Parte 23

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Diana

Mi corazón latía de una manera anormal, mis piernas comenzaron a temblar y mis manos sudaban terriblemente.

-Diana...-la voz ronca de Harry me ponía los pelos de punta era una sensación agonizante y satisfactoria.

-Harry.- intente qje mi voz fuera directa pero falle terriblemente el nerviosismo me delataba.

-No sabía que habías vuelto.-me miraba fijamente a los ojos lo cual me inquietaba un poco.

-Llegue hace rato, Louis no está si vienes a buscarlo.- trataba de sonar casual.

-Ya veo, bien ah...creo que volveré más tarde.

-Si...-se dio la vuelta, pero casi de inmediato giro hacia mi de nuevo.

-Lamento mucho todo.- lo mire a los ojos, sus perfectos y hermosos ojos esmeralda me volvian loca, su mirada era tan profunda.

-También yo...-susurre y no pude evitar morder ligeramente mi labio inferior.

Harry bajo la mirada sin decir nada, segundos después se acerco a mi. Yo no me moví así que quedamos a centímetros de distancia. Su aroma varonil y fresco me invadió por completo, aquella sensación que me dio cuando nos besamos, me invadió una vez más, así que puse todo mi esfuerzo por controlarme pero no estaba funcionando del todo.

El acercó su rostro aún más al mío, el olor a menta que desprendía de sus labios invadio mi respiración, mi corazón latía con tanta fuerza que podía escucharlo.

-Eres hermosa Diana...- las mimas malditas palabras que dijo cuando me beso la primera vez.

-No funcionará esta vez Harry.- susurre.

-No espero que funcione...

Sin decir más, sin pedir permiso y sin temer a mi reacción, junto sus labios con los míos, mi poca voluntad de querer mantenerlo lejos me abandonó por completo, era sumisa a él, controlaba mis sentidos en todo aspecto. Correspondi su beso, un beso desesperado y deseoso nos gobernó.

Harry me tomo por la cintura mi pego con fuerza a su cuerpo, abrace su cuello sin siquiera controlarme parecía que no era dueña de mi misma. Bajo lentamente sus manos a mis muslos y me cargo, yo rodee su cintura con mis piernas, entramos al departamento sin dejar de besarnos, pude notar como de una ligera patada cerró la puerta y me pego contra ella.

Su tacto hacia que mi cuerpo experimentará sensaciones nuevas, el deseo inundaba todo mi sistema, no quería que se detuviera, sus besos desesperados y ansiosos me llenaban de placer de una forma indescriptible.

Una vez más caí ante Harry Styles, una vez más se apoderó de todos mis sentidos en cuestión de segundos, ese era el poder que tenía Styles sobre mi. No quería que se detuviera sin embargo debía detenerlo. Aleje mis labios de los suyos, su respiración era agitada y jadeante igual que la mía. Pegue mi frente a la de el y mordi mi labio inferior suavemente.

-Debemos parar...-susurre.- Esto no es lo correcto.- Harry abrió sus ojos para mirar directamente a los míos.

-¿Y cómo sería correcto?

-Debes explicarme todo Harry absolutamente todo...

-Lo haré.-susurró y me bajo lentamente al suelo.- Te diré todo respecto a tu hermano...

-Louis ya me contó todo, como se involucró contigo y porque, incluso me dijo que le confesaste nuestros pequeños "encuentros".- lo mire a los ojos.- no es eso lo que quiero que me expliques Harry...

-¿Entonces que es?.-me miró confundido.

-¿Quién es la chica que recogiste en la universidad?.- fingi no saber quién era, no podía decirle que Trina ya me había dicho quien era.

El rostro de Harry se tornó serio, fue como si le hubiese lanzado una bomba o algo por el estilo.

-Su nombre es Nicoll...

-¿Tuviste algo que ver con ella?.- la curiosidad me ganaba no podía controlar mis palabras.

-Ven...-tomo mi mano y me dirigió al sofá para sentarnos.

-¿Y bien?...

-Verás Diana, salí con Nicoll hace varios años, mi relación con ella no era algo formal y no le daba mucha importancia...tengo...ciertas reglas.- cuando dijo eso último recorde lo que Trina me había dicho y que de cierto modo no quería creer.

-¿A q-qué te refieres?.-pregunté nerviosa.

-Tengo cuatro reglas Diana, si alguna chica quiere estar conmigo debe entenderlas claramente...

-¿Cuáles son?...

-No puedes retenerme, no puedes pedirme explicaciones, no puedes preguntar sobre mi vida personal y...-dudo unos segundos pero continuó.- no intentes enamorarme, yo no me enamoro...en teoría las cosas eran meramente sexuales.

-¿Con Nicoll fue diferente?.-no me quedaba del todo claro que había de especial con ella.

-Nicoll, rompió las primeras tres reglas muchas veces pero nunca la detuve ni la aleje, ese fue mi error...porque después intento romper la cuarta regla y fue ahí donde todo se fue a la mierda. Yo no la amaba ni estaba enamorado de ella y por más que ella "intento" no pudo conseguirlo. Al no detenerla las primeras veces ella se creo falsas ilusiones, le hice mucho daño emocionalmente con mi rechazo y fue cuando desapareció, me preocupaba de cierto modo sin embargo fue como si la tierra se la hubiese tragado.-me miró a los ojos.- la noche que fui por ella a la universidad realmente iba a verte a ti, sin embargo antes de llegar recibí un mensaje de ella diciendo que quería verme, sentí que se lo debía después del daño que le hice Diana...

-¿Qué sucedió esa noche?.- no estaba segura si quería escuchar ls respuesta pero aún así pregunté.

-Me dijo que necesitaba despejar su mente, que ella deseaba tenerme aunque no la amara, que ya no era algo que le importará simplemente quería tenerme...

-¿Y...qué le dijiste?.- tengo que aceptar que un poco de angustia invadió mi cuerpo.

-No le dije nada, sólo la lleve a casa, desde entonces me llama de vez en cuando suplicando verme.

-¿Accedes a eso?.- el sólo negó con la cabeza.- Aquella vez que me detuviste afuera de tu departamento...dijiste que yo había roto todas y cada una de tus reglas, ¿lo dijiste enserio y por que lo dijiste?.

Harry no dijo nada alzó la mirada para mirarme a los ojos y un ligero suspiro se escapó de sus labios.

 GANSTER- Primera TemporadaOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz