La Princesa Del Sol Y La Luna

32| Mal augurio

Serena miraba desde su asiento a Brittany en la recepción intentando obtener alguna información sobre el estado de Lili de quién no habían sabido nada desde hacía horas.

—Por favor ¿No tiene nada de información? —Insistió la cabellos chocolate a la recepcionista.

—Lo siento, aún no hay algo de lo que deba informarle, por favor espere en la sala de espera que le aseguro que en cuanto haya noticias se lo haré saber —aseguró la muchacha devolviendo su mirada al monitor a la vez que Brittany se devolvió junto a la rubia.

—Aún no hay nada... —Susurró Serena mordiendo su labio inferior y jugando con sus dedos pulgares.

—Seguramente no tardan en darnos noticias de Lili, hay que mantenernos tranquilas —le dijo Brittany colocando su mano sobre las de Serena.

—Espero que así sea, la verdad estoy sintiendo que estoy por volverme loca —musitó mirando a su alrededor haciendo preocupar a Brittany.

—Serena —la rubia le miró a los ojos al notar la seriedad en el tono de su voz —¿Has tomado tus medicamentos? —Le preguntó en voz baja.

—No lo he hecho —respondió desviando la mirada a su bolso —iré al baño a lavar mi cara y después los tomaré —le informó levantándose de su lugar para dirigirse a su destino mientras la cabellos chocolate le miraba ansiosa.

—Lo entiendo... Sé muy bien que tu estrés postraumático te está haciendo una mala jugada —pensó Brittany juntando sus manos —sólo espero que no te pongas grave y que lo que tenga Lili tampoco sea malo —suspiró dirigiendo su mirada a la recepción.

Cuando Serena entró al baño, ésta se recargó enseguida en los lavabos debido a que perdió el equilibrio ante el mareo que comenzaba a padecer, sentia una ligera opresión en el pecho acompañada de náuseas.

—Qué este miedo, qué está angustia se vayan... —susurró con un nudo en la garganta —por favor, que Lili no tenga nada grave —rogó para sus adentros para después abrir el grifo y tomar agua para mojar su rostro —una mala sensación me invaden, quizás tenga que ver con mi estrés postraumático o mi arritmia... O quizás me indica que me preparé para algo que va a suceder —abrió su bolso de donde sacó un pañuelo con el cual secó su rostro. —Maldita sea, espero sólo sea una paranoia por mi estrés —musitó desesperada llevando su mano al lado izquierdo de su pecho —por favor, no quiero que le suceda nada malo —una lágrima rodó por su mejilla, la rubia saco de su bolso algunos frascos de medicamentos los cuales abrió para tomar las pastillas.

Una vez Serena término, ésta salió de los baños para dirigirse a con Brittany donde antes de llegar a ella notó que Amy y Darien se encontraban en la recepción con sus uniformes.

—¿Estas bien, Serena? —Le preguntó Amy una vez se reunió con ellos al notar la ligera palidez en su rostro.

—Estuvimos en vela toda la noche así que no dormí bien, por eso estoy un poco agotada debido a la preocupación —le respondió con una leve sonrisa.

—La verdad es que no nos han dado noticia alguna de Lili desde que la hemos traído. —Les comentó Brittany a ambos.

—Creo que podemos averiguar algo, sólo esperen aquí —les dijo Darien para tranquilizarlas.

—Es obvio que vamos a esperar aquí —musitó entre dientes Serena notoriamente irritada.

—Nos ayudaría mucho eso, gracias a ambos —dijo Brittany enseguida a lo que ambos médicos se retiraron enseguida, entonces la cabellos chocolate se volteó hacia Serena —ellos tratan de ayudar, entiendo que estés angustiada, yo también lo estoy —le susurró colocando sus manos en los hombros de la rubia quién suspiro.

—Yo lo sé, pero la palabra "esperen" me va a volver más loca de lo que ya estoy al estar en este hospital —comentó dándose la vuelta para sentarse de nuevo en los asientos de la sala de espera, Brittany le siguió sentándose a su lado mirándole fijamente como mordía su labio.

—¿Hay algo más que no me estás diciendo? —Le preguntó la guardiana de la tierra —mira, entiendo que tú estrés postraumático genera que estés ansiosa y seas un poco hostil con los demás, pero siento que hay algo más que no tiene que ver con ello o con tu arritmia.

—No sé que es... —Murmuró mirándole a los ojos —pero tengo una especie de presentimiento, casi parecido al que tuve con mis padres —la rubia llevó sus manos al rostro para cubrirlo —me estoy repitiendo que es una paranoia mía debido a mi estrés postraumático, pero ya no sé que pensar.

—Tranquila, seguro todo estará bien —le susurró abrazándola —debemos mantener nuestra fe y nuestra confianza en pie, no podemos desmoronarnos —la cabellos chocolate pasó su mano derecha por los cabellos de su amiga acariciándolos —debemos intentar tener paciencia hasta saber que sucede —de pronto Darien y Amy llegaron con ambas estando acompañados de la doctora que habia recibido a Liliana a lo que ambas se pusieron de pie enseguida.

—¿Cómo se encuentra Lili? —Preguntó rápidamente Serena mirando a los tres doctores.

—La joven Liliana Tsukino Haruno está bien por el momento —respondió la doctora que demostraba en su gafete que se llamaba Mikaela.

—¿Por el momento? —Cuestionó Serena con el ceño fruncido —¿De qué está hablando, doctora Mikaela?

—Serena, a Lili le han hecho un exhaustivo estudio, entre análisis y escaneo —le dijo Darien con cierta mirada afligida que provocó que ambas amigas tuvieran un mal augurio.

—¿Ella tiene algo malo? —Les preguntó Brittany provocando que un silencio incomodo se suscitara entre ellos.

—¡Respondan de una vez! —Les exigió Serena con desesperación.

—Tal parece que Lili ha desarrollado un tumor —informó Amy con un nudo en la garganta.

—Tal parece que su accidente en las escaleras tuvo secuelas en su cerebro generando un tumor que se desarrolló a gran velocidad —explicó Darien crispando sus puños.

—Necesitamos continuar monitoreandola para ver si el tumor es curable —les dijo la doctora Mikaela. —Lamento mucho haber tenido que decirles esto.

Brittany reaccionó rápidamente agarrando con fuerza a Serena del brazo quién perdió la conciencia.

—¡Serena! —Exclamaron Darien y Amy preocupados

—Ayudame a llevarla a las sillas —le indicó Brittany con seriedad al pelinegro quién la cargo en sus brazos —Amy, consigue alcohol para mi —le pidió a lo que la peliazul desapareció enseguida, entonces Brittany se colocó al lado de la rubia hasta que Amy llegó con el alcohol con el que humedeció un pedazo de algodón el cual pasó por la nariz de la rubia —no se preocupen, sólo fue un desmayo por la impresión —susurró inexpresiva mientras las lágrimas se acumulaban en sus ojos.