La chica del apartamento 512 (AU's sans x reader)

✴5. El cuarto piso✴

- no, nunca vayas al cuarto piso

- ¿Por?

- nunca. vayas. ahí

Su cara se había vuelto mas seria de lo normal, y a pesar de mantener esa sonrisa permanente en su boca, se le veía que hablaba en serio.

- Ok

-...ey, ¿no te apetecería algo de comer?, creo que paps dejo algo de espagueti en el refri

- S-Si, claro

El muchacho se puso de pie y fue a la cocina por algo de comer; a los 20 min las cosas estaban listas, y los dos nos sentamos a la mesa a deleitarnos con tan exquisita pasta.

- Bueno, creo que ya tengo que irme, fue divertido pasar el rato aquí contigo

- lo mismo digo, adiós niña

- Je, bye Sans

En cuanto salí de su apartamento, este me despidió con la mano y cerro la puerta detrás mio.

Debo admitir, que siempre he tenido un gusto por lo prohibido, entre mas digan que no, mas emocionante debe ser tal situación, por eso, y en cuanto me aleje del campo de visión de Sans, subí corriendo las escaleras para ver que secretos tan horribles se encontraban en el piso de arriba.

Estaba muy oscuro, mas de lo normal, y la única lampara funcional parpadeaba como loca.

- Pff, parece película de terror

Exclame son miedo, sin embargo, como en toda típica película de terror al momento de avanzar ligeramente por el pasillo, pude oír una puerta crujir tras de mi y pasos acercándose hasta donde me encontraba.

- Mmm, hacia mucho no olía sangre nueva, me pregunto, ¿a que sabrá?

Di media vuelta aterrada, encontrándome frente a frente con un chico de pelo sucio, llevaba una venda en la cabeza y esta se le podía ver manchada de sangre. Antes de poder hacer nada, este tomo mi mano con fuerza y sin vacilar dio una enorme mordida en el dorso, sacándome  sangre y lamiendola con deleite.

Trate de soltarme, pero su agarré era muy fuerte, y me hacia daño cada vez que jalaba; una segunda mordida y yo ya estaba sin fuerzas, soltaba pequeños gritos ahogados mientras varias lágrimas escurrían por mi cara.

- ¡Ey, deja la en paz!

Del lado derecho del pasillo, un chico de sudadera blanca con un logo algo raro en medio de esta había llegado a salvarme.

(N/a): Este es mi Au Sans, Reset!Sans, lo explicaré más adelante para no interrumpir tanto.

- Vaya, vaya, miren quien esta aquí, Reset

- ¡Fuera de aquí Horror!

- Claro, te sientes mucho porque tienes a tu estúpido hermano protegiéndote, ¿o no?

- Fuera. De. Aquí

El denominado "Horror" soltó un bufido y dejo caer mi mano, la cual ya no sentía para nada, y el simple hecho de verla bañada en sangre, me causaba unas náuseas insoportables.

- Listo creo que ya... ¡Oh dios mio, casi me olvido de tu mano!

El chico de la sudadera blanca me tono en sus brazos y me llevo cargando hasta su departamento; me coloco en el sillón y se sentó a un lado mio tomando mi mano lastimada con delicadeza.