Para hacer bien el amor hay que venir al sur

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-El almuerzo va a estar listo en un rato -escuché la voz de la Maruquita- ¿quieres que los despierte?

-no te preocupis, después comemos algo -dijo Jimin ahora- la idea es descansar para en la noche estar motivao motivao.

-bueno, si necesitan algo me avisan nomás.

Tan wena que era la Maruquita. Dios la bendice mientras a otros los maldice.

La puerta se abrió con la silueta del autentico ruzio oe zi en el umbral. Cerró tras él colocándole seguro lo cuál marcaba la partida de la cachita.

-¿estás seguro, wawa? -me preguntó y yo asentí- ¿ahora no comiste porotos, verdad?

-si me cago que sea con ganas -le sonreí mientras me acercaba a él.

Partí con miedo pero agarré vuelo rápido. Lo tomé del poto y lo levanté intentando no perder el equilibrio. Entrelazó sus piernas en mi cintura mientras me propinaba pequeños y dulces besos en mis labios.

Como todavía me faltan cazuelas el peso de Jimin hacía que me fuera pa los lados. Me ponía duro, pero igual guateaba.

-weón, te movis más que la chucha -dijo Jimin.

-no es mi culpa ser tan flaco -gruñí.

-¿¡me dijiste gordo!? -exclamó separando sus labios de los míos.

Lo único gordo que tiene es la media raja de vaca que se gasta el chancho culiao. Puta que pesa su wea.

-quizás tú no estai gordo, pero tu poto si y puta que pesa -reí.

Esperé a que también se riera pero con su mirada me mandó a la mierda.

-cosita, era broma j3j3j -comenté tomándolo con más firmeza para no caer- tú sabes que me gusta tu potito. Uff, waxito, quién fuera tu pololo para metertelo. Oh espera, yo lo soy j4j4j.

-chupamela -gruño mientras intentaba salir de mi agarrón de culo.

-no tientes al diablo, xiki boni.

-a qué diablo voy a tentar si eris terrible pasiva, Jungkook -rió.

Decirme pasiva a mí era como decir que el trasero de Jimin es gordo. Ambas son realidades que ninguno quiere asumir. Aparte no sé qué tanto le afecta si tiene el medio potosky y uufff, se me paró.

-Cuando te deje cojo quiero ver si me volví a decir pasiva -gruñí mientras lo acercaba al camarote.

-No si yo te la meto primero -sonrió.

Estaba tan cerca de la cama. Podía sentir la gloria al saber que no me había ganado el peso del culo del Jimeno. Pero como soy yo nada resulta ser color de rosa al final. Cerca ya de la cama me tiré con todo el fua arriba del cuerpo de Jimin sin soltarlo.

Se me había olvidado que esta wea era camarote y ¡Bum!

-¡MI CABEZA, CONCHETUMARE! -gritó Jimin.

Al menos él recibió todo el impacto del golpe, j3j3j.

Cuando cayó en el colchón se tomó la cabeza con ambas manos mientras me predicaba un rosario a lo Paty Cofré. Lo único que me quedó claro es que soy un aweonao tragasables come moco que no sabe hacer nada bien porque el pico me dejó mal. No lo dije yo, lo dijo el demonio de la Paty Cofré que se le metió a mi pololo.

-cosita, ¿estás bien? -pregunté poniéndome junto a él.

-¿QUÉ SI ESTOY BIEN? TE PODIS IR BIEN A LA CONCHETUMARE, JUNGKOOK CULIAO. ME DUELE MÁS QUE LA MIERDA, ME VA A QUEDAR EL MEDIO CHICHÓN POR TU CULPA. CABRO CULIAO -exclamó mi dulce princesa.

Quédate por siempre waxoWhere stories live. Discover now