Capítulo 52: No Me Atormentes.

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Conducía mas rápido, con agilidad, tenia el tiempo contado, no quería perderla, no cuando aún les faltaba muchas cosas por vivir, mucho camino por recorrer, "Aún faltan muchas cosas que debemos hacer".
Con ropa de guardia de seguridad fue a buscarla, no le importaba que lo vieran así, solo necesitaba salvarla, era lo único que necesitaba hacer.
"Dolor.. Cada vez es peor", intento mover su cuerpo lastimado, sentía que le ardía cada moretón, la poca alimentación la hacia sentir mas débil, estaba sentada, pegado a la fría pared de ladrillos, sus ojos estaban cerrados, pero para su desgracia alguien abrió la puerta. —Bulmitaaa, ¿Cómo esta mi zorra?—Su voz salio con burla, sabia que, ella estaba mal, y eso lo hacia sentir mejor, entro buscando la, por el sótano que olía a humedad, y raramente a Tristeza, al ver la ahí, se acerco a ella con paso lento, estaba tan feliz, ¡Por fin sus planes salían bien! Eso lo hacia sentirse dichoso, se arrodillo al frente de ella, y con su mano derecha tomo la barbilla de ella —Sabes, me acaban de llamar de El Hospital Psiquiátrico, y adivina —Comento burlón, a lo que Bulma abrió sus ojos, no podía salir nada de sus labios, solo escuchó a Turles, tenia un nudo en la garganta —Hubo un incendio, y parece que, tu Vegeta murió en él ya que no se encontró su cuerpo, si no su ropa quemada con pedazos de carne casi echa cenizas —Canturreo con felicidad, mientras que Bulma abrió sus ojos, con terror, "No.. Él no... ¡No!", Sacudió su cabeza en forma de negación, su pecho le dolía, como se le hubieran atravesado con un hacha, sus ojos ya sombríos comenzaron a derramar cada vez mas lágrimas, su respiración era fuerte, no había mundo sin el.
La sonrisa de Turles cada vez se ensanchaba mas, ver la ahí, sufriendo, llorando, "Es un gran placer ver la tan... Herida tanto emocionalmente como físicamente", —¡Opps!—Exclamo con burla —Pensé que no te afectaría, lo siento. Sabes, yo me iré a celebrar, esto se debe celebrar, pero tu, ni sueñes que saldrás de acá —Se acerco a el oído de la joven, mientras que ella estaba llorando, no un llanto fuerte, si no que caían las lágrimas por su rostro, un llanto en silencio el mas doloroso —Él esta muerto, y ya jamas saldrás de acá, y si intentas escapar, no podrás, eres una débil, tonta y loca mujer, que no podrá escapar de esta casa, morirás aquí, sola, te iras al infierno, pero. . . Cuando yo muera nos veremos en el maldito infierno —Hablo, se levanto y la miro, sufriendo, no aguanto mas y soltó una fuerte carcajada, mientras abandonaba el sótano, "Hoy es un gran día" pensaba Turles, mientras pensaba a que bar podía ir, y de paso comprar unas nuevas esposas, pero unas esposas apretadas, y que la lastimen cuando intente mover se para escapar.
Turles por fin salió en su auto, feliz, se dirigió al Bar, no sin antes encender las nuevas cámaras de seguridad, y dejar informado al guardia que dejo en esa solitaria casa.
Una camioneta se estaciono, y de ella salio Vegeta, materia a ese miserable de una buena vez por todas, no lo dejaría tranquilo, hasta que la sangre de él escurriera por sucio piso, pero ahora tendría que encontrar a Bulma, con paso rápido atravesó la calle, llegando al andén, observo la casa sola, pero esta vez entraría directo al sótano, tenia que a ver una entrada al sótano, se dirigió por detrás de la casa, llegando a el jardín trasero que estaba bastante descuidado, hojas secas por todos lados, atrás un bosque oscuro, del cual daba aspecto sombrío, dejo eso a un lado y vio una pequeña puerta con candado, "¡Bingo!" pensó al ver la puerta, se coloco al frente de ella, y observó el candado, estaba viejo, seria fácil de romper, miro a los lados, y había un hacha, "Por fin la suerte va a mi lado" Pensó rodando los ojos, tomo el hacha, y con fuerza golpeo el candado rompiendo lo, tiro el hacha a un lado y empujo la puerta, la cual hizo un sonido rechinante, observo que adentro se encontraban unas escaleras viejas, se notaba que hace un tiempo no usaban ese pasadizo, se adentro bajando las escaleras, mientras que los escalones rechinaban, el olor a humedad golpeo sus narices, cuando piso el suelo sintió algo húmedo, era agua, lo ignoró y se adentro viendo que solo había una luz que iluminaba el lugar, recordó que ahí era donde Turles tenia la otra vez a Bulma, se acerco rápidamente y la vio, su corazón golpeo fuerte en su pecho pero ella estaba mirando otra esquina del lugar, mientras las lágrimas salían en silencio.
—Oh, Mujer te encontré —Se acerco a ella, arrodillándose al lado derecho de ella, Bulma lo observo, su rostro estaba demacrado, sus ojos perdidos, Estaba pálida y con unas ojeras profundas —Vegeta, No me atormentes como Yamcha, yo si te amaba —Dijo con voz perdida, ella creía que estaba alucinando como lo hacia siempre en este lugar, Vegeta la miro con dolor.
—Soy real, Mujer, soy yo, jamas te atormentaría —Hablo mientras que su mano derecha acariciaba su cabello azul, ella abrió sus ojos, sintió ese toque, era real, otra ves diferencio lo real, sintió que el alma volvía a su frágil cuerpo —Estas aquí, no estas muerto, estas aquí —Decía Bulma tocando el rostro de Vegeta, el asintió y abrazo, ella como pudo movió las pesadas cadenas que la sostenían, el había vuelto a salvar la, ¿Podran escapar de Turles?



Continuara....

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