capítulo 24.

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"Ella pensaba que el amor de un modo derrotaba al amor de otro modo, porque estaba en la índole de los hombres repudiar el hambre una vez satisfecho el apetito"
Cien años de soledad- Gabriel García Márquez.

DREN.

Voy en dirección al elevador que esta en los dormitorios para ir a hacer lo que el Coronel me ordenó y no se por que pero ya quiero regresar y tocar la puerta de la habitación de Evolet y pasarme horas platicando con ella, explicándole lo que quisiera preguntarme, lo único que quiero es escuchar el sonido de su voz y tal ves hacerla reír; apuesto que su sonrisa es hermosa igual que su voz y sus ojos, poder perderme en esos charcos multicolores y poder olvidarme de todo el mundo, a este paso la voy a acosar, actuó como un macho vinculado y eso no es nada bueno, no creo, alomejor y son los nervios de que no me ha dicho nada de mi defecto,sí ,eso tiene que ser.

Salgo del elevador, camino por el pasillo principal y salgo del edificio de los dormitorios y me quedo en piloto automático, no se porque, es sólo que no recuerdo nada de lo que hice ni dije solamente recuerdo que ya iba de regreso al edificio de los dormitorios, más bien estaba en las puertas de este.

llegó hasta la habitación de Evolet y llamó a la puerta.

- ¿Qué desea?- me dice la asistente de cuarto virtual.

-Hablar con Evolet soy Dren- se queda en silencio unos segundos y cuando habla otra vez brinco un poco de mi lugar y eso me da algo de risa.

-Ya puede pasar señor, perdón la tardanza.

Entró y veo a Evolet sentada en la cama, no trae zapatos, que extraño, pero bueno ¿A que venía? Ah sí, ya me acorde.

-¿Hay algo más que me quieras preguntar?- Idiota pregúntale otra cosa.

- Y que tal ¿Cómo te has sentido en tu nueva habitación?

- Muy bien gracias, ¿Te puedo preguntar algo?.

-Sí, dime.

- ¿Porqué no me dijiste que había una tipo niñera virtual?

- Disculpa, pero se me paso se detalle.

- Y vaya que detalle, no me deja hacer casi nada.

-Sí, así es al principio, pero tu le tienes que decir que cosas quieres que haga y otras que no.

- Ah ok, gracias por el dato.

-¿Ya comiste algo? - Pregunto para intentar alargar la conversación.

-Sí, Lory se encargó de eso.

Y todo se queda en silencio otra vez, vamos dile algo, lo que sea, pero lo cierto es que no se me ocurre nada.

-¿Porqué no te sientas aquí en la cama? me da no se que verte ahí parado en la puerta.

Cierto, durante todo este tiempo no me había movido de la puerta una vez que entre a la habitación, pero salido de la nada mis pies comienzan a dirigirse al lugar que dijo Evolet, me siento y le digo lo primero que se me ocurre.

-Lo siento es sólo que ya estoy acostumbrado a hacer las cosas hasta que me digan que las haga.

-Pero conmigo no tienes que ser así, sólo tienes que ser tu mismo.

-Trataré de hacerlo.

Me mira directamente a los ojos y un calor invade toda mi cara, genial ahora parezco un jitomate.

- ¿Son reales?- Pregunta mientras me sigue viendo fijamente a la cara.

- ¿Qué cosa?

-Tus ojos.

-Sí ¿Te molesta?- Pregunto un poco preocupado, pero lo cierto es que ya me estaba preparando para irme en cuanto escuchara la respuesta que siempre me dicen.

- ¿Porqué me molestaría? Son muy bonitos.

- Bueno, los tuyos no se quedan atrás.

- Gracias.- Dice mientras un rubor aparece un su rostro.

- ¿Tú cabello también es natural?

- si, así es.

- ¿Puedo tocarlo?- Dice mientras levanta un poco la mano y pone cara de suplica.

- claro.

Se acerca y su toque es tan delicado, y su olor, es tan fresco, huele como a rocío y tiene un toqué como de sandía, respiro lo más profundo que puedo para guardar su olor en mi memoria para siempre.

- Es tan suave, ¿Naciste así?

-No, un día era normal y al otro puf, despierto y tengo este color de cabello y de ojos.

- ¿Cambiaré después de la activación?

- Es algo probable, no te puedo asegurar nada.- En la activación e visto a algunos cambiar hasta de tono de piel, pero obvio eso no se lo iba a decir, no la quiero asustar.

- ¿Te puedo pedir algo?

-Sí.- Solo menciónalo y sera tuyo, me falto agregar.

- ¿Podrías estar conmigo cuando despierte?

- Lo prometo.- Y aunque no me lo pidiera era lo mas probable que iba a hacer.

-Y otra cosa más ¿Me enseñarías todo lo que tengo que saber después de la activación?

-¿Específicamente yo?.- Pregunto un tanto sorprendido.

-Sí.

-Sería todo un honor y un privilegio, pero tendrías que decírselo al Coronel primero.

- ¿Porqué dices?

-Lo que pasa es que por lo regular una vez que un origen pasa por la etapa de activación, se vuelven algo especiales.

-¿Mamones?.

- Algo así.

-Bueno, yo no y quiero que tu seas quien me enseñe.

Y justamente cuando le iba a contestar algo tonto, suena mi comunicador.

-Disculpa un momento.

Me levantó de la cama y me alejó un poco y cuando terminó de hablar estoy algo triste.

-Me tengo que ir, me necesita el Coronel.

- Sí, esta bien, gracias por escucharme todo este rato y aceptar todas mis peticiones.

-Pero regresare, en cuanto pueda lo prometo.

y por fin veo esa hermosa sonrisa que me he estado imaginando todo el día y sí, tenía razón, es muy hermosa.

Alas de ángel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora