I will always come find you (Traducción)

Capítulo 23: Mi razón para la felicidad

Se que he tardado, y lo siento. Y la verdad, creo que tendréis que esperar bastante hasta el próximo capítulo, porque ahora (o al menos en España) son vacaciones, y no voy a tener mucho tiempo. Pero quería dejar al menos un capítulo (para que no me odiéis tanto y tal).

Ahora sí, respecto a este capítulo... Creo que bastantes de vosotros os esperabais que ocurriera esto.

-Mmm, quería contártelo esta semana, pero después paso todo eso con mi padre, tu madre y tu mutismo- se apresuró Rose. Ella iba y venía por la habitación, asustando cada vez más a Albus.

-Vale, cálmate, ¿cual es el problema? - preguntó Albus. Rose finalmente se paró, y se dejó caer sobre la cama de Albus. Ambos estaban sentados lado a lado, y Rose estaba tratando de no hacer contacto visual con Albus.

-Bueno, después de cenar, Augusta y yo fuimos al baño, y nosotras...- Rose empezó pero fue interrumpida.

-Si es sobre vuestro periodo, realmente no quiero saberlo- dijo Albus categóricamente. Rose rodó los ojos y continuó.

-Bueno, estábamos las dos juntas, lavandonos las manos a punto de irnos, cuando nuestras manos se tocaron. Todo pasó muy rápido. Nuestras miradas se encontraron, y ella se inclinó y me besó. Y desde entonces no nos hemos hablado y no hemos tenido ningún tipo de contacto. Pero, creo, que tengo sentimientos hacia ella- dijo Rose. Ella dejó caer su cabeza sobre el hombro de Albus.

-Rose, sé que puede ser confuso. Yo estuve varios meses sin darme cuenta de porqué no quería que Scorpius estuviera saliendo con nadie más. Y ahora estamos felices y enamorados- dijo Albus como si eso no fuera nada.

-Pero es diferente. No tengo ni idea de lo que siento ahora mismo- admitió Rose. Albus le frotó la espalda tranquilizadoramente.

-Bueno, si ella no te quiere, es estúpida, porque eres la mejor chica que conozco, después de Lily- dijo Albus. Rose se río entre dientes, y levanto la cabeza.

-Realmente eres el mejor primo- dijo Rose. Albus le sonrió suavemente.

-Tú también- susurró Albus. Rose se levantó y se fue de la habitación. Albus estaba solo con sus pensamientos. Él siempre había pensado mucho. Ya había comenzado a echar de menos a Scorpius. Echaba de menos verle. Estar con él, entre sus brazos. Los dos juntos eran perfectos, se sentían bien. Albus sabía lo que quería en ese momento. Iba a ir a verle. Aunque fuera solo un día más. Decidió levantarse e ir a ver a su padre, que estaba en su habitación. Albus salió de su cuarto y bajo a la entrada. La habitación de su padre era la que se encontraba al final del pasillo. Albus tocó la puerta, y al no obtener ninguna respuesta decidió entrar. Allí, tuvo una visión que hubiera deseado no tener. Su padre estaba desnudo encima de su tía Hermione. Albus salió corriendo y golpeó la puerta. Albus escuchó ruidos extraños desde dentro y a su padre excitado.

-¡Papá! ¿Qué estás haciendo? ¡Mamá acaba de morir y tú ya estás reemplazándola!- gritó Albus. Las lágrimas corrían por su cara mientras asaltaba su propia habitación. Harry le siguió y abrió la puerta entreabierta. Albus estaba sentado en el suelo, cerca de su cama, acurrucado. Harry se quedó cerca de la puerta, temeroso de acercarse más.