Extra 3 Final

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-Derek, ven a casa pronto-pidió en mensajes de voz, tenía planeada una sorpresa y una proposición a la vez.

Había pasado la vergüenza de su vida comprando las cosas y sólo esperaba a que a Derek le gustara.

Este llegó en unos minutos a casa, pero obviamente debían comer antes, Derek era un pervertido, pero también amaba comer y significaba dar una buena cena antes de dar el platillo principal de la velada.

Cocinó el platillo favorito de Derek, filetes con papas a la duquesa, algo simple, pero que le encantaba, sirvió los platos y espero a su amado quien no tardó en llegar, o sea, si su Taylor lo llamaba iba en tan sólo 5 minutos máximo. 

Al llegar se lo encontró con aquella ropa que era casi un pijama, pero que lo provocaba y bien que lo sabía, era obvio lo que deseaba hacer en Derek, ya a estas alturas de la vida podía intuir, pero deseaba dejar la curiosidad en sus coquetos juegos. 

Comieron entre las caricias de ambos, era obvio a lo que llegaron. 

-amor... te tengo una sorpresa-dijo divertido tras dejar los platos en la cocina, tendría más tiempo después de aquello, lo que menos le importaba eran los deberes domésticos; tomo una venda para cubrir sus ojos y lo guió con sus manos y con besos como premio por dejarse llevar. 

-debes esperar un momento, ¿puedes?-Derek asintió-buen chico, ya regreso- Se preparó ocupando lo que compró, era tontamente femenino y masoquista, pero... a Derek le gustaba ese rollo, lo vio en su celular y era predecible que le gustaría la idea.

Saco lo necesario y ordenó a Derek quitarse la venda, este lo hizo encontrándose con aquella lencería negra en su novio que estaba con unas esposas en sus manos.

-he visto cuanto te gusta esto... he sido un chico malo ¿no quieres castigarme?-preguntó levantándose de la cama y besándolo, evitando la vergüenza notoria en sus rojas mejillas, aun cuando practico a solas o frente al espejo para no quedar en ridículo al hacerlo.

Derek lo agarró con fuerza, Taylor se sorprendió de que ya estuviese excitándose tan fácilmente, pero estaba igual de deseoso de ello, con sus piernas empezó a masajear las de este y con sus caderas junto más aún sus cuerpos. 

-¡Derek!-gimió temblando al sentir como jugueteaba a punto de tocar su miembro- Tómalo-pidió tiernamente, pero fue esposado.

-esto es un castigo, badboy- dijo cerrando las esposas y besándolo con brusquedad -voy a dejarte sin caminar por meses-lo lanzó a la cama y se quitó la ropa para quedar en bóxer para deleitar a su novio.  

-amor... - gimió agarrando las sábanas y siendo besado en todo su cuerpo por Derek- D-Derek...-repetía su nombre por el deseo que lo consumía hasta darle espasmos, pero más aún cuando se centraba tanto en darle besos en el bajo vientre, su punto más sensible y que más encantaba a Derek por notorios sonidos obscenos y el movimiento de sus piernas invitándolo a lo obvio, a ese lugar que tanto pedía atención.

-¿quieres que lo haga?-preguntó mirándolo a los ojos. 

-sí-dijo rápidamente al borde del deseo. 

-pero debes ganartelo-sonrió malvadamente y se sentó entre las piernas de Taylor. 

Taylor se sentó para comprender a qué se refería, se acomodo para quedar frente al boxer de Derek, empezó a delinear con sus labios y lengua el miembro de este, notaba cuán ansioso estaba porque al fin lo hiciera, pero deseaba molestarlo y ponerlo aún más, si iban a iniciar con ese estilo... tendría que tener un gran comienzo y llevar al máximo la noche.

Derek pensó en cómo convencerlo para finalmente hacerlo, ya le dolía aquello, tener a su Taylor lamiendo con tal de no hacerlo correrse, agarro la vaselina y echo un poco sobre su trasero sin cuidado a manchar la cama, sonrió ante la sorpresa en el rostro del menor, empezó a acariciar y amenazar con hacerlo o no mientras el otro lo rogaba moviendo sus caderas.

El Rechazado ♢Yaoi/Gay♢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora