Las mañanas en el Reino occidental eran diferentes a las del Reino en Austria.
Los padres de Magnus, quienes eran totalmente amables, se veían más serios que de costumbre... Pero no le dio importancia.
La tensión del momento fue interrumpida por el rey austriaco, quien entabló conversación con Magnus sobre el matrimonio que estaba totalmente próximo y diciéndole también que esperaba amara a su hija como ella lo hacía con él.
Ante las respuestas afirmativas del Príncipe anfitrión, Stefan no pudo evitar sentir un gran nudo en su garganta que incluso le impedía respirar.
Al terminar el desayuno se disculpó para dar una vuelta en el palacio. Necesitaba distraerse, pero no contaba con que Magnus fue tras él.
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Príncipe Despreciable. ©
RomancePerder la cordura, como mínimo es el precio a pagar por amar a un igual... El mayor, es terminar decapitado en la plaza pública, y el intermedio morir en las mazmorras de tu propio palacio. ¿Cuál estás dispuesto a pagar? ** Historia original y tot...