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Una vez que Zayn se había parado enojado de su silla, Louis quedó desconcertado, su padre era tan ambicioso y egoísta; y aún así Zayn lo miraba como si fuera la persona más buena y amable del mundo, y eso le molestaba, aunque no era de su incumbencia.

Se levantó de su silla y caminó hasta la puerta cuando ésta comenzó a ser golpeada varias veces, la abrió y vió a Shawn, llevaba un sobre en sus manos, el cuál tenía el nombre y la dirección de Louis.

—Buenos días Louis, por fín un sobre para tí –dijo animadamente ofreciéndole el sobre a Louis.

—Buenos días –tomó el sobre y lo observó por todos lados.

—¿Se encuentran Niall? –Louis quita la vista del sobre y luego vuelve a mirar a Shawn. Éste llevaba rostro de esperanza.

—Aquí estoy –volteó rápidamente y vió a Niall, bajando las escaleras y una inexplicable mirada ya que tenía varias expresiones en ella.

—Los dejo sólos –comentó Louis apartándose de la puerta, Niall corrió hacia ella y comenzó a conversar con Shawn, se veían tan bien.

Caminó hasta la sala y abrió el sobre.

Un cordial saludo para usted señor Louis William Tomlinson, esta carta es para pedirle que sea el nuevo editor de nuestras portadas, para más información repórtese en las oficinas de nuestra empresa, su consulta está programada para cuando usted pueda hacerse presente. Se despide, las oficinas de Seventeen.”

Mientras leía la carta mantenía la boca abierta, ha trabajado para empresas más famosas pero esta era su favorita y por primera vez trabajaría para ella.

Corrió hacia su cuarto alegremente, ignorando el dolor que sentía en el trasero y con la atenta mirada de Shawn y Niall y se tiró a su cama abrazando la carta, juraba que su rostro iba a acalambrarse en cualquier momento -no es que sea un aburrido-.

Los golpes en la puerta hicieron que vuelva a la realidad, la abrió y vió a Niall con el ceño fruncido y confundido.

—¿Qué pasó? –preguntó entrando al cuarto.

—¡Trabajaré para la revista Seventeen!

—¿Y a eso se debe tu felicidad? Pensaba que ibas a conocer a tu banda favorita –soltó una carcajada.

—Es mi revista favorita imbécil –golpeó su hombro– Tendré que ir a la empresa, me citaron.

—¿Y cuándo irás?

—¡Mañana mismo! –gritó– Podría hacerlo hoy, pero no quiero mostrarme como un exasperado.

—Buena elección –caminó hasta la puerta y se detuvo– ¿Dónde está Zayn?

—Está en su cuarto –Niall asintió y salió.

Louis salió también y bajó hacia la sala, miró por la ventana y vió a dos rubios, uno llevaba el pelo largo, como el de Harry pero no lo tenía rizado. Le parecían algo conocidos, pero no estaba seguro. Estos dos tocaron la puerta de su vecino de en frente y éste último los recibió alegremente.

—¿A quién ves? –preguntó Zayn haciendo que Louis se sobresaltara.

—La casa de Harry –contestó.

Tenía tanta confianza con Zayn que nunca le mentía respecto a todo lo que hacía a escondidas.

—¿Qué hicieron anoche?

—Según él y con mis conclusiones –tocó su trasero– Tuvimos sexo –se encogió de hombros– Estaba borracho, ni siquiera recuerdo nada, sólo me duele el trasero –Zayn se carcajeó y se sentó en uno de los sofás.

El rizado de mis sueños ∽ L.S ©Where stories live. Discover now