Cartas a un Extraño ; Evak

∞ You're the closest to heaven that I'll ever be.

«Querido Isak,

Ayer seguramente fueron los mejores días de mi vida. Nunca en un millón de años me hubiera esperado que reaccionaras como lo hiciste.

Nunca dejas de sorprenderme Isak.

Después de hacerme la declaración de amor más bella y sincera que jamás haya visto, nos besamos hasta que no aguantábamos más, hasta que mis lagrimas se secaron y estuve con una sonrisa que nadie me la podia quitar.

Una sonrisa de la que tú eres responsable, bebé.

Entonces, te conté todo lo que necesitabas saber sobre mi enfermedad mental, que tenía faces maniáticas y depresivas y que mi comportamiento de la semana pasada fue el comienzo de mi fase maniática.

Me escuchaste con atención, como si quisieras captar cada detalle. Te dije que puedo ser muy difícil de tratar cuando soy maniático, asi como depresivo, y que, si solo una vez olvido tomar mi remedio, puedo comportarme de una manera impredecible e incluso peligroso.

Quería asegurarme de que supieras con lo que vas a tratar.

Quería que supieras lo difícil que puede ser.

Pero tú, siento el chico más asombroso que eres, dijiste que no importaba lo difícil que fuera, te quedarías a mi lado.

No puedo explicar lo feliz que me sentía.

Me sentía jodidamente feliz de ser aceptado por quien soy, no solo aceptado, sino también amado. Nunca en mi vida alguien me había tratado amorosamente.

Las palabras que me dijiste ayer han compensado cada vez que alguien me trataba de otra manera debido a mi enfermedad o cada vez que alguien me intimidaba por eso.

Las heridas del pasado, no están completamente curadas, pero cada vez están mejorando con cada beso, cada toque tierno.

No sé cómo me merezco a alguien como tú, bebe. No sé cómo puedo ser el chico que mereces. Solo espero que nunca quieras dejarme, porque te puedo prometer que yo nunca te dejare, hare lo que seas para que seas feliz a mi lado.

Después de que nos acurrucamos en la cama y solo hablamos de todo y tomamos la sopa que tu hiciste (todavía no acepto de que fue muy lindo de tu parte traerme sopa) y luego mi madre entro y suavemente, pero a la vez estrictamente te pidió que te fueras para que yo pueda descansar. Bueno, ella no sabe de que tu presencia me pone más tranquilo. Pero quien soy yo para quejarme.

Hoy es viernes y espero que mis padres te dejen venir esta noche. Después de que te explique de mi fase depresiva, querías venir a «cuidar de mi». Aunque normalmente yo diría que no necesito a alguien que me cuide, pero no voy a decir que no a los abrazos y besos que me darás. Entonces, te dije que vengas a las 6 de la tarde, que es en una hora. No puedo más. Ya quiero verte.

Con todo mi amor.

Even.»

Even dejo la pluma y el papel y salió de su cama. antes de salir de su habitación, guardo la carta, como siempre en la caja de galletas.

"¿Mamá?" Even llamo, mientras buscaba a su mama. La encontró en la cocina, preparando la cena.

"¿Si, cariño?" Levanto la vista del pepino que estaba cortando para la ensalada y sonrió a Even.

"¿Isak puede venir a las seis? ¿Por favor?" Even pregunto y sonrió suplicante.

Su mama dejo el cuchillo y suspiro. "Si, pero con una condición."