The Kid (Meanie)

16.

—Gracias por acompañarme —suspiró Wonwoo antes de salir de la casa.

—No tienes que agradecer, Wonwoo —sonrió Mingyu. Aunque intentara reconfortarlo con una linda sonrisa, él tampoco estaba feliz por esto—. No podría dejarte solo en este momento... yo también me hice cargó de él.

  Wonwoo había tomado todas las cosas que había comprado para Ki Su y las había metido en una mochila con toda la lentitud que le fue posible, mientras Mingyu despertaba y vestía al niño. Ninguno de los dos quería alejarse de él, pero Wonwoo era quien mas deprimido se encontraba.

  Al subir al auto, ambos se mantuvieron en silencio hasta llegar a la comisaría, donde se encontrarían con la madre de Ki Su. 

Cuando llegaron Wonwoo apagó el motor, suspiró pesadamente y tomó al niño en brazos antes de bajar del auto. Mingyu bajó con la mochila y las cosas, después de Wonwoo. Y ambos entraron al edificio con lentitud.

  Ahí estaba la mujer, mirando a la puerta en espera de ver a su hijo de nuevo. Pudieron notar que era idéntica a él; cabello negro, mejillas regordetas y dos tiernos hoyuelos que en sus mejillas se formaban al sonreír.

—¡Ki Su, bebé! —exclamó la madre caminando a toda velocidad hasta el niño.

  El pequeño, al verla estiró los brazos hacia ella y la abrazó cuando estuvo entre los brazos de su madre. Los ojos de esta derramaban lagrimas de felicidad mientras abrazaba y besaba a su hijo repetidas veces, mientras que Wonwoo contenía las terribles ganas de llorar y Mingyu sujetaba su mano con fuerza.

—Muchísimas gracias por cuidar de mi niño este tiempo —dijo la mujer secando sus lágrimas—. Estos cuatro días sin saber que era de él... si estaba vivo, si no era así... fue el mismísimo infierno.

—Ki Su es un niño adorable... tiene suerte de tener un hijo como él —sonrió Wonwoo, sin fuerza alguna.

—¿Cómo es que pasó? ¿Cómo es que se perdió? —inquirió Mingyu.

—Su padrastro se lo llevó... lo secuestro —sus ojos estaban llenos de rabia—. El no lo quiere, no lo quiere desde el primer momento en que lo vio. Pero no pensé que llegaría a hacer tal cosa...

—Que mierda de persona, santo cielo —gruñó el moreno.

—Aún así les agradezco por todo, es bueno tener a mi bebé sano y salvo conmigo otra vez —sonrío.

—Esto... esto son cosas que compré para él... hay pañales, un chupón y ropa —Wonwoo le entregó la mochila a la madre, que quiso tomar las cosas y devolverle la mochila vacía pero el se negó—. No se preocupe... tengo otra.

—Muchísimas gracias otra vez... pero es hora de irme —sonrió.

—¿Puedo... abrazarlo antes de que se vaya? —balbuceó el azabache.

—Claro... imagino que te encariñaste rápido con él —dijo su madre, entregando le al niño a Wonwoo.

  Sin decir una palabra, Wonwoo abrazó el pequeño cuerpo del niño y este le devolvió el abrazo. Las lagrimas comenzaron a brotar de los ojos de Wonwoo, sin poder detenerlas.

—Wonwoo —dijo él niño con una sonrisa en el rostro.

—Crece sano, Ki Su... se fuerte y no dejes que nadie te haga daño, ¿entendido? —preguntó mientras el niño tenía una mano en su nariz.

—A pesar de que yo no fui el mejor niñero... eres un gran niño —comentó Mingyu—. Cuídate, bebé.

—Mingu —exclamó el pequeño. Una gran sonrisa se dibujo en el rostro del moreno, al menos antes de irse, había dicho su nombre.

—Si, Ki Su... ese es mi nombre —dijo con felicidad—. Repítelo... ¿cómo me llamo?

—Iota —respondió.

—Si, era muy bueno para ser verdad —comentó. Wonwoo soltó una risita, pero sus lágrimas seguían cayendo por sus mejillas. Mingyu miró a la madre del niño—. Lamento eso, me oyó insultar a una pelicular...

—Yo también insulto mucho... si no lo aprendía de ti lo haría de mi —rio su madre.

  Wonwoo le entregó al niño una vez mas y se apartó a un lado, para que después de intercambiar unas palabras de despedida mas, fuera del edificio. La mujer y el niño se fueran.

  En cuanto el auto de la madre desaprecio en la lejanía, Wonwoo abrazó a Mingyu y comenzó a llorar nuevamente. El mas alto se sorprendió al sentir los brazos del mayor rodeando su cintura mientras su cabeza se escondía en su pecho, pero no tardó en corresponderle el abrazo de forma reconfortante.

—Deberías estar feliz por él... —susurró— ahora está de nuevo con su familia.

—Lo estoy... —lo miró sin soltarse del abrazó e intentando detener sus lágrimas— Pero lo extrañaré mucho.

—Yo también lo extrañaré, hyung... yo también —susurró y besó su frente con delicadeza—. Es casi gracias a él que puedo tenerte así, entre mis brazos.

  Wonwoo se sonrojó y volvió a esconder su cara en el pecho del mas alto. Sus lagrimas se detuvieron de a poco, era reconfortante tener a alguien para él en ese momento... y lo era aun mas que esa persona sea Mingyu.

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N/a: #LauraSad </3 

Lloré escribiendo esto(por eso me disculpo si hay algún error), no iba a subirlo hoy pero no me aguanté... espero que les haya gustado♥

Ki Su-ah, te vamos a extrañar T_T