Capítulo 39. |Perdóname, por favor.

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Leah.

Aaron no ha parado de enviarme mensajes, de llamarme y de buscarme de cualquier forma posible, y no es que lo esté ignorando, es simplemente que necesito espacio para pensar bien las cosas, y este fin de semana en casa de los abuelos me hará muy bien. A pesar de mi tristeza estoy muy feliz de volver a ver a los abuelos Jenner. Son los abuelos más divertidos, cariñosos y extrovertidos, parecen niños con las cosas que se inventan.

La abuela Sarah hace cada final de verano un campamento en su ciudad y van muchos jóvenes del pueblo. Lamentablemente me lo he perdido por muchos años, pero esta vez iré y ese campamento será mi ayuda para pensar bien las cosas. Termino de cerrar mi equipaje y bajo las escaleras dejándolo junto a todos los demás equipajes de la familia. Camino a la cocina y veo a Lexie servirse una taza de café. Ella me mira mientras yo me sirvo otra y no me quita la mirada de encima mientras tomo a sorbos la cafeína.

—¿Qué tanto me miras?—le pregunto divertida.

—Terminaste con Aaron y no me contaste nada.

Suelto un suspiro dejando la taza en el mesón.

—Sabía que Alice te llamaría y te lo contaría, así que... —me encogí de hombros—. No quiero hablar de eso.

Ella se acerca a mí.

—Lo sé Lee, y por lo que Alice me contó tienes toda la razón de estar enojada, yo también lo estoy con él, es más que ni se le ocurra llamarme porque lo mandaré a la mierda.

—Es temporal, al menos eso pienso, necesito pensar Lex, saber si de verdad Aaron no va a volver a tratarme de esa manera.

—Lo entiendo, e irnos de fin de semana con los abuelos nos hará muy bien.

Sonreí.

—Eso es cierto, muero por llegar a Texas ya—dejé la taza a un lado y volví a mirar a Lexie—. ¿Y tú? ¿Volviste con Alexander?

Ella me mira algo asustada por mi sorprendente pregunta y suelta la respiración con pesar.

—No es que hayamos vuelto, solo...nos estamos viendo de vez en cuando.

Niego lentamente con la cabeza.

—No voy a reclamarte ni a decirte si está bien o no Lex, pero...¿estás segura que eso es lo que quieres?

Ella me sujeta la mirada un instante y es ahí donde me doy cuenta que no es lo que ella realmente quiere.

—Claro que sí Lee, sabes que Alexander es el hombre que yo siempre he amado, no tienes ni porqué preguntarlo—lo dice bastante dudosa.

—¿Y Jared? ¿No piensas ni un poquito en él? ¿De verdad no sientes nada por él?

Papá entra a la cocina interrumpiéndonos y nos mira con una sonrisa.

—Mis pequeñas, su amigo Travis ya está aquí, vengan a saludar.

—Ya vamos, papá—le responde Lexie. Papá sale de la cocina y Lexie vuelve y me mira—. Olvidemos ese tema Lee, no quiero tocarlo por nada en el mundo.

Sale de la cocina con el semblante triste. Ella está enamorada de Jared, pero se dará cuenta tan tarde que creo que no habrá más oportunidades para ella.

Camino hacia el living y veo a Travis que platica con papá y Lexie con su equipaje a un lado. Travis viene con nosotros a Texas. Lexie le habló sobre el viaje a casa de los abuelos y mi padre le propuso si quería ir por motivo del campamento y Travis sin pensarlo dos veces aceptó. Mi padre también se lo comunicó a Aaron, pero no permití que él aceptara.

Mi Perdición #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora