El Rechazado ♢Yaoi/Gay♢

Capítulo 36

Taylor salió un día con Adriak a imprimir un trabajo, Derek a malas aceptó que Adriak fuese su amigo, aun seguía sin convencerlo de esa amistad, pero Taylor no parecía para nada interesado de esa manera en Adriak y eso le gustaba a Derek.

- sabes... debemos ir arreglando la presentación, Dema ha estado con Gilbert y no se ha preocupado mucho de ello-dijo Adriak en un tono demasiado serio para ser él.

-oh claro, ¿por que la mala cara?-

-parece ser que soy el único sin pareja-dijo riendo.

-pero tienes a Berdy-

-¿ese niñato?-

-le gustas y lo sabes-

-¿y que? No me fio de pequeños-

-...tengo la misma edad que él y sólo nos ganas por unos meses-

-aun así... no lo se, es incómodo ver que siempre observa o que cuando le saludo no puede ni responder de lo nervioso que esta-

-...¿que esperas? Si el que te gusta te nota es algo muy fuerte...dale una oportunidad-

-lo intentaré-

-vale-susurro a mala gana, deseaba que de una consiguiese a un novio y parase de ser un quejumbroso y de que este detrás de el, llegaron al lugar e imprimieron el trabajo que debían tener.

-oye ¿ese no es Derek?-pregunto señalando a este en medio de la otra calle aledaña.

Taylor miró con un dolor en el pecho como esta chica se besaba con Derek en la calle, era preciosa.

Se decidió a quedarse y no dejarse guíar por la primera impresión aunque doliera.

- dejame en paz, te dije ya mil veces-se quejo Derek.

-por favor, puedes dejar ese estupido compromiso y venir con quien siempre te ama-

-...no es un simple estupido compromiso...-

-¿y cuando le contarás a ese niñato la verdad? Le lastimarás-pregunto con odio.

-no te metas más en mi vida, el ya lo sabrá...-su voz sonaba feliz.

Adriak miró a Taylor, pero este ya estaba corriendo.

-¿por que tan feliz de decir algo que le dolerá?-pregunto la chica.

-¿con quien crees me quiero comprometer?-pregunto sonriendo.

-... eres asqueroso-

Adriak pensó si hacer lo correcto o no... odiaba a Derek, claro lo hacía, pero no quería hacer sufrir a Taylor.

Aunque pensara poder hacerlo feliz... tampoco podría reemplazar todo lo que es Derek para Taylor.

Este ahora estaba corriendo por las calles, su cabeza no lograba coordinarse y sus ojos no pararon las lagrimas, sus pies sólo querían intentar huir.

Pero no logría llegar muy lejos sin sus cosas, en el poco de cordura encontro su hogar, llego a su edificio, saco su mochila y sus cosas o por lo menos algo, de ello porque gracias a Derek su armario estaba lleno.

Salió tan rápido como entro, en silencio, el ruido de la calle por la noche era tremendo, pero todo parecía de un silencio espectral y horrendo del vacio.

Estaba cansado, llego a un hotel en donde no hizo más que lanzar a llorar nuevamente.

Su mundo se desmoronaba sintiendo como caía en un abismo sin fondo, donde su pecho dolía horriblemente.

No pensaba más que una frase.

"Soy un idiota por creer en el amor" por primera vez en su vida lloro hasta escuchar su propio llanto, como un niño pequeño esperando el consuelo de alguien quien no lo amaba, que estaba enamorado, pero no de el.

Todo fue un error desde esa noche... jamás debió creer que algún día podría enamorarlo tal como el lo estaba, que no podría vivir esa vida de en sueño que ya tenía con él...

Que todo fue una tonta fantasía, que no fue más que un chico para pasar el rato.

Derek se casaría...amaba a esa persona como para hacerlo, tras tantos años supo como era Derek, jamás conocio a sus amigos por completo porque el era muy sociable ni si quiera recordaba los nombres por completo con la gran memoria que tenía y que posiblemente ni la nombro por ese detalle.

Se empezo a odiar, no fue lo suficiente para enamorar a Derek... no logro tenerlo como deseaba... pero claro no lo lograría porque lo amaba con locura, no podría enamorarlo a esa manera de la cual sentía jamás acababa de crecer dentro de si y que tras tantos años creyendo llegaría el limite jamás llegara si no fuese más fuerte aun.

Pero debía acabar con eso, no podría evitar eso al verle...ahí en el altar, con su amada o amado, felices por siempre...juntos... la cabeza le dolía por culpa de todo.

Y en medio del derrumbe a la demencia sintio su celular, una llamada, muy predecible quien era por ser las 8:46 p.m.

Intento calmarse, no podía ni evitar una de sus llamadas porque luego venía el remordimiento y la desesperación por llamarlo.

Tomo aire y agarro el celular, al tocar la pantalla atendiendo se escucho su voz alterada.

-Tay, ¿donde estas? Me tienes asustado por favor dime- esa voz tan linda retumbo en su mente, casi lo hace volver a llorar.

-en la casa de un compañero-

-...¿por que suenas así? ¿que paso?-su voz estaba quebrada y lo sabía.

-...dime que me amas-

-¿que?-

-dimelo-

-te amo... te amo, Taylor-aun con lo asustado que estaba podía actuar como si nada.

Pero Taylor colgo la llamada, el dolor que sentía era horrendo al saber que esas palabras no eran por amor del que quería...ese ya lo tenía alguien más.

¿por que tenía que llegar ese cruel final? Esas serían por lo menos las últimas palabras que oiría de Derek, las más lindas.

No podría verlo ya a los ojos sin llorar y querer aferrarse a sus brazos deseando el cambio de la realidad con la fantasía de ser amado.

Sabía se volvía peligroso, lo sabía muy bien desde el inicio y aun así se decidió a dejarse llevar por su corazón y por el amor.

Por segunda vez sintió las ganas de huir nuevamente.

No lo pensó mucho más, algo se le pego de Derek y parecía ser lo mejor que pudo pegarse a su ser.

Algo que no supiese este, por lo menos podría despejarse de él. Pero el horrible sentir de su corazón desgarraba su alma a cada minuto sin él.

Sabía no debía enamorarse así de Derek, lo supo desde que su sonrisa le daba un vuelco al corazón y atontaba sus movimientos.

Y ahora desgarraba su alma a cada instante lejos...

Fin

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