Friends Don't Lie || «Hopev»

Capitulo 7: "Porque lo amas"

Si no me equivoco, era la millonésima vez que veía ese reloj, solo habían pasado cinco minutos desde la última vez, pero para mí era como si hubiera pasado una eternidad, aún estaba en clases tratando de tomar atención o al menos tratar de escribir algún apunte, pero simplemente no podía, mi emoción era mucho más grande.

Quería salir rápido de aquí, quería que se diera la hora de almuerzo y pasar tiempo con Jimin, conversar, conocerlo, saber más de él. Esto es realmente nuevo, es una sensación tan agradable que sentía la necesidad de pasar tiempo con él, verme reflejado en él y ser como él.

Quizás él sea la respuesta a todas mis dudas, sea el detonante para aclarar mi mente, pero no puedo ir tan rápido, no debo olvidar que aparte de mí, está Hoseok, debo tomar mi tiempo, y velar por ambos.

Así fué, como plegarias escuchadas, aquel reloj marco por fin la hora del almuerzo. Y por reflejo, me di vuelta animadamente a ver el asiento a mi lado, ahí estaba, no se había ido «Que felicidad, por fin», mi mirada lo decía todo.

—¿Tienes hambre?— Y si él no me hubiera preguntado no me doy cuenta, mi mente sólo pensaba en hablar y conocerlo, que se me olvido el hambre que tenía.

—Oh, sí, la verdad es que si, vayamos a almorzar— Me levanté con una gran sonrisa y pude notar que él soltaba una risita, sus ojos prácticamente desaparecían cada vez que él hacía eso «Adorable». Pronto se levantó y juntos caminamos en busca de comida.

Al salir de la sala no hubo silencio como esperé, porque pese a que estaba muy emocionado por hablar, no sabía cómo iniciar la conversación, di las gracias que Jimin sea una persona conversadora ya que de un momento a otro él ya la había iniciado.

—Cuéntame Taehyung ¿Eres de aquí?, ¿Qué te gusta?, ¿Tienes algún pasatiempo?, ¿Novia?, ¿Novio?— Y yo que creía que el único emocionado aquí era yo, lanzó todas esas preguntas tan rápido y eufórico, que puedo asegurar que se llevaría bien con mi madre.

—Uhm... soy de Daegu, pero me vine a vivir aquí a Seúl ya hace... cinco años, la verdad no tengo ningún pasatiempo, de vez en cuando me gusta cantar, pero no soy muy bueno... y no... no tengo novia— Un deje de melancolía recorría mi cuerpo, nadie puede saberlo.

—Que coincidencia, él igual es de Daegu...— Su rostro se mantenía sereno, como si ningún problema ocurriera entre ambos.

—¿Él? ¿Te refieres a esa persona, con la cual estabas hablando en el baño?— Mi pregunta más bien sonaba a un hecho.

—Si, muchas veces fuí a verlo a Daegu, pasaba muchos fines de semana con él... Antes de que todo se hundiera— Hubo una pausa, pero fué muy fugaz— Es irónico— Me miró un poco apenado— Tú cantas, yo solía cantar para él, a él le gustaba mucho mi voz— Rió, pero tan bajito, que si no estuvieras prestándole la suficiente atención, no lo notarías.

—Disculpa, yo no sabía, si te complica, no tocaré el tema de nuevo.

Podía verlo, él igual sufría y yo lo entendía, aunque no sabía completamente su historia, pero podía entender en parte el sufrimiento de no poder tener a la persona que amas a tu lado.

—Descuida, no tienes la culpa, estas cosas pasan— Él realmente es una persona fuerte y admirable— Ven, compremos algo y luego sentémonos por allá— Apuntó una mesa, la cual estaba alejada, era un lugar adecuado para conversar.

Al cabo de un rato ya nos encontrábamos en aquel lugar, el tiempo con Jimin fué agradable, pude saber un poco más de él, como que sus padres no apoyaban la idea de que se venga a Seúl, pero él sólo, a base de trabajo logró ahorrar lo suficiente para poder venir, también me contó que estaba un poco avergonzado, como él es de Busan tenía temor de no poder hacer amistad por su dialecto.