Desde ese 17 de mayo de 1996 mi vida cambió totalmente, ya no tenía tanto miedo de salir, incluso lo empece a hacer... seguido.
Y a finales del mes antes de que se acabara en ciclo aplique para estudiar literatura en la universidad.

-¿¡CÓMO CHINGADOS QUE LITERATURA!?-.
-Papá es que...-.
-¡Nada Greggory!, ¿Cómo cambias de haber aplicado para Administración de Empresas a una carrera que ni es carrera como "Literatura" ¡Hasta pareces marica!-.
-Papá, es lo que me gusta-.
-¡Pues que pinches gustitos culeros te cargas cabron!-.

En septiembre empezó un nuevo ciclo escolar, un nuevo semestre, a mí me gustaba la escuela, leer y leer ensayos no era exactamente lo mío pero me gustaba, y a pesar de todo podía seguir yendo por mi hermana y Francis.
Mi relación con mis padres siguió igual pero notaron ese cambio positivo en mi, supongo que les gustaba pero lo que no era que la mayoría del tiempo estaba nervioso frente a ellos.
A mí abuelo yo le contaba todo y el me aconsejaba.
A Madie también le contaba todo pero ella no tenía mucho que decir, pero se emocionaba mucho.
Con Francis, todo parecía un sueño, salíamos, paseábamos, claro que con la universidad ya no tanto pero eso me hacía valorar más mi tiempo a su lado, se quedaba a dormir en mi casa, en mi recámara, en mi cama, obviamente no hacíamos nada mas que besos y abrazos, el para ese entonces tan solo tenía 15 (Casi 16) y no le dábamos mucha prioridad a una vida sexual. Lo quería demasiado, casi podía decir que lo amaba, estaba totalmente enamorado, cada segundo a su lado no podía llamarlo perfecto, pero me encataba, bueno casi cada segundo, siempre peleábamos por la misma razón: Por qué yo tenía miedo, ya no tanto como antes, pero había un miedo que no se me quitaba, y era que los demás supieran lo que había entre nosotros Si alguien más se entera nos destruirán.
Un domingo 22 de septiembre nuestro destino empezaba a asomarse.

-Vamos Gregg, no hay nadie que conozcamos aquí, dame la mano-.Insistía el.
-F no podemos bajar la guardia, lo siento-.Conteste y él hizo una mueca de decepción.

Me quede pensando y un poco triste por ello.
Llegamos a la casa y ahí estaba mi padre mirando la televisión.

-¿Cómo les fue muchachos?-.Interrogo mi madre saliendo de la cocina.
-Muy bien, gracias Dian-Ella sonrió y esperaba a que yo contestara-¿No es así G?-.

En ese momento yo estaba muy distraído.

-Ah... Si claro que si-.

Mi padre nos veía raro, me ponía nervioso y me daba miedo.
Subimos a mi habitación y permanecíamos totalmente en silencio hasta que yo terminé con aquello.

-¿G?-.Pregunte.
-Yo no tengo una explicación para eso-.
-Me gusta-.

En ese momento no pude evitar recordar el catorce de febrero.

-Francis, en la mañana te veías muy feliz, y ya no tanto, ¿Por qué?-.
-¿Acaso vives debajo de una roca?-No entendía lo que me quería decir-Ayer Clinton promulgó la ley de defensa del matrimonio-.
-Fracis somos muy jóvenes para casarnos-.
-No es eso, significa que se nos está dando esperanza, y luchemos por nuestros derechos como seres humanos...-.
-¡Siempre estás con eso!, Francis hay marchas desde incluso antes que naciéramos "Por nuestros derechos", han pasado ya casi 30 años, ¿Qué te hace pensar que en uno todo estará bien y nadie nos discriminara?, quizá eso pase hasta dentro de otros 30 o 40 años, quizá ni si quiera viviremos para verlo ¡Quizá nunca pase!-.

El se quedó callado y bajo la cabeza.

-F... Lo siento, no fue mi intención decir eso...-.
-¿Entonces por qué lo dijiste?-.
-Porque no quiero ilusionarme, no quiero que nos ilusionemos...-.
-Yo lo único que quiero es estar contigo-.
-Yo también, así que dejemos de desperdiciar el tiempo discutiendo...-.

Poco después en octubre en su cumpleaños a él lo invitaron a una fiesta, aparentemente no sabían que era su cumpleaños, no era de disfraces ni nada por el estilo aunque claro que había algunos con disfraces, Yo traía una chamarra con un estampado de calavera, cuando él llegó a mi casa para irnos a la fiesta vi que traía unos guantes de calavera y le cedí mi chamarra y yo me puse una vieja de mezclilla.

Todo iba muy bien hasta que yo abrí la boca.

-Francis ¿Cómo te la estás pasando en tu cumpleaños número 16?-.
-Muy bien porq...-.

Él fue interrumpido por un joven que parecía ser un junior alto y pelirrojo.

-¡Hey chicos! ¡Escuchen! ¡Es el cumpleaños de este chico Calvin!-.Comento realmente fuerte llamando la atención de todos.
-Es Francis-.Corregí
-¡De Francis!-.Se corrigió.

En eso todos empezaron a agobiar a Francis, incluso al pastel le pusieron una vela aromática y le cantaron feliz cumpleaños, las cosas no parecían ir muy bien hasta que a un chico se le ocurrió ponerle $5 en su cinturón, y después varios, Francis se paseó por toda la casa junto con el pelirrojo y terminó con el cinto lleno, cuando ya todos estaban demasiado ebrios nos largamos de ahí y me hizo parar en un lugar de Tatuajes y perforaciones.

-No Francis, no te dejaré tatuarte-.
-No lo haré, aún-.

Bajamos al lugar y sin pensarlo dos veces Francis le dijo al señor de barba larga y muchos tatuajes y expansiones lo que quería: Una perforación en la ceja.
Y si, me hizo a mi firmar la responsabilidad, sabía que no tenía que hacerlo pero su insistencia y mi ebriedad me hicieron ceder algo rápido.
Yo no pude ver cuando se lo hicieron me da mucho miedo todo eso.
Al final nos fuimos a mi casa y en la noche antes de quedarnos dormidos el hablo.

-Muchas gracias G, este ha sido totalmente el mejor cumpleaños de mi vida, contigo todo es tan perfecto-.

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