Cap. 7 Llegaron los problemas

3 0 0
                                    

 Sip, así es, esas gigantescas y monstruosas bestias nos encontraron o, mejor dicho, nos atraparon por culpa de Crash.

Comenzaron a acercarse a paso veloz, haciendo tronar los cielos y temblar los suelos ¡parecían querer romperse! Es más, algunos pedazos de tierra se trizaron. El polvo se empezó a levantar, estaba muerta de miedo ¡vendrían por Crash!

Justo cuando creímos que pereceríamos aplastados por colosales cuadrúpedos con cuernos, Crash se elevó levemente y los esquivó, sin embargo, eran demasiados y muy rápidos como para esquivarlos a todos. Así pues, nuestro anterior "héroe" tuvo que interponerse entre el monstruo y el chico ¡qué bélico! Pero muy valiente también, algo torpe, pero valiente.

Voló por los aires, aturdido, cuando de la nada, Sombra Protectora reapareció. Y lo atrapó. Se lo encargó a Fede ya que se veía muy mal y, al parecer, ella sabía de curaciones (bueno, eso es obvio ya que su madre es enfermera, y está muy unida a ella, preparándola para cualquier caso como el que recién se le presentó).

Sigamos con lo de Sombra Protectora. Éste misterioso personaje levantó, con sus "poderes mentales", muchos troncos de árboles caídos, o derribados por los Rinocornios carnívoros, y se los lanzó, demoliéndolos y haciéndolos puré. Por suerte para algunos de ellos, pocos escaparon y se alejaron tan rápido como un rayo.

- ¡Sombra Protectora! Qué alegría tenerte de vuelta ¡nos salvaste otra vez! – dije gozosa – te debemos demasiado –

- Mjjmjmj – murmura él – ustedes no me deben nada...y menos él –

Después de decir aquello da una increíblemente cool pirueta y desaparece, de entre las tinieblas.

- ¿Sombra Protectora? – dice impactada Sami –

- ¡¡¡¡Sombra Protectora volvió por mí!!!! – exclamó estupefacto Crash –

- Sinceramente, creo que vino por Josías, no por ti – confesé algo incómoda –

- ¡OOohhhhhh! – clamó decepcionado –

De verdad creo eso.

Al rato después, oí una conversación bastante interesante, pero es privada, Secreta, CONFIENCIAL. ¡Ña! ¿¡a quién le importa?!:

- ¡Ah! ¡Eso duele! – clama Josías, aguantando el enorme dolor –

- Lo sé, aguanta – comenta Fede – Eres muy valiente por demostrar cuanto él te importa –

- ¡Ahm! Gracias – expresó Josías –

- Aunque igual muy torpe por no haber pensado antes sus consecuencias –

- Retiro lo dicho –

Mientras Fede le aplica un vendaje especial a Josías, este la mira tiernamente y sonríe:

- Por cierto, lo que pasó allá en denante, detrás del tronco, tú sabes – aclara nervioso –

- ¡Oh, sí! Lo siento – implora con simples suspiros Federica – yo no quería... -

- ¡Sí! Eso. Casi nos... –

- Golpeamos muy fuerte la cabeza – excusa Federica -, el uno al otro –

- No – dice con una tierna y suave voz, después de una pequeña pausa –

Ambos se miran, con una conexión especial e incomprensible, hasta que son interrumpidos por Crash:

- ¿¡Qué cuentan, chavales?! – dice y los coge de cuello con ambos brazos, mientras Josías se muestra algo agobiado –

- ¡¡¿Cómo se te ocurre!!? – lo intimida Josías –

- Oye, tranquilo. Vamo' a calmarnos – dice Crash a todo lo flaite que se le da la gana – No quería interrumpirlos en su charla... -

- ¡Casi nos matas! – reclama sumamente furioso, resoplando –

- Creí que ya me habían perdonado, amigos –

- Sí, pero – dice Fede –

- Pero nada ¡nos pusiste en peligro! Y lo peor tú podías volar. Pudiste haberte escapado, pe, pe, ¡pero no lo hiciste! – lo vituperó directamente – Nos pusiste a todos en riesgo, y eso es imperdonable –

- Yo no tengo la culpa – engrupió Crash firmemente –

- ¡¡SÍ LA TUVISTE!! Siempre ¡Siempre la tienes! –

- Tranquilízate Josías – se entromete Fede, he intenta calmarlo –

Josías, quien se había puesto de pie, respira y se sienta.

El silencio perdura entre 30 y 60 minutos.

Alguien suelta una palabra:

- Sami – digo - ¿Cómo dices que nos conoces tanto? –

- Cuando Crash y yo fuimos a buscar bayas Natacha, una hermosa ninfa de cabellos rubios y ojos verde agua, ama de la paz, las artes y la naturaleza, hermana de un ser mortal. Natacha nos avisó que alguien perturbaría nuestro hogar, y que para salvarlo de un horrendo final deberíamos acoger a 2 de quienes podrían rescatarlo ¡esas eran tú y ella! No le dijimos mucho a Josías, más le mostramos de quienes debía estar precavido de encontrar –

- ¿En serio? – dijimos al mismo tiempo –

- Pero, ¿¡¡Cómo?!! No soy una heroína, ni tan valiente como ella – dije desilusionada –

- Eso no es cierto – me consoló – Esperen un momento. Si ya cumplimos cierta parte del trato ¡Quiere decir! -

- ¡¿Qué quiere decir!? – preguntó Federica –

- ¡Oh, oh! –

- ¡Oh, oh! –

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

................................................................................................................................................................

Así más o menos podrían imaginarse a Natacha... ¿Qué tal va todo?

Espero les guste...xoxoxo


Las Crónicas del 7°BWhere stories live. Discover now