Kieru Rasengan

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-¡NII-CHAN! ¡KONOHAMARU-NIICHAN! ¡KONOHAMARU-NIICHAN!

Un fuerte y agudo grito rompió la paz de aquella fría noche, dentro de la residencia Sarutobi. Konohamaru salió de su habitación tallando sus ojos, encontrando a Boruto en su jardín, gritando por él como desquiciado.

-¿Qué quieres?

-Nii-chan, enséñame a usar el Rasengan -pidió con desespero- ¡Debo dominar esa técnica lo antes posible!

-¿Eh? ¿Quieres decir que planeas hacerlo tú as bajo la manga para el examen? -él castaño sonrió- Ya veo, quieres sorprender al Séptimo, ¿cierto?

-Emmm.. sí, claro

-¡Te has vuelto todo un ninja!

Konohamaru elevó la mirada al cielo con el puño en el pecho, era todo un honor pasar el legado del Cuarto a su nieto, estaba demasiado emocionado que hasta se soltó a llorar. <<Seré un maestro digno de pasar la técnica a su descendencia... ¡Cuarto! ¡Séptimo! ¡Acepto el papel con mucha honra!>>. Boruto estaba satisfecho de conseguir quién le enseñará el Rasengan sin recurrir a su tía, sin embargo, nadie dijo que sería fácil y Boruto lo descubrió al día siguiente.

-¿Eh?- observó incrédulo aquel globo con agua en sus manos

-¿Qué pasó con el entusiasmo que tenías esta mañana? -regaño Konohamaru- Otra vez. Fíjate en mí e imitame. ¿ves?

-¡Ya lo sé! Pero esto no funciona, ¿ves?

-No es necesario que me imites, ¿ves?

-No te estaba imitando, ¿ves? -miro el globo en su mano- Solo quería enseñarte que esto no sirve, ¿ves?

-¿Ves? ¡Deja de imitame, perico!

-¡Eso serás tú!-grito enfadado-¿Por qué un estúpido globo con agua? ¿No hay un método más efectivo?

Lanzó el globo al suelo haciéndolo estallar al instante, Konohamaru observó en silencio el pequeño berrinche de Boruto, entendía la desesperación del menor, él solía hacer todo al momento y odiaba entrenar, sin embargo, este jutsu no era sencillo.
Konohamaru había esperado mucho para enseñarle este jutsu a los nietos del Cuarto, sin embargo, Daisuke había heredado las naturalezas de Sasuke, Fuego y Rayo; Indra por su parte poseía las naturalezas de Agua y Fuego; por lo cual jamás había podido enséñale la técnica a otro, Boruto no estaba interesado en esas cosas, Himawari era aún muy pequeña y Shouta, bueno, él era un bebé aún.

-Él Cuarto Hokage tardó tres años en desarrollar la técnica y medio año más en dominarla -le enseño su globo- El nivel de dificultad del Rasengan es de rango A -hizo explotar su globo sin dificultad alguna- ¿Realmente creíste que seria tan sencillo?

Desarrollar el Rasengan resultó ser aún más difícil de lo que Boruto había creído, era demasiado trabajo. Joder que él era bueno, pero el control de chakra que se necesitaba para ese jutsu era monstruoso, al menos eso pensaba Boruto. Pasaron un par de días y él estaba hasta la gorra de los globos con agua, infernales porquerías.

-¿Te molestamos, Boruto? Tómatelo en serio-regaño Shikadai al rubio mientras jugaban con sus consolas en la tienda de hamburguesas

-¿Estaba dormido?

Boruto se regreso a la realidad en ese momento; él no estaba entrenando con Konohamaru, estaba jugando con sus amigos y se había quedado dormido con los ojos abiertos, estaba tan cansado que apenas había dormido en los últimos días.

-Hoy también te dormiste en la misión, ¿no?

-¡Ja! Con mi nivel puedo completarla incluso dormido- presumió el rubio

PAUSADA - Boruto Next GenerationsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora