Before the light.

Capítulo 12

      Después de aquel beso JJ y yo seguimos nuestro camino hacia una cafetería del centro y después fuimos a comer. No sacamos más el tema del beso o porqué pasó todo. Me agradaba pasar mi tiempo con él. Era una de las pocas personas en las que podía confiar y aunque nos hayamos besado, y de qué manera, sé que nunca me fallará. Esa misma tarde cuando llegué a mi casa me encontré a Harry y a Jenna hablando y riéndose y me alegraba verles tan contentos. Y me sentaba bien no encontrarme más cartas de amenazas pero tampoco podía cantar victoria. Resoplé sin darme cuenta y sus ojos se posaron en mi.

       - Hey - dijo Harry con una sonrisa que le marcaba sus bonitos hoyuelos, esos hoyuelos que tanto amaba. - Te estábamos esperando.

       - Aquí me tenéis - levanté los brazos. - ¿Y para qué me queréis ahora?

      - Niall quiere su revancha - Harry se encogió de hombros - Es muy cabezota pero con el tiempo se le coge cariño - dijo medio riéndose.  - ¿Vamos? - miró a Jenna y ésta estaba sonriendo también.

       - No me lo perdería por nada del mundo - cogió su bolso y su chaqueta y salimos los tres del apartamento.

        - Estarán Ashton y Calum también, espero que no os importe - subimos al coche de Harry y por el espejo vi una sonrisa picarona por parte de Jenna.

      - Creo que a Jenna no le importa - dije riéndome y como solía hacer siempre que le decía la verdad, me fulminó con la mirada.

         Seguía haciendo un día genial y qué más podíamos hacer que aprovechar cada segundo de días estraños como este. Harry condujo tranquilamente, cosa rara en él porque siempre lo había conocido como un loco amante de la velocidad y no solo porque amaba todo lo relacionado con las motos y los coches, sino porque lo pude comprobar hace unos días. Llegamos a su casa, Jenna parecía más calmada ahora cuando hablaba con alguno de los chicos. Me acordé de como se puso la noche del concierto y del VIP que ahora parecía otra. La vi demasiado amigable con Calum y por como era ella sabía que todo venía por una pequeña gran obesión llamada Colton. Niall me recibió con los brazos abiertos pero pude percibir que los demás no estaba. 

         - Ya era hora - no me dejó saludar a Ashton sino que tiró de mi hasta llevarme junto al futbolín. Pude notarme a mi misma como distraída y eso tuvo sus efectos negativos o quizás positivos. Niall ganó sin que yo marcara ni un gol. - ¡Sí! - Niall y Harry gritaron y saltaron a la vez, no pude distinguir cual de los dos gritaba más.

           - Chicas, este verano os espera una gran gira con nosotros - Ashton nos guiñó el ojo y entre todos empezaron a reírse. 

         - ¿Seréis teloneros? - le pregunté Jenna a Calum y este asintió. Me fijé en como Calum no podía quitarle la mirada, sonreía y en sus ojos veía un brillo que muchas veces había visto en los ojos de Jenna pero hacia Colton. Todo esto no podía acabar bien. Calum se dio cuenta de que lo miraba y se puso colorado.

       Harry me cogió del brazo, me llevó a una habitación que parecía un gran despacho con una amplia biblioteca y cerró la puerta detrás de él. Me pregunté mientras me reía cuantos de aquellos libros se había leído pero estaba segurísima que solo estaban por decoración. 

          - Prometí que no diría nada pero debes saberlo - puse toda mi atención en él. Harry puso sus manos sobre mis hombros y por como evitaba mirarme directamente a los ojo supe que algo iba mal, muy mal.

         - ¿Qué ... qué ha pasado? - dije tragando saliva.

        - Hablé con mi madre hace un par de días - me empujó de los hombros hasta acabar sentada en uno de los dos sillones, él se sentó delante mía y cogió mis manos - y algo va mal con tu madre. - mis ojos se llenaban de lágrimas y apenas conseguía ver nada.

         - ¿Qué va mal? - pregunté con un nudo en el estómago.

        - No me ha querido decir más pero iré mañana a Holmes Chapel para ver que puedo hacer - dijo apretando cariñosamente mis manos.

       - Yo también voy - me levanté bruscamente.

       - ¿ Y qué pasa con la universidad? - no me importaba la universidad porque mi madre estaba por encima de todo. - Iré mañana a hablar ¿vale? - sabía que él podía hacer mucho más que yo. Salté a sus brazos aún llorando y lo estreché en mis brazos como si fuera lo único que me quedaba aunque era de lo poco que tenía. 

        Salí corriendo de ahí sin saber muy bien a dónde iba a parar. Aún seguía llorando y sin darme cuenta acabé en casa de George y JJ. Y como siempre la puerta estaba abierta. Entré sin hacer ruido y estaban como siempre en la cocina pero esta vez no estaban riéndose, estaban discutiendo. 

       - ¿¡Por qué has hecho eso!? - le gritó George a JJ mientras lo cogía por el cuello de la camisa. 

       - Porque yo la quiero de verdad y no como tú - se soltó de un manotazo y lo empujó.

      - Es mía, como te dije cuando la vimos. ¡Es mía! - le gritó George colorado.

      - No soy ningún juguete - me sequé las lágrimas y entré lo más calmada que pude - ¿Eso soy para ti? ¿Una maldita posesión? - no podía escucharle, había tenido demasiado en un día. Miré a JJ que estaba incrédulo y no podía creerse lo que pasaba. Salí de esa casa lo antes posible sin intentar parecer afectada aunque me moría por dentro. 

       - ¡BROOK! - JJ salió detrás mía pero le supliqué con la mirada que me dejara pero me abrazó y me dio un beso en la cabeza - Tiene su explicación - puso sus manos en mis mejillas y me miró directamente a los ojos.

       - Estoy cansada de explicaciones - las lágrimas corrían otra vez por mis mejillas y JJ las limpió con la yema de sus dedos - Adiós - le rocé los labios con los mios y me fui. Ahora podía irme con mi madre sin que nada me retenga aquí. 

        - ¡No puedes irte así! - oí como gritaba detrás mía pero no podía hacer nada. Empecé a correr hasta llegar a mi casa.