Capítulo 53

1.9K 125 6
                                    

Sigo sin saber lo que esta sucediendo, pero debo decir que ver a Anton sentarse con su traje en el piso y a su colega más grande revisando el taburete demasiado suave antes de sentarse en el es una escena particularmente cómica después de la media noche.

Lauren se sienta a mi lado y pone sus dos manos sobre mis muslos, con una sonrisa encantadora, su mirada verde profundo y su aire solemne que me preocupa tanto como me excita.

-Ya no quiero pasar tantas noches lejos de ti, Camila, susurra para hacerme su confesión. Quiero regresar a ti por la noche, siempre que sea posible, despertarme a tu lado, cuando tengas ganas de quedarte. Quiero bañarnos juntas y desayunos. Quiero verte ponerte crema antes de acostarte, sacudir tu cabello cuando te levantes, verte dudar entre tu vestido verde y el azul al momento de vestirte. Quiero darte la llave de mi hotel particular, concluye sacando el pequeño objeto dorado del bolsillo de su traje. Y quiero que te sientas como en tu casa allí. Tan seguido como quieras.

Las palpitaciones vuelven a comenzar, varias burbujas de felicidad explotan en mi vientre, en mi corazón. Tengo lagrimas en mis ojos pero ninguna palabra sale de mi boca, incrédula, subyugada frente a esta maravillosa declaración.

¡¿Pero que están haciendo esos 2 mercenarios en medio de mi sala, justo en el momento en el que muero de ganas de saltar sobre mi amante?!

-Cierren los ojos, los amenazo antes de abalanzarme sobre Lauren para tomar la llave y besarla tirandola del sillón. Creo que yo también quiero todo eso... Le susurro entre mil besos. Pero sigo sin saber que estan haciendo aquí.

-Para poder vivir en mi casa, debes responder un interrogatorio oficial. Es completamente estúpido pero obligatorio. Y terminaremos pronto...

-¡Si! Me enderezo dando un salto comprendiendo de repente la razón de todo esto. ¡Comiencen con las preguntas! Estoy lista.

-Esperamos la mayor seriedad y honestidad de su parte, Miss Cabello, me advierte Lars frente a mi cara jovial.

-¿Quieren decir que esto no es una cámara escondida o una parodia de una película de espías...? Le respondo en voz baja, imitando su aire grave.

Lauren ríe en silencio, veo a Anton voltear la cabeza para disimular su sonrisa y el gorila ignora mi última pregunta para sacar un archivo de su portafolios negro. El lo abre sobre mi mesa y esparce las hojas ennegrecidas de preguntas con letras pequeñas. Luego se aclara la garganta antes de comenzar:

-¿Conoce el titulo de la Sra. Jauregui y su posición en la familia real?

-Su Alteza Serenisima, respondo con la mayor seriedad del mundo, antes de agregar en voz muy baja, exclusivamente para Lauren, (y sexysima) .

- ¿Podría contestar la pregunta? Se desespera el castaño musculoso.

-¡Lars!, por supuesto que se que es princesa, y nunca sera llamada a reinar puesto que solo es la sobrina de la reina y de todas formas sus 2 hermanas estarían antes que ella. ¿Mejor?

-Debe tener plena consciencia de lo que su relación implica, Miss cabello.

-Y usted debería fruncir menos el seño, Mister Lars. Se que todo esto es importante, que se toman su misión muy enserio y hasta debería agradecerle a ambos, que la cuiden tanto. Pero no hay nada que puedan decirme para asustarme o hacerme huir. Lauren es todo lo que quiero. No su titulo, ni su dinero, sus bellos autos o sus paseos en helicóptero. No necesito un cuento de hadas, lo escribo todos los días... Y no se puede decir que la realidad sea igual de idilica que en las comedias románticas... Sin embargo, sigo estando aquí. Y no pienso irme.

Y si supiera que a pesar de los obstáculos, estoy viviendo un sueño hecho realidad...

Y si supiera cuanto la amo, lo locamente enamorada que estoy de esa mujer... Pero eso no se lo voy a confesar a su guardaespaldas.

Mi chica tenebrosa desliza su mano por mi espalda dirigiéndome la mas suave y cálida de las miradas. Y entonces recuerdo por que tengo tantas ganas de que este estúpido  interrogatorio se termine.

-¿Alguna otra pregunta?

-¿Donde habitara cuando no viva en el hotel particular de la avenida Marceau? Comienza de nuevo Lars, quien parece un poco mas relajado que al principio.

-Aqui. Cuando me hayan regresado mi taburete, rió viendo aparecer un intento de sonrisa en su rostro de matón.

-¿Hay alguna persona en su ambiente cercano que pudiera comprometer la seguridad del Sra. Jauregui?

-Hmm... ¡Esa no es una pregunta fácil! Digo con un aire molestó. Mis padres pueden ser algo pesados pero bastará con uno o dos autos para calmar a mi padre. Justin puede tender a dramatizar o a imaginarse escenarios catastroficos muy realistas, pero dejara de hacerlo si lo dejan probarse una de sus orejeras. Con Dinah, nunca estamos a salvo de un desorden de emociones, pero nada que no pueda arreglarse con algunos mojitos. Normani es demasiado cobarde como para provocar problemas, pero aun así les aconsejo que vigilen los demás temas delicados con ella: los cactus y los penes. En cuanto a Stanislas... No, no tendrá tiempo. Creo que esos son todos, sonrió eñextremadamente esperando terminar con la discusión.

Y mi princesa estalla de risa, como llevaba tiempo sin escucharla hacer, contagiando a Anton que hacia todo lo posible para contenerse.

Evito romper el ambiente diciendo esto en voz alta, pero omití citar el nombre de Shawn: ¿Lo sigo considerando parte de mi? No lo se. ¿El representa un peligro para Lauren? Tampoco lo se. Pero efectivamente fue por el que la tragedia comenzó... O, al menos, fue relevada. Y todavía no estoy cómoda con eso. No mas que que con el hecho de que parece haber desaparecido...

-¿Existe, en su vida actual o en su pasado, alguna ilegalidad, vicio o secreto susceptible a poner en riesgo al reino de Dinamarca? continua el otro guardaespaldas, un poco mas fuerte.

-Dudo que mi adicción al yogurt sea un factor de riesgo. Pero aparte de los cadáveres de mis 2 últimos amantes en la cava, es todo lo que tengo que declarar.

-¿Tiene la intención de perjudicar, de alguna u otra forma, a la familia real? Comienza a desesperarse Lars.

-Creo que no me necesitan para eso... Digo con una mueca recargandome contra el hombro de Lauren, quien se tensa de repente. No, retomo, soy pacífica y esta familia merece la paz tanto como cualquier otra.

-Eso seria todo por hoy, se levanta con dificultad Lars, también enojado, acomodando sus papeles. Le pediremos una copia de su identificación, una declaración y su firma en el contrato de confidencialidad.

-Se los traigo mañana a primera hora, digo levantándome mientras agitó mi pequeña llave dorada.
¿Pase el examen de admisión?

-Si, señorita cabello, interviene Anton quien quiere terminar con nuestro sufrimiento. Gracias por su cooperación. Estaré abajo por si me llega a necesitar.

La puerta suena de nuevo y la noche puede al fin comenzar.

-Lamento imponere todo esto, suspira mi princesa desviando sus manos de diosa alrededor mi cintura.

-Y yo lamento no haber respondido mejor... Lars parece tan preocupado, digo acurrucandome contra ella.

-Estuviste perfecta. El quiere mucho a nustra familia, lleva mas de 30 años cuidando a mi madre, todo esto lo conmueve tanto como a mi.

-No quería abrir tu herida, acarició sus pechos bajo su traje.

-Solo tu me puedes hacer olvidarla... Me sonríe antes de bésarme apasionadamente.

La multimillonaria, y mi diario.(Camren g!p)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora