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-Llegaron!!!- escuché el dulce grito de Tara-
-Yo quiero arrojarselas- dije ansiosa-
Abrieron la entrada a Alexandria y tres cabezas fueron directo a ellos, la cara de horror del padre de Lydia no tiene comparación alguna; estaba llorando mientras sujetaba aquel cráneo y mirando a los otros con tristeza, enfado y repulsión:
-Todo esto es tu culpa!- grito señalando con su dedo índice a mi, mientras yo reía fuerte afirmandolo-
-Sos una asesina y nadie mata a mis pequeños!- grito su esposa mientras yo reía más fuerte-
-Entonces yo soy nadie por que yo los torture y los mate!- dije riendo más fuerte-
-Pero nosotros tenemos a Paul- dijo y yo mire a mi pequeño entre sus brazos-
-Suelten a mi pequeño- dije sería y fría- esto es entre ustedes y yo, Paul no tiene nada que ver con esto- cada vez apretaba más mi katana- ¡Yo maté a Cameron y a Lydia, yo torture a Cameron y decapite a Lydia; no Paul!
-Bienvenidos a la guerra Alexandria- dijo la mujer mientras pasaba el cuchillo por una parte del cuerpo de mi pequeño y luego lo dejaba tirado-
-Ahora si- saque una pistola y asesine a la estúpida mujer- Paul.
Agarre a mi pequeño entre mis brazos mientras corría a la enfermería; su llanto volvía a matar cada espacio de mi alma:
-Enid por favor ayúdalo- le pedí mientras ella agarraba un montón de cosas de enfermería- Enid no lo puedo perder por favor te lo pido, salvalo.
Estaba inundada en lágrimas, necesitaba vivo a Paul; necesitaba a mi pequeño de vuelta entre mis brazos. Me sentaba, me paraba, caminaba y todo mientras miraba a mi pequeño que ya había dejado de llorar:
-Se pondrá bien pero mientras tanto tiene que permanecer con esta venda para que no se le infecte; Audry- dijo mirándome- hice todo lo posible ¿Si? Pero el perdió mucha sangre yo te digo que para mí se pondrá bien pero eso solo depende de el, ahora solo nos queda esperar.
El incesante ruido de balas, flechas, cuchillos y demás había terminado; yo estaba junto a mi pequeño, sosteniendo su manito:
-El se pondrá bien- dijo Carl abrazándome-
-Quiero estar cuando despierte- Carl solo tenía un poco de sangre en su ropa pero ni una sola gota en su cara- como cuando vos despertaste y yo estaba al lado tuyo.
-Audry- dijo mientras yo le sacaba la venda de su ojo- Audry es horrible por favor.
-No estás horrible, amor- dije apreciando la herida que le costó la vista, me acerque y le di un beso- seguís igual de hermoso.
-No me gusta me hace recordar que no puedo ver todo lo que ocurre en una batalla y tendré más oportunidades de morir que los demás.
-No digas estupices- lo abrace- vos seguís siendo el mismo gran guerrero que cuando perdiste el ojo o incluso mucho mejor- un llanto me hizo soltar a Carl de inmediato- ya está mi amor, ya está mamá está acá- lo tome entre mis brazos-
-Aca está papá- dijo Carl agarrando su manito y Paul nos miró-
-Don't Cry Tonight- canté un poco y Paul  hizo silencio- no llores esta noche, ni hoy, ni mañana por que yo no dejare que llores; no tendrás razones para hacerlo.
-No dejaremos que tengas razones para hacerlo- me corrigió Carl-
-¿Que ocurrió afuera? ¿Como están los demás?
-Bien, Los Susurradores se retiraron pero prometieron volver y llevarse tu cabeza o la de Paul- dijo con cierto temor en su voz-
-¿Ocurre algo más que no quieras decirme?- le pregunté-
-No, solo- se quedó callado, ni siquiera se atrevía a mirarme- no importa.
-Carl ¿Que pasa?- dije y luego ví como Paul descansaba en mis brazos- Mierda no te cortaron la lengua habla ¿Que ocurre?
-Cada vez que mató a alguien pienso que es una abominación pero no siento como si fuera una, me gusta ver la sangre y los gritos de los malos cuando los matamos pidiendo piedad... Es raro, soy un monstruo.
-No lo sos, está bien que te guste.
-Pero toda persona que le guste eso es un monstruo- ese comentario me dolió bastante- están acabando con una vida, Audry es horrible.
-¿Terminaste de alagarme o te quedaron más cumplidos para decir?- le pregunté algo enfada-
-¿Por que te enojas?
-Nadie es un monstruo Carl pero si así fuera solo vos y yo somos monstruos por que debes confirmarlo, no existe nada mejor que ver la sangre derramarse y el sentimiento de adrenalina al ver como sus miserables vidas terminan.
El se quedó en silencio, yo miraba a mi bebé y confirmaba que no dejaría que se llevarán nuestras cabezas sin una pelea previa; tendría que entrenar más duro de lo que usualmente lo hago:
-¿Alguna vez te lastime?- me pregunto mirándome-
-¿A que te referís? ¿Fisica o mentalmente?- le pregunté indiferente-
-Ambas.
-Jamas me autolesione por vos pero digamos que me cortaron los brazos por vos y mentalmente si lo hiciste de distintas maneras unas con gran impacto y otras con menos pero al fin y al cabo lo hiciste, al igual que yo lo hice con vos.
-Jamas fue mi intención- me dijo sincero-
-Algunas veces que yo te lastime si fueron mi intención, no creas que a mí también no me dolió hacerlo pero la venganza es así debes sacrificar algunas cosas con tal de lograrlas.
-¿Estas diciendo que lo nuestro es una cosa?
-No te pongas histérico por que en esta relación la única histérica soy yo y eso que aún no te reclamo nada.
-¿Y que me tenés que reclamar?
-¿Queres que empieze a decirte cada puta cosa que te puedo reclamar? Y es más tengo el maldito derecho de reclamar todo lo que a mí se me antoje Grimes.
-Audry no te pongas histérica.
- Y para colmo el imbécil me trata de histérica, no me tenés por que dar la razón en eso Carl; tenes qué negarlo.
-¿Me estás pidiendo que te mienta?
-¿Sos pelotudo o te haces vos? Por que para mí que lo sos.
-Entonces yo me enamore de una histérica de mierda y vos de un pelotudo.
-¿Como me llamaste la concha de tu hermana, pedazo de boludo?- le pregunté enojada-
-Audry
-No te metas Rick- le dije sin dejar de mirar a Carl- Respodeme pedazo de pelotudo ¿Como te atreviste a llamarme?
-Te amo- dijo abrazándome-
-Sali de encima mío imbécil, estoy enojada y no soy una histérica de mierda.
-Te amo- me volvió a repetir abrazándome más fuerte-
-Paul también te ama.
-Te amo- me abrazó más fuerte- a vos y a Paul.
-Yo también te amo pedazo de cornudo, ahora soltame.
-¿Como me dijiste?
-Pedazo de cornudo por que bien que te los metí.
-Vos tenés mas cuernos que yo, Lydia y Enid no son la excepción.
-No nombres a esa puta en esta conversación.
-Bambi.
-Boludo.
-Histerica.
-Los cuernos tuyos se notan de acá a la esquina.
-Asesina.
-Y con orgullo...

La Hija de NeganDonde viven las historias. Descúbrelo ahora