Se supone que cuando lloras por algo recuerdas esto mientras te caen las lágrimas. No recuerdo haber estado afectada por alguna cosa, simplemente lloré bajo la ducha sin motivo alguno, dos minutos de intenso llanto que paró de golpe sin ninguna explicación, o bueno, tal vez las hormonas.
Volví al medico por un problema con mis costillas, lo mas probable es que sean cosas de mi espalda, estuve realmente preocupada porque al principio me dijeron que no iba a ser nada leve, estoy tranquila en cuanto a eso, pero desde hace unas semanas la ansiedad me ha vuelto y mi madre se dió cuenta de esto.
El mismo día se lo dijo al medico, este al ver mi historial y dos años de terapia psicológica se limitó a decirme que la próxima vez que vuelva por lo de mis costillas me daría cita para aquel sitio, odio con toda mi alma pensar que tengo que volver allí, supongo que será lo mejor dentro de lo que cabe.
No se si llega a un año que estoy escribiendo esto, me gustaría hablar un poco con la gente que me lee y que me preguntara cosas, recibir consejos me vendría bastante bien.
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No Soy Una Puta
SaggisticaTodo lo que aparece en esta historia es completamente real, lugares y nombres han sido cambiados por privacidad.
