Yo soy Jenniffer... pero no quiero hablar de mí. Imaginen que están encerrados dentro de un mundo desconocido, entre seres diferentes que no conocen, con peligros que acechan a tu alrededor a cada instante. Bueno, por eso estoy pasando. Me siento av...
Luego de ir hacia donde oímos el ruido, vimos una monstruosa esfera que emitía ondas que lo iban transformando todo lentamente en escenas de videojuegos. En el centro de esa bola que crecía más y más, estaban 2 compañeros de Federica: Alfonso (un chico alto, fuerte, con un cabello opaco, negro, oscuro. Frecuentemente lo veía en el computador, o haciéndose el payaso del curso. Es un chico divertido la verdad, pero algo inmaduro para mi gusto) y Steffan (un chico de baja estatura, cabello castaño oscuro, y anteojos con marcos verdes, al estilo hípster. Era aficionado a los juegos electrónicos y se caracterizaba por ser todo un troll). Ambos, podían cambiar el ambiente en el que estaban, siempre y cuando, se ponían de acuerdo. Además de cambiar el ambiente, podían cambiar su estado físico y transformarlo a uno más poderoso e intimidantes.
- Él es Alfonso y él, Steffan – los presenta Federica –
- ¿Cómo los detenemos? – duda Amanda - ¿Pueden volverse más fuertes que nosotros? –
- No lo sé – dije rendida - ¿Y si volvemos? Vi una baya que, esta vez, no parecía ser venenosa –
- Dígame, por favor, que está jugando – reclama Josías –
- Ya sé – idea Crash – ¡Podemos hacer un plan que nos saque de aquí! Y yo puedo ser el protagonista qje los salva a todos –
- Si tú creas el plan, te permitiremos ser el héroe – contestó Josías - ¡Oh! ¡Ya lo tengo! Pero necesitaremos a una carnada –
- Bueno... - tartamudeé –
- Jenniffer la será – me ofrecieron Sami y Fede al mismo tiempo, mientras yo callaba, asustada –
- Bien. Primero, Jenniffer saldrá y los distraerá cosa que irán tras ella hasta esos árboles – indica Josías, entusiasmado e idealista – Luego de atraer su atención, entraremos nosotros hasta cansarlos y Crash, junto con Amanda soltarán unas sogas para atarlos y terminar con esto –
- ¿Y qué hay de mí? – pregunta Crash, sintiéndose subestimado y únicamente menospreciado –
- OK, tú cambiarás de posición conmigo ¿conforme? – responde Josías algo desesperado –
- ¡Sí! Pelearé junto con Federica. ¡Seremos inven... -
- OLVÍDALO. Federica quedará acargo de... - interrumpe Josías, quien es detenido por mí –
- Silencio, allí vienen – entro en acción y les hablo nerviosa – Hola chicos. ¿Qué cuentan? –
-...- no responden y sólo me miran con desprecio –
- ¿Saben? Les queda asombroso el color rojo en sus ojos, se ve intrépido, vengativo, mustio, sangriento – cada vez lo digo con un tono más asustadizo hasta que salgo corriendo. Ellos me persiguen y me dirijo al lugar que acordamos con el grupo. Todo iba acorde al plan, hasta que paso por ese lugar y ¡me atrapan a mí! –
Las redes me rodeaban y dificultaban cualquier movimiento que intentara para liberarme ¡eso no me agradaba!
Por fin, Josías y Federica salieron a luchar, para defenderme de ese plan fallido que pudo terminar en desgracia. Federica les daba patadas, puñetazos e impactos karatecas como una profesional. Josías manipulaba su lanza y hacía añicos a esos bravucones. Debo admitirlo, eran un gran equipo. Sin embargo, Federica fue fuertemente golpeada y Josías, consideradamente, quiso alejarla del peligro, pero no lo hizo a tiempo y ambos fueron capturados por el dúo de matones. ¡Qué mal!
Cuando creímos que todo estaría perdido para ese par de amigos, Crash salió a la acción: los encerró en llamas, luego, con ondas de flamas ardientes los empujó contra un árbol. Justo cuando imaginamos que habíamos ganado, una barra de medida, como las que aparecen en los juegos de video señalando la puntuación, energía y vidas; indicó que habían perdido una de sus 3 vidas ¡pero ya los habíamos vencido! Se renovaron y volvieron a atacar. Crash incendió hasta achicharrar a esos 2 tipos, pero al llegar a la mitad de su 2da vida, lo atraparon. ¡Nuevamente perdidos! Pero Sombra Protectora no iba permitir que fuéramos lastimados, y salió a luchar contra ellos. Alfonso crecía y crecía, Steffan le daba energía interminable; pero eso no lo detendría, ya que descubrió una debilidad trascendental... La fuerza y tamaño, energía y habilidad que aumentaba en ellos ¡sólo era una ilusión! Ninguno era o hacía lo que parecía en realidad, sólo eran falsedades y blasfemias que esos chicos inventaban para llamar nuestra atención y destruir el bosque de manera irrefrenable, llamativa y, sin embargo, lo hacían involuntariamente, inconscientemente, controlados por un Sico-rayo que los había dejado, tal cual es, "la mente en blanco".
En fin; Ambos fueron liberados de los males que los atormentaban ¿cómo? Simplemente con un GAME OVER.
Fue en verdad asombroso, pero lo que más admiro, fue el valor de Sombra Protectora al actuar tan constantemente en nuestro desempeño por conseguir el regreso a la realidad de los alumnos del 7B.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
