11

7.2K 499 128
                                    

El padre Gabriel se encontraba dando misa junto a los paneles solares, rodeado de personas.

Rosita le enseñaba a usar el machete a otras, junto con Tara.

Maggie hacía vigilancia, esperando una señal de su esposo.

Rick trataba de asegurar el muro con columnas de madera, mientras yo le hacía compañía.

- ¿Crees que resistira?.- pregunté mirándolo.

- Esperemos que sí.- contestó pasándose la mano por la frente, en un intento de limpiar el sudor que bajaba por esta.

- ¿Y si no?.

No contestó. Se limitó a fijar su vista en el martillo que tenía en la mano.

- ¿Que te parece si vamos por un vaso de limonada?. No quiero alardear, pero soy muy buena haciendola.- comenté, tratando de que se relaje un poco.

Sonrió y se volteó para mirarme.

- Me parece una muy buena idea.- dejó el martillo en el suelo y se levantó, comenzando a caminar hacia la casa. Sonreí y me levanté para seguirlo.

Al levantar la vista pude distinguir a Carl con un sombrero de sheriff en su cabeza, acercandose a nosotros, Ron venía detras de él, con la mirada fija en la espalda del chico Grimes y una expresión de pocos amigos.

Desde aquel caótico ataque, Ron cambió mucho, cosa de la que no puedo culparlo. Vio a su padre convertido en caminante, y a sus amigos acabar con lo que quedaba de él.

Los saludé con la mano, recibiendo una respuesta solo del castaño.

Ha pasado un mes y pocos días desde mi llegada, y puedo decir que ya forman parte de mi corazón. Son los mejores amigos que se puede tener. Siento a Enid como una hermana, y a Mikey como el primo tonto que no puedes dejar de querer.

Un ruido nos hizo voltear. Al darnos la vuelta, no pude creer lo que vi. Todo pasó demasiado rápido.

La torre que se encontraba detrás de la muralla comenzó a caer, llevándose el muro consigo, y los caminantes comenzaron a meterse en Alexandria.

Eran demasiados, nunca había visto tantos juntos.

- ¡Todos a sus casas. Ahora!.- gritó Rick mientras corría.

Decidí no escucharlo. Saqué mi pistola y comencé a disparar.

- ¡Rick!.- voltee y pude notar a Deanna, corriendo hacia nosotros con una pequeña pistola en manos.

- Tienes que volver.- le dijo Rick, mientras disparaba a los caminantes que se nos acercaban.

- Tenemos que volver.- le corrigió la mujer, imitando su acto.

En un momento un caminante se abalanzó sobre Deanna, haciéndola caer. Le disparé a esa cosa y Rick la ayudó a levantarse. Pasó una mano por su hombro, ayudándola a caminar.

Comenzamos a correr, nuevamente, siendo seguidos por Gabriel, Carl y Ron.

- Que bueno que están bien.- exclamo con alivio Rick al verlos.

Al doblar a la esquina, nos topamos con Michonne empuñando una hermosa y delicada espada. Detrás de ella se encontraba Jessie disparando a los caminantes más cercanos.

- ¡Vamos, tengo a Judith!.- avisó la rubia comenzando a correr, con nosotros siguiéndola.

Nos metimos en su casa y subimos las escaleras.

- ¿Qué diablos es esa música?.-pregunté ya estando arriba. Estaba desesperada, y esa música horrible no ayudaba.

- Yo me encargo.- dijo Jessie yendo hacia una puerta.

Alive- Carl Grimes [ Completa Y En Edición ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora