Miró su reloj, 10:58 am. Ya su secretaria estaría ultimando los detalles de su entrevista. Explicándoles el procedimiento. Nada de preguntas de su vida privada, nada que ver como la historia detrás de ese hombre exitoso. Su pasado quedaba atrás. Sólo importaba el presente y el futuro. Las únicas preguntas válidas eran las que incluían la palabra trabajo.


Dos minutos más tarde, las puertas de su oficina se abrieron para recibir a dos chicas. Una de cabello pelirrojo, blanca, ojos verdes. La otra morena, cabello largo negro y ojos marrones. Sonrío ante ellas y mientras esperaba que tomarán asiento, un recuerdo invadió su mente.

Eran exactamente las nueve de la mañana cuando la misma chica pelirroja entró, hace dos años y cinco meses atrás, en su despacho, solo que esa vez, iba acompañada de una chica de cabello chocolate. Sus ojos se encontraron con los de él levemente y no pudo evitar sonreír. Era ella. La chica que tanto había buscado en sus tardes visitando la librería donde la vio por primera vez. La castaña le devolvió la sonrisa al reconocerlo y llevó un mechón de su cabello detrás de la oreja con nerviosismo.

— Zelena querida. Bienvenida nuevamente. — De esa manera las había recibido él, y a pesar de que hablaba con la pelirroja, sus ojos ya se habían posado en su acompañante, quien en este momento sacaba la cámara de su cartera terciada.

— Gold, te presento a Belle French, mi nueva asistente. Una chica que promete ser una muy buena y exitosa redactora para nuestra revista. — Había mencionado la periodista sacándolo de sus pensamientos.

— Buenos días Miss French. Es un placer conocerla. — Gold recordó como sus labios se habían movido automáticamente para colocar una sonrisa mientras le extendía su mano.

— El placer es mío Mr. Gold. – Había respondido ella sin quitarle la mirada de sus ojos, haciendo que un ligero escalofrío invadiera el cuerpo nuevamente ante ese contacto.

Adam se había preguntado a si mismo ¿Qué era lo que tenía esa mujer que producía ese efecto en él?, y sin darse cuenta, se había quedado mirándola por unos segundos, admirando su belleza, sus facciones. El recuerdo de como Belle le sonreía sin apartar la mirada de los ojos lo mantenía vivo.

—¿Iniciamos? —  Había preguntado la pelirroja haciendo que sus manos se separaran.

— Iniciemos – Había agregado Belle antes de que su cara se volviera rojiza, haciéndolo sonreír a él, pues ese color natural en la castaña la hacía lucir increíblemente bien.

Gold también recordó cómo, lo que sería una aburrida entrevista sobre su trabajo, terminó siendo una obra de arte, pues Zelena había cedido su entrevista a su asistente y está había dado la talla con preguntas fuera de lo común, idiotizándolo por completo. La voz, gestos, la posición que colocaba al escribir y esa espontaneidad con la que usaba la cámara fotográfica lo habían cautivado, pues Belle no solo se había dedicado a estudiar y buscar su vida, sino que se atrevió a compararlas con cosas tan cotidianas que no podía evitar sonreír.  Él todavía recordaba cada pregunta y cada respuesta de ese día.

—Dicen que su nuevo proyecto será revelador… ¿Cree que será tan exitoso cómo la llegada de la pizza?

— Probablemente si querida — Había respondido él con una sonrisa que hizo sonreír a su entrevistadora. — Este nuevo proyecto requiere de un cuidado y una receta única para su éxito, y por supuesto tiene ingredientes de la mejor calidad.

— ¿Qué tiene de diferente este nuevo proyecto con el anterior? ¿Qué es lo que marca la diferencia en un proyecto arquitectónico?

— Cada proyecto tiene su toque adicional. Es como la pizza — Y nuevamente otra sonrisa inundó su cara mientras hacía referencia a su pregunta anterior. — Si siempre la preparas igual te aburrirá mientras que si le agregas un nuevo sabor, un nuevo ingrediente, algo que la haga única, seguirás amándola.

— Si pudiese entrar en la mente de algún arquitecto exitoso del pasado, ¿Qué quisiera averiguar?

— Fácil querida. Entraría en la mente del creador de la torre de piza. ¿En qué demonios pensaba cuando la hizo?

La entrevista fue tan amena y divertida que Gold no quería que se terminará. Esa chica lo cautivaba cada vez más. Su picardía, su forma directa de abordarlo, el interés con él que lo miraba. Estaba tan concentrado en Belle que incluso recordó como se había sorprendido cuando sus palabras dieron por finalizada la conversación.

— Una última pregunta para finalizar con nuestra entrevista Mr. Gold, — Había agregado ella — ¿Si pudiera estar en los zapatos de una persona quien sería y por qué? —

En ese momento, Adam había tenido que recapitular la pregunta varias veces en su cabeza, haciendo que hiciera silencio por unos minutos para poder pensar muy bien lo que iba a decir.

— Otra respuesta fácil querida. En los de una mujer, cualquier mujer. Me encantaría entender la mente inteligente, brillante y única que ellas poseen. — Él había dicho en esa respuesta una verdad a medias, pues él en ese momento solo quería entrar en la mente de esa hermosa chica, saber que pensaba y si tenía la oportunidad de conquistarla, por eso detalló la expresión de Belle ante su respuesta, haciéndolo percatarse de que estaba sorprendida. Lo que él obviamente no sabía, era que Belle deseaba fuertemente que la mente de la mujer en la que su entrevistado entrará fuera la de ella, pues había grabado cada detalle del hombre, guardándolo en su mente.

En esa ocasión, la entrevista terminó con un "Muchísimas gracias por su tiempo Mr. Gold" acompañado de una leve sonrisa a la que él respondió con un "Gracias a usted Miss French, por tan hermosa y única entrevista. Sin duda tiene un gran potencial" mientras la miraba a los ojos y analizaba esa perfecta mirada azulada.

Él la había observado sonrojarse ante su comentario, regalándole la mejor de sus sonrisas como agradecimiento, haciendo que su mundo se viniera abajo, porque Belle, sin saberlo, lo había enamorado en solo dos encuentros perfectos. Y así, sumergido en su memoria Gold se olvidó por completo de las mujeres que tenía al frente hasta que un ligero carraspeo lo sacó de sus pensamientos trayéndolo a la realidad para encontrarse sentado nuevamente frente a él a la misma Zelena de siempre, solo que esta vez había una nueva acompañante, una chica llamada Raquel Miller.

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Gracias a todos por los votos y los comentarios y sobre todo gracias por leer.💛

Dedicado a la hermosa Belle de mi rol. Porqué solo ella podía inspirar este hermoso capítulo.💛💕✝

Corazón Oscuro - Rumbelle (Obscur cœur)Where stories live. Discover now