Lo Que La Vida Me Quitó

Cap. 27

Al escuchar su voz, pronunciando mi nombre, me sorprendió, aún así le respondí.

"-Sí, soy yo, sigue descansando.”

Le sonreí. Hacía bastante tiempo que no la podía contemplar. Su pálida piel, sus ojos, sus labios...
Pero sobretodo, la fragancia de su perfume.

"-Mía, sé que tienes que estudiar, pero no te sobreesfuerces demasiado por favor."

No esperé ninguna respuesta suya, sabía que había vuelto a caer en un profundo sueño.
Quería quedarme más tiempo con ella, pero temía que alguien fuera a entrar, así que me levanté y...
No lo aguanté, antes de salir por la puerta, me dirigí nuevamente hacia donde ella se encontraba echada, e incliné mi cuerpo.

Besé su frente.

Juró que en ese momento me arrepentí, realmente quería probar sus labios, pero si hacía eso, estaría pecando. Para mí, por primera vez, me sentiría como si en verdad estaría pecando por atreverme a tocar sin permiso a un ángel como ella.

Pero de pronto me fijé en sus largas y abundantes pestañas que poco a poco se iban humedeciendo. Seguí mirando y vi una lágrima recorrer parte de su mejilla hasta llegar a su cuello.

"-Mía, no llores. ¿Tienes una pesadilla?"

Me acerqué a ella, verla llorar entre sueños me partió en dos, realmente no soportaría verla llorar.

"-Alex... Perdoname, perdondame por favor..."

Su voz se quebraba a medida que pronunciaba cada palabra, no entendía nada.

"-M-mía... No tienes nada de que disculparse, solo fue una pesadilla."

Sin embargo ella calló mis palabras depositando su mano sobre mi boca.

Al ver que me calle completamente, decidió abrir sus ojos mientras se acomodaba dificultosamente en su cama.

"-Siéntate aquí."

Dijo dando suaves palmadas sobre su cama.

"Alex, yo... Hay algo que debes saber."

No pudo contener sus lágrimas y sus fuerzas la abandonaron.
Lloró un largo rato sobre mi hombro, abrazándome sin separarse ni un segundo de mí, y es que yo tampoco quería separarme de ella.

Al fin me di cuenta, la amo.