Epílogo

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Dos años después.

Harry y Louis estaban más feliz que nunca.

Tuvieron un nuevo bebé en la casa, y fueron los mejores padres.

Ambos felizmente se comprometieron.

Compraron una casa y tuvieron todo de ella.

Eran perfectos.

-Punto de visión de Harry-

“¿Louis?” Llamé. Caminé hacia el cuarto del bebé, efectivamente Louis estaba allí, jugando con el bebé. Haciendo tontas caras y ruidos, haciendo cosquillas a su barriguita. Silenciosamente me acerqué por detrás y giré mis brazos alrededor suyo.

“Hey.” Sonrió. Caí sobre la cuna y cogí el pequeño. Un gorro amarillo cubría su cabeza. Un pequeño onesie en su pequeño cuerpo. [Multimedia: Para quien no sepa que es un onesie, eso es] Presioné un beso en su cabecita y deslicé un chupete en su boca. “¿sabes lo que es divertido?” Sonrió. Dejé caer al bebé para mriarlo.

“¿El qué?” Pregunté con una pequeña sonrisa.

“Esperé dos años para verte abrazar un bebé así de nuevo.”Me reí entre dientes. Me acosté en el suelo y empecé a hacer caras a mi hijo. Ellos rieron.

“Lo apuesto.” Sonreí. Se acostó a mi lado.

“Esta cosa de ser padre es divertida.” Me giré a él.

 “Sí, claro, ¡porque tu no tienes que levantarte a mitad de la noche a hacer biberones!” Rió.

“¡Porque tú nunca me dejas!”

“Sí, porque les gusta más papá que papi.” Rodó sus ojos.

“Claro. Claro, bebé, lo que tú quieras.” Besó mis labios berrinchudos antes de sentarse, cogiendo al bebé con él y poniéndolo en su cuna. El bebé instantáneamente se acurrucó y cerró sus ojos, chupando el chupete. Louis le dio a nuestro hijo una manta y le vimos dormir.

“Entonces, ¿estás pensando sobre la boda?” Me preguntó. Me encogí de hombros.

“Estoy un poco preocupado con mi hijo pero, sí, lo he hecho.” Sonrió y arqueó su ceja.

“Te escucho.”

“No quiero dejar a nuestro hijo con nuestras madres. Quiero traer el bebé con nosotros.” Suspiró.

“Yo también lo quiero, ¿pero estás seguro de que podemos? Un recién nacido y un avión no parecen mezclarse.” Fruncí el ceño.

“Louis. Es tu bebé. ¿Por favor? Mira su cara. Su adormilada carita. ¿Cómo puedes decirle que no a eso? Es sólo una semana.” Louis mordió su labio.

“Hazza, la boda no está exactamente lejos. Tenemos que pensar sobre eso.” Asentí antes de dar pasos más cercas hacia él. Besé su hombro. Sus hombros cayeron e inclinó su cabeza a un lado.

“¿Por favor?” besé su mandíbula. “¿Por favor?” besé su mejilla. “¿Por favor?” Besé sus labios.

“Vale. VALE, ¡para!” Rió entre dientes. Le hice cosquillas en su costado y rió fuertemente. Yo también lo hico, antes de que un gemido saliera de la cuna. “Lo entiendo.” Yo susurré mientras se dirigía a la cuna para recoger al niño pequeño.

“Papá te tiene. Shh” Susurró al recién nacido. Sonreí. EL recién nacido se calmó en los brazos de Louis y mecía el bebé suavemente. Salpicó besos en su cabeza.

Todo era perfecto. Todo estaba bien.

Tenía a mis chicos.

Louis. Y mi hijo. Mi precioso hijo.

Tattos and dimples (Larry Punk AU) Traducción española.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora