Teen Wolf | One-Shots.

[039] Theo Raeken.

Hola amores, antes que nada muchas gracias por sus mensajes, encerio no saben cómo me ayudaron. Me de gusto saber que cuento con su apoyo.

Las cosas gracias a Dios ya están un poco mejor. Mi hermano sigue delicado pero ya es solo estar bajo cuidado. Así que muchas gracias a todos. ♥

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La pareja se encontraba en las grandes calles de Italia. Pues bien era su lugar favorito.

Iban de la mano conociendo lugares y tomando una que otra foto.

Era su última noche en ese bello lugar, pues les esperaban el compromiso de ir tres bodas.

Scott y Malia
Stiles y Lydia
Jackson y Allison

Sin duda estos tres años habías cambiado totalmente su vida, pues ahora con veinte años acompañaría a sus mejores amigos y a su hermana Lydia, al evento más importante de sus vida.

-Sara, podrías compararme a un lugar.

-Claro.

-Deje tu ropa sobre la cama, iré por el auto, no tardes nena-besa sus labios y sale deja el a la chica sola.

Se dirigen a la cama y observa un vestido azul junto a unos tacones, sonríe con misterio y tras arreglarse baja en busca de su novio y lo encuentra  recargado en la puerta, le da una sonrisa y le abre la puerta.

-¿A donde vamos?

-Ya veras-dice tomando la mano de la chica entrelazandola dejándola en su muslo.

Llegan a un lujoso hotel y la chica frunce el ceño cual di le abren la puerta.

-Ya estamos registrados en otro hotel, ¿Que hacemos aquí?

-Ya veras-la toma de la cintura y se dirigen al último piso donde al llegar observa un camino de rosas, lo mira con confusión y al seguir caminando observa frente a ella un monitor.

Se apagan las luces y observa como se enciende y comienza a reproducir toda su historia junto al joven lobo.

Termina la películas mientras siente un camino de lágrimas y al voltear observa a su chico.

-¿Que es esto?

-Amor-me sus manos- nos conocemos desde hace cinco años, y sin duda eres la persona más importante para mí, que presentar estuviste ahí para mí a pesar de que te trataba como un idiota, y no sabes cómo te agradezco eso, pero sin duda me has ayudado a cambiar.

Gracias a ti soy una mejor persona, y se une si una mujer se hizo para mí eres tú, así que, Sara Martín, me harías el hombre más feliz del mundo-la jóven se tapa la boca al verlo incarse frente a ella-¿Te casarías conmigo ángel?

Observa y asiente te con lágrimas, se coloca de pie y besa a su ahora prometida para luego abrazarla.

Sin duda su vida había dado un giro inesperado, al igual que este viaje.

Pues no solo regresaría con el amor de su vida, sino también con una sortija en manos.