Operation LOTTO: "City Of Dice"

Capítulo 9: "Lo correcto"

Capítulo 9

En el momento inesperado y en la larga hilera de monitores que se encontraban encendidos, las cámaras que alguna vez eran sus ojos comenzaron a desconectarse. Una por una, los ruidos aturdidores, la calma de algún motor a lo lejos, imágenes entre el azul, negro y verde; todo aquello quedó completamente sumergido en la oscuridad.
Otra cámara que vigilaba los salones vacíos de las escuelas, también murió al ser desconectada hábilmente de la fuente de energía. Pero eso logró que maldijera a la nada y comenzara a teclear para volver a retomar la conexión ya que no podía permitir abandonar a todo su equipo de esa forma.
Uno de sus compañeros esperaba una respuesta rápida, se podía ver el fuego en uno de los monitores y volvió a maldecir. Empujó rápidamente la silla con ruedas hasta poder ver en la tableta averiada un poco de esa lista que seguía normal. Hasta que todos los nombres de esa lista emergieron con la palabra que no quería ver. Volvió a conectarse a la radio que crujía con un ruido espantoso, odiaba la precariedad de todo aquello, los más altos y respetados instrumentos tecnológicos que podía tener no le sirvieron.

Nadie contestó.

Este era el principio del final.

Abrió los ojos al recordar lo que le había sucedido a él y a su equipo. Lars había revivido recuerdos que no quería, pero su mente le jugó la mala pasada al relacionarlos con lo que tenía al frente de nuevo. Su condición lo obligaba a estar en una silla de ruedas, frente a trece pantallas que proyectaban la vista de las cámaras por la ciudad. Una iglesia, un edificio del gobierno, las calles aledañas a ellas y, una carretera que era su salida. Suspiró, como si eso fuese capaz de sacar los nervios y la ansiedad que lo invadía, nuevamente era los ojos de un equipo. Los ojos de SEVENTEEN.

[♥]

Sus zapatos negros subían uno a uno los escalones para llegar a la puerta, que daba, a una gran pista de aterrizaje en el edificio más alto de la ciudad. Sus cabellos ahora cortos, se movieron suavemente al encontrar contacto con el viento y el agarre de las cadenas que llevaba en su otra mano, se apretó con fuerza. Jeonghan llevaba un bolso. Aquel que había confiscado en la iglesia y que, ahora que lo pensaba, era una especie de invitación para las pequeñas lacras que pronto saldrían de sus madrigueras.
Escucho por el pequeño parlante en su oreja como la voz de 0808 le daba la luz verde para actuar. Ya era hora, las invitaciones tenían que ser entregadas.

En la hora pico de la ciudad, las calles estaban repletas de personas que eran obligadas a trabajar a pesar de las condiciones en las que se encontraban. Por ello, 1004 abrió el cierre del bolso y miles de papeles salieron despedidos por la fuerza del viento, el ayudó un poco y los vio caer por todas partes. Llegando a las manos de ciudadanos, policías y con suerte, al honorable líder de toda aquella mierda.

—Bien hecho, nos vemos abajo. —La voz por la radio resonó y no hizo falta nada más.

Los papeles que estaban en la iglesia, eran aquellos de los niños desaparecidos. Carteles de "se busca" que nadie colgó, que nadie quiso que salieran a la luz. Ahora, comenzaba el baile.

—¿Saben? Creo que ellos son como nosotros. —Vernon cargó el arma con seguridad y la escondió en su pierna mientras tomaba otra y la dejaba en su cintura.

—¿Qué es lo similar? —preguntó WonWoo guardando sus cuchillos afilados.

—Digamos, como el equipo LOTTO. Son niños que nadie se ha empeñado en buscar solo para seguir a un estúpido régimen ¿Y si descubrimos que los malditos trabajan para ellos?

—Vernon. —SeungCheol lo miró con diversión a pesar de que en su voz se notaba el intento de querer corregir a su menor. —¿Acaso sigues creyendo en eso? Ya lo hablamos, Hide&Seek es nuestra oportunidad ahora, tu madre está feliz gracias al sucio dinero que ganamos.