brazos y empiezo a llenarla de agua con una mano. El agua está fría pero amo la tranquilidad que me da estos tipos de lugares y el olor a sal se me impregna en las fosas nasales. Al llegar la tarde y mientras el sol se pone decidimos salir ya que empieza a hacer frío y paseamos por el centro comercial más cercano del hotel, compro alguna ropa para Hope y ella decide comprar recuerdos para toda su familia, literalmente toda. Compramos unos llaveros súper lindos con un sol y también una postal de una playa súper mona, después a Hope se le antojo un helado así que compré uno para ella y uno para mí.

Volvimos hacía el hotel, la verdad es que no tengo ganas de volver allí, me quedaría vagando por las calles y la playa en vez de encontrarme con Will o peor aún, con Rachel.

Madre mía arruiné todo.

De vuelta en la habitación del hotel dejo los recuerdos que eligió Hope en la mesita de noche y me recuesto en la cama mientras Hope reposa al lado mío, intento dormir pero mis errores me persiguen y me dan vuelta en la cabeza. Necesito pensar, lo sé, pero también necesito descansar sino esto va a empeorar.

William

Estar con Hannah de la forma que sea ha sido lo mejor que me ha pasado en la vida, no me canso de admirarla sus labios, su pelo tan suave al tacto... toda ella es perfecta y no hay nada en el mundo que quiera más que estar con ella y poder ser felices, no pido mucho.

Por la mañana cuando llegué a la habitación, Rachel no estaba, llevo todo el día esperándola, pero nada que aparece y tampoco contesta mis llamadas, hasta parece que lo hace adrede. Yo sólo necesito aclarar esto como personas adultas, tampoco es que yo sea perfecto, pero al menos para no seguir arruinando todo lo que toco debo aclarar esto.

      —  Hola, amor — saluda una Rachel algo pasada de copas cuando entra al departamento.

      —  Joder, Rachel, ¿por qué no me contestabas? Llevo llamándote todo el día y tú no das señales.

      —Tranquilízate, sólo fui a tomar unas copas con mis amigas, ¿no puedo? — pregunta con un tono burlón dejándose caer en el sofá.

      —  No dije que no podías solo que quería hablar contigo ¿vale?

      —Está bien, te escucho, mi amorrrrrr - alarga la erre y se lleva las manos a la boca haciendo un gesto sorprendido —. ¿Si puedo llamarte mi amor ¿no? Seguimos siendo prometidos, futuros maridos.

      —  De eso quiero hablarte.

      —¿De qué? ¿Me vas a hablar de las mujeres con las que te acuestas cada noche desde que llegamos aquí? o... 

      —Rachel yo... — tomo aire y me paso la mano por el pelo — cometí un error, asumo mi responsabilidad y quiero ser sincero contigo, es decir... esto ya no funciona — me sorprende que se quede tan quieta en el sofá, al parecer las copas me ayudaron a que no se alterara.

      —No, no funciona y nunca funciono. ¿sabes por qué? Porque nunca quisiste hacerlo funcionar, ese es tu jodido problema, me dejaste toda la responsabilidad de la relación a mí

      —  Los dos tuvimos la culpa

      —Vete —  dice abriéndome la puerta y se queda esperando.

Esto me causa un poco de gracia, pero la disimulo, ya que el dueño del hotel soy yo.

      —  Te dejo para que descanses, mañana llamo al chófer para que te acompañe al aeropuerto.

      —  Y me lo dices como si fuera una cosa, un objeto que deshechas, por favor, William, soy... era tu prometida, deberías de tener un poco de consideración por estos años que pasamos juntos y mínimo acompañarme hasta la ciudad.

      —  Rachel, yo necesi...

      —  Necesitas quedarte - me corta -. Perfecto, quédate follando a cualquiera que pase por enfrente de ti o mejor aún, a Hannah te la puedes coje...

     —  ¡Basta ya! - le grito —. Joder contigo, quédate los días que quieras si es lo que te hace feliz — le respondo encaminándome al elevador.

     —  Will —  susurra.

     —¿Qué pasa ahora?

     —  Yo... —  carraspea — nosotros necesitamos cancelar todo lo que teníamos hasta ahora, nuestro compromiso... todo -—finaliza echándose a llorar.

      —  No te preocupes, yo me hago cargo de todo — por supuesto que no lo haré yo, lo hará mi personal.

      —  Mi trabajo... — solloza.

      —  Rach, terminamos, pero no estoy tratando de dejarte en la ruina, sigues con tu trabajo, sólo que lo nuestro ya no da para más.

      —Gracias por esto, siempre te voy a querer —me dice abrazándome demasiado fuerte para mi gusto. Como puedo me safo de ella y subo al elevador dejándola destrozada.

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